Rock

Guía completa de lugares fundamentales en la historia del rock: Londres

Guía de viaje por Londres a cargo de Cecilia Martin.

portada nota Londres
portada nota Londres

Cuando me preguntan por qué Londres es mi ciudad favorita, entre las muchas razones que tengo, una de las principales es que no hay otra ciudad en el mundo con tanta historia musical encima.

No hay ciudad con un pasado (y al menos por ahora un presente) más rockero. Y lo que más me gusta hacer cuando estoy ahí es recorrer esa historia. Si no visité el pub donde debutaron mis músicos favoritos, o si no merodeé por el barrio en el que crecieron, es como no haber estado en Londres.

Esta no es una guía objetiva e impersonal, es la lista de los lugares que yo elegí visitar, por la música que me gusta, por los artistas que admiro y porque por alguna razón me provocaban algo; emoción, curiosidad, piel de gallina, incredulidad, nudo en la garganta o al menos ganas de guardarme esa imagen. Lugares que son solo una nota al pie de página en la historia del rock no me interesan, lugares que salen hasta en el programa de Iván de Pineda, como Abbey Road, tampoco.

De algunos de ellos hablé antes en el blog, pero acá están todos juntos; esta es MI guía completa de lugares londinenses que forman parte de la historia del rock.


Berwick Street

Soho

En Berwick Street, hace más de 20 años, se hizo la foto de tapa de (What’s the Story) Morning Glory?

Parece que los hermanos más busca roña del rock (y mucha gente más en esa época) frecuentaban mucho esta calle, famosa en esos días por sus muchas disquerías independientes, pero también por sus locales de ropa alternativa y su vida nocturna. Hoy quedan algunas disquerías y varios locales de ropa, más de uno con la foto de la tapa del disco pegada en la vidriera.

Pero Berwick Street, por suerte, no se convirtió en un parque temático como Camden, ni en una parodia de lo que fue. El orgullo de los comerciantes que ponen la foto de (What’s the Story) Morning Glory? en la vidriera parece realmente auténtico, y todavía, cuando se la observa bien, puede verse que en los 90 esta calle fue parte importante de una movida. Y que ahora, medio pelada y con mucha panza, es parte de la creciente nostalgia por ella.

*Uno de los comerciantes orgullosos.


Garden Lodge, el último hogar de Freddie Mercury

1 Logan Place, Kensington

La verdad es que lo que a mí me gusta ver son las casas en las que mis artistas favoritos se criaron, o en las que descubrieron que querían ser artistas, o en las que dejaron de ser “el pibito de la vuelta” para convertirse en la cara que ahora llevamos estampada en una remera. El lugar que les tocó en suerte y en el que no tuvieron otra cosa que hacer que sus mejores discos, y no el lugar que eligieron para recluirse una vez millonarios.

Pero es difícil mantenerse indiferente al estar frente a Garden Lodge, que supo ser la casa de los sueños de Freddie, y que lo vio llegar como una estrella para después verlo apagarse poco a poco. Algo de Freddie habrá ahí, y por eso su ex mujer sigue viviendo en esa casa y la sigue conservando exactamente igual que cuando él se fue, con la misma decoración extravagante. O tal vez es justamente por eso que en Garden Lodge todavía hay algo de Freddie.

*Esos remaches negros sostienen los paneles de acrílico que protegen los ladrillos de las pintadas y mensajes que pegan los fans y que terminaron colmándole la paciencia a Mary, la ex mujer de Freddie.


El museo V&A

Knightsbridge

En el Victoria & Albert Museum (o V&A), uno de los muchos y mejores museos gratuitos de Londres, hay una sección permanente de Art and Performance, donde pueden encontrarse posters originales, memorabilia de shows y varios trajes y vestimentas originales usadas en presentaciones en vivo. Hay cosas de los Pistols, Siouxie, Queen, Lou Reed, los Stones, Zeppelin y muchos más.


Librería Foyles, Ex St Martin’s College

107 Charing Cross Rd, Soho

Debo decir que este lugar, que hasta 1989 era el St Martin’s College of Arts y hace unos años se convirtió en la librería Foyles, para mí es famoso porque es la universidad que nombra Jarvis Cocker en el tema Common People de Pulp, en donde estudia la chica esta que quiere hacer todo como la gente común. Pero también es el primer lugar donde tocaron los Sex Pistols en Londres, el 6 de noviembre del 75, cuando fueron la banda soporte de una banda que se llamaba Bazooka Joe (¿Qué habrá pasado con esos, no?).

Entrando hoy ahí no puede reconocerse una universidad, pero como librería es enorme y muy completa, sin dejar de resultar íntima.


Battersea Power Station

1 Circus Road West, Battersea

Alguna vez tapa del disco Animals de Pink Floyd, la estación eléctrica de Battersea está ahora a punto de convertirse en… ¡sí, viviendas!

La zona de Battersea, respecto de lo que era en los 70 está MUY revitalizada, y de hecho se construyó tanto alrededor de la ex estación en estos años que es prácticamente imposible verla a menos que te vayas a un puente y la mires de lejos. Acá viéndola en plena renovación y rodeada de grúas desde el puente de Vauxhall.


“Sex”, el local manejado por Malcolm McLaren y Vivienne Westwood

430 King’s Road, Chelsea

¿Quiénes eran los vandalitos que se juntaban a pasar la tarde acá? Sí, los tiernos de los Sex Pistols solían frecuentar este local cuando todavía se llamaba Sex, vendía ropa fetichista, y los dueños eran Malcolm McLaren y su entonces novia Vivienne Westwood. Acá fue donde McLaren agarró a dos de sus clientes, Paul Cook y Steve Jones, los juntó con el vendedor de la tienda, Glen Matlock, y les tiró encima a otro cliente que andaba por ahí, John Lydon, creando a los Sex Pistols.

El local hoy en día se llama World’s End y sigue perteneciendo a Vivienne Westwood y a su marca de ropa. 


La casa donde se crió Bowie

40 Stansfield Road, Brixton

Cuando empecé a escuchar a Bowie – y empecé por la época glam – su música me hacía imaginar barrios ingleses de clase media, comunes y corrientes, de casitas ordenadas, calles silenciosas, y ventanas que dan a cocinas donde la pava ya está silbando y la taza de té está esperando. El cliché ingles, bah. Y por alguna razón, Bowie, que no es ni ordenado, ni silencioso, ni común, ni corriente, y que cuando una lo escucha quiere bailar, y cantar, y armar una banda, y ser estrella de rock, y disfrazarse, y teñirse el pelo y usar brillos aparte de solo poner la pava y tomar el té, me hacía pensar en un lugar así, su exacto opuesto.

Y un lugar exactamente así fue lo que encontré cuando llegué al barrio donde nació Bowie; el barrio más inglés, común y corriente que podía haber imaginado cuando escuchaba Changes en mi habitación en Boedo, y de donde salió el artista más alienígena que los barrios de casitas inglesas y tazas de té jamás hayan visto.

*Este mural, frente a la estación de subte de Brixton, fue pintado por un artista callejero australiano en el 2013, y el mismo día de la muerte de Bowie, instantánea y espontáneamente se convirtió en un centro de reunión al que se acercaron miles de personas a dejar flores. Desde ese momento el ayuntamiento decidió cubrirlo con vidrio para preservarlo y perpetuarlo como un memorial.


Imperial College Union

Beit Quadrangle, Prince Consort Rd, Kensington

Acá fue no solo donde Queen tocó por primera vez, sino donde nació.

En el 68, Brian May puso un aviso en la cartelera de la universidad buscando un baterista estilo Mitch Mitchell/Ginger Baker. Y lo llamó Roger Taylor. Ellos, y un pobre hombre que se debe querer morir, formaron la banda Smile, que después de separarse y sumar a Freddie Mercury, pasó a convertirse en la reina. Ahí mismo fue donde tocaron por primera vez como Queen, el 18 de julio del 70.

*Esto que llegué a ver y fotografiar, justo enfrente del Royal Albert Hall, es la parte de atrás del edificio, porque obvio que en algún momento me iba a perder y caer en cualquier lado. Me enteré una vez de vuelta en casa que este no era el frente.


El ex Joe Strummer Underpass

Edgware Road Station, Marylebone

Joe Strummer tuvo un paso subterráneo nombrado en su honor… pero le duró poco. Lo inauguraron en 2009, en la esquina en la que él solía tocar como músico callejero. Y lo cerraron en 2018 porque por la nueva fisonomía de la zona ya no es necesario un paso subterráneo.

*Esto es lo poco que quedaba, al menos hasta diciembre de 2018, dando cuenta de que alguna vez hace muy poco tiempo esta esquina homenajeaba a su músico callejero más famoso.


Hope and Anchor pub

207 Upper St, Highbury

En Hope and Anchor tocaron los Ramones, Madness, The Jam, The Cure, The Clash, The Damn y hasta U2 cuando solían ser chéveres. Pero lo que me llevó a mí hasta ahí, fue que en este pub tocó por primera y segunda vez en Londres Joy Division, en diciembre del 78 y en marzo del 79. Peter Hook habla en su libro Unknown Pleasures: Inside Joy Division acerca de lo frío y húmedo que era ese lugar, de lo mal que la pasaron tocando, y de que la primera noche habría como máximo 20 personas escuchándolos. Esa noche del debut, volviendo en auto desde Londres hacia Manchester, Ian Curtis tuvo su primer ataque de epilepsia y tuvieron que llevarlo a la guardia. Evento que según varios de los involucrados en toda esta historia, marcó el principio del fin.


El primer hogar londinense de Freddie Mercury

22 Gladstone Avenue, Feltham

En esta casa, a la edad de 18 años nació Freddie Mercury. Feltham es el lugar que vio llegar a su familia a Londres después de huír de Zanzíbar, que lo vio trabajar de maletero en el aeropuerto de Heathrow mientras se deslumbraba con el Swinging London, que lo vio encontrar su identidad en un lugar tan distinto de la India en la que había pasado los últimos nueve años como pupilo.

Esta casa lo vio acaparar el baño para hacerse peinados que avergonzaban a su hermana, lo vio irse un día para pasar años viviendo de casa en casa de sus amigos en el centro de Londres, y lo vio volver todas las semanas del resto de su vida para visitar a su mamá, que siempre lo esperaba con dhansak, su comida preferida.

*Este memorial lo inauguraron hace unos años en el centro comercial del barrio, en 21 High Street, a 10 minutos caminando de la casa de Freddie. Brian May también vivía acá, a unas cuadras de lo de Freddie.


Heddon Street

Mayfair 

Acá es donde se hicieron las fotos de la tapa y contratapa de Ziggy Stardust; la tapa en el número 23 de la calle, y la contratapa en la cabina telefónica de la esquina, cuando Heddon Street era una callejuela cualquiera de Londres, con pilas de basura y todo.

Hoy no queda nada de lo que se veía en esas fotos, NADA. La calle se convirtió en una peatonal llena de restaurantes y lo único que puede encontrarse ahí ahora es una placa conmemorativa, y por lo que vi, algún que otro visitante que también viene a chusmear qué quedó de ese lugar.

Y lo que quedó son unas oficinas y un restaurante lleno de cincuentones de plata. ¿La mismísima historia del rock?

*Así se vería la tapa de Ziggy Stardust ahora… 


La terraza de Apple

3 Savile Row, Mayfair

Esto ya se ha visto, qué agradable sujeto. La terraza de Apple me hace pensar más en Los Borbotones que en los Beatles. Pero sí, fue acá donde en enero del 69 tocaron por última vez en vivo.

Y no hay mucho trasfondo acerca de la elección del lugar, Ringo Starr con sus siempre sabias y simples palabras lo dijo: “Teníamos el plan de tocar en vivo en algún lado. Nos preguntábamos dónde podíamos hacerlo. Mencionamos el Palladium o el Sahara, pero íbamos a tener que llevar todos los equipos, así que pensamos, ‘Vayamos a la terraza'”.

Ahora, la ex sede central de Apple, es un Abercrombie & Fitch Kids.


El Bar Italia

22 Frith St, Soho

Si querés comer barato, rico, ecónomico, sentarte en un lugar cómodo y que te atiendan super bien, con calidez y simpatía, no vayas al Bar Italia.

Su personal, que casi siempre te trata como si te estuviera haciendo un favor, muy probablemente sea en parte el mismo que hace más de 25 años atendía a Jarvis Cocker, cantante de Pulp, durante las madrugadas del Soho, cuando el bar era lugar de reunión de los que salían de los boliches y todavía no querían volver a casa.

La canción Bar Italia, del disco Different Class, habla de estas madrugadas. Y realmente es de los MUY pocos lugares en Londres que está abierto casi toda la noche.

Adentro está lleno de fotos de famosos (famosos para alguien, asumo, porque por algo están sus fotos, aunque yo no conozco a nadie), pero no hay referencia alguna ni a Jarvis ni a Pulp ni a Bar Italia. Siempre que voy me pregunto si la gente del bar tendrá idea de que uno de los mejores poetas del rock inglés una vez les hizo una canción.

“Eso es lo que te pasa por salir de fiesta
No podés irte a casa y acostarte
Porque todavía no se te pasó el efecto
Y ahora ya amaneció                  
Solo hay un lugar al que podemos ir
Está acá a la vuelta, en el Soho
El lugar donde va la gente arruinada”

Bar Italia, Pulp 


Electric Ballroom

184 Camden High St, Camden Town

En el Electric Ballroom tocaron Joy Division, The Smiths, Megadeth, Paul McCartney, Prince y muchos etcéteras, y se grabaron montones de DVDs y discos en vivo. Es uno de los venues más famosos y con más historia todavía en pie en Londres, y también funciona como boliche.

Normalmente es bastante rockero, aunque a mí me tocó conocerlo en la noche de power ballads y bailando al lado de una chica que gritaba entre lágrimas un tema de Whitney Houston.


The Water Rats

328 Grays Inn Road, Kings Cross

En este pub, en enero del 94, Oasis tocó por primera vez en Londres (También fue donde Bob Dylan debutó en el Reino Unido, pero no vamos a caretearla, acá fuimos por Oasis). Aparte de ellos dos, montones de bandas y artistas de rock y de pop tocaron acá, hasta tocó Katy Perry antes de pegarla.

Hace unos años al pub le hicieron una lavada de cara, y la verdad es que ahora una pasa y no da dos pesos porque en ese lugar alguna vez haya habido, y siga habiendo rock. Pero supongo que ya no muchos lugares hoy en día siguen no solo siendo, sino pareciendo rockeros.


El O2 Brixton Academy

211 Stockwell Rd, Brixton

Otro venue legendario de Londres. Acá sí que se grabaron DOCENAS de discos, videos y DVD’s. Y aparte de haber sido votado 12 veces venue del año por los lectores de la NME, es el último lugar del mundo en el que tocaron los Smiths.


The Good Mixer

30 Inverness St, Camden Town

La relación de The Good Mixer con el rock es que en los 90 era muy frecuentado por los miembros de Blur, especialmente por su guitarrista Graham Coxon, que si no lo encontraban en la casa venían directo a buscarlo acá.

Y no puedo dar fe de cómo era en los 90, pero hoy tiene muy buen ambiente y les sigue gustando pasar britpop.


El Hard Rock Café

150 Old Park Lane, Mayfair

Cabe aclarar que para entrar a la bóveda no hace falta consumir en el Hard Rock Café, ni siquiera hace falta entrar, porque la tienda de regalos está en la esquina del bar.

Hay cosas que nunca entendí ni entenderé en la vida. Una de ellas es la atracción de la gente por el Hard Rock Café. Me parece el lugar menos rockero del mundo. Aunque confieso que a veces me meto solo a chusmear para ver qué tienen, la mayoría de las veces encontrando más y más remeras usadas por Shakira en algún show que ni ella recuerda.

Pero me habían pasado el dato de que en la tienda de regalos del Hard Rock Café de Londres, que por cierto es el original, hay una bóveda subterránea que abren una vez cada hora/hora y media. Justo pasé por ahí y justo era la hora de abrir la bóveda, así que fui a chusmear a ver cuántas remeras de Shakira tenían, cuando me sorprendí encontrando una guitarra de Bowie y una silla china que había pertenecido a la excéntrica decoración de Freddie Mercury.


La tumba de Malcom McLaren y su epitafio punk

Cementerio de Highgate, Swain’s Lane, Highgate

“Mejor fracasar espectacularmente, que tener un éxito modesto”.

Y para terminar, algo que me encontré de casualidad mientras pasaba la tarde en el cementerio de Highgate; la lápida de Malcom McLaren. Es imposible saber si la historia musical de Londres, y la del mundo, hubieran sido las mismas sin la gran estafa del rock & roll que McLaren ayudó a crear. ¿Existirían Pulp y Oasis? ¿Existirían The Cure, Joy Division y la insoportable autobiografía de Morrissey? ¿Biff sería millonario?

Y aunque McLaren no sea John Lennon, y su tumba no guarde el interés de Abbey Road, si se anda por el cementerio vale la pena pasarse a verla y leer uno de los epitafios con más sentido del humor de Londres.

Nota y foto por Cecilia Martin Fotógrafa