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La Chapa del Campeón

Miami Heat borró de la cancha a los Indiana Pacers en el séptimo juego de las Finales de la Conferencia Este. Cuando la premisa era “win or go home”, los actuales reyes de la NBA sacaron lo mejor de sí para vencer 99-76 a los de amarillo, y meterse en la disputa por el título ante San Antonio Spurs. 12 minutos del último partido duró la ilusión de los Pacers de quedar en la historia. Ganarle 4 partidos en una serie a un equipo que sólo perdió 16 de 82 en la temporada regular era quedar en la historia. Indiana se hizo fuerte en los juegos pares (ganó el 2 como visitante además del 4 y 6 en casa) y consiguió elevar al máximo las potencialidades del mejor equipo desde 2010, el año de la formación del Big Three. Sólo el  primer cuarto del match decisivo fue favorable en algún modo a los visitantes, que se llevaron el parcial por 21-19. [caption id="attachment_77265" align="alignright" width="620"]El MVP de la temporada regular tuvo un gran partido. Además borró a Paul George del encuentro decisivo. El MVP de la temporada regular tuvo un gran partido. Además borró a Paul George del encuentro decisivo.[/caption] De ahí en más todo empezó a salir mal para el equipo de Frank Vogel. Del otro lado Erik Spoelstra convenció a sus jugadores de que no podían permitir canastas fáciles cerca de la pintura. Desde el segundo cuarto el Heat tomó la premisa de su entrenador con una doble tarea: primero intentar cerrar las líneas de pase hacia los internos dificultando tanto la recepción como el pase, y si el mismo llegaba a las manos de David West o de Roy Hibbert, doblar y hasta triplicar la marca sobre ambos, obligándoles a pasar la bola, rubro en el cual no se destaca ninguno de los dos jugadores. En los primeros dos cuartos de juego entre Hibbert y West solo tomaron 9 tiros, un número elocuente que explica por sí solo los impedimentos que impuso la defensiva para evitar sus intentos al aro. Con una tremenda presión defensiva y mucha agresividad en el otro canasto, atacando la llave permanentemente, Miami dio vuelta el resultado para terminar la primera mitad con una ventaja de 52-37. Incluso teniendo un porcentaje de cancha más bajo (40 % contra un 43% de su rival), el Heat sacó esa amplia ventaja porque perdió sólo 5 balones contra 15 de Indiana (provocadas en mayor parte por la presión) y aventajó 9-2 en rebotes ofensivos a su rival, lo que le permitió tomar 15 tiros más en los primeros 24 minutos. En total la lucha rebotera quedó 22-18 para el local. La superioridad era tal que los campeones reinantes ganaron en ese primer tiempo hasta en el rubro más fuerte de los Pacers. La tónica no se modificó en la segunda mitad y el dominio fue aún más aplastante. Con Dwyane Wade jugando su mejor básquet en los playoffs con 21 tantos y 9 rebotes, LeBron James se sintió más respaldado. The King tuvo otro día en la oficina con 32 tantos, 8 rebotes y 6 pases-gol.  A falta de 2 minutos para terminar el tercer parcial Hibbert (18 puntos, 8 rebotes) llegó a su quinta falta y la ventaja pasó a ser de 19. Sin el gigante de 2,18 metros en la pintura, las chances de dar un vuelco en el marcador quedaron en un lindo sueño para los visitantes. El toque final sucedió a poco de comenzado el último parcial cuando Paul George quedó fuera del juego por 6 faltas. La figura de Indiana en el sexto juego fue secado completamente por James. Anotó sólo 7 puntos, producto de un 2-9 de campo. Como en un partido de fútbol cuando un equipo golea al otro a la mitad del primer tiempo, gran parte del tercer y el último cuarto parecieron estar de más. Miami Heat no dejó lugar a la tensión de un último juego cerrado, y culminó con un 99-76 lapidario para las ilusiones de los jóvenes Pacers, que de mantener la estructura visitarán seguido estas instancias definitivas. [caption id="attachment_77266" align="aligncenter" width="600"]James con su remera del campeón de Conferencia en el vestuario. El jueves arranca la serie contra los Spurs. James con su remera del campeón de Conferencia en el vestuario. El jueves arranca la serie contra los Spurs.[/caption] Así “The Big Three” logra el tercer acceso a las finales en igual cantidad de años de existencia. Después del título conseguido el año pasado ante los Oklahoma City Thunder, y la derrota en 2011 ante los Dallas Mavericks. No hay dudas que Spoelstra y el legendario Pat Riley, tienen mucho mérito en conjugar al mejor jugador del mundo junto a otras 2 grandes estrellas, en un gran equipo que juega un básquet de conjunto. En un deporte que guarda mucho de lógica, los dos mejores equipos de la NBA se enfrentarán en una final que se anticipa tendrá condimentos y nombres para recordar durante muchos años. LeBron vs San Antonio, Manu Ginóbili en busca de su cuarto anillo. Poderío físico vs longevidad basquetbolística.El “Big Three” más taquillero vs el “Big Three” más ganador de la historia. Spoelstra vs Popovich. La mesa está servida señores: Miami Heat vs San Antonio Spurs.

Miami Heat borró de la cancha a los Indiana Pacers en el séptimo juego de las Finales de la Conferencia Este. Cuando la premisa era “win or go home”, los actuales reyes de la NBA sacaron lo mejor de sí para vencer 99-76 a los de amarillo, y meterse en la disputa por el título ante San Antonio Spurs.

12 minutos del último partido duró la ilusión de los Pacers de quedar en la historia. Ganarle 4 partidos en una serie a un equipo que sólo perdió 16 de 82 en la temporada regular era quedar en la historia. Indiana se hizo fuerte en los juegos pares (ganó el 2 como visitante además del 4 y 6 en casa) y consiguió elevar al máximo las potencialidades del mejor equipo desde 2010, el año de la formación del Big Three. Sólo el  primer cuarto del match decisivo fue favorable en algún modo a los visitantes, que se llevaron el parcial por 21-19.

El MVP de la temporada regular tuvo un gran partido. Además borró a Paul George del encuentro decisivo.
El MVP de la temporada regular tuvo un gran partido. Además borró a Paul George del encuentro decisivo.

De ahí en más todo empezó a salir mal para el equipo de Frank Vogel. Del otro lado Erik Spoelstra convenció a sus jugadores de que no podían permitir canastas fáciles cerca de la pintura. Desde el segundo cuarto el Heat tomó la premisa de su entrenador con una doble tarea: primero intentar cerrar las líneas de pase hacia los internos dificultando tanto la recepción como el pase, y si el mismo llegaba a las manos de David West o de Roy Hibbert, doblar y hasta triplicar la marca sobre ambos, obligándoles a pasar la bola, rubro en el cual no se destaca ninguno de los dos jugadores. En los primeros dos cuartos de juego entre Hibbert y West solo tomaron 9 tiros, un número elocuente que explica por sí solo los impedimentos que impuso la defensiva para evitar sus intentos al aro.

Con una tremenda presión defensiva y mucha agresividad en el otro canasto, atacando la llave permanentemente, Miami dio vuelta el resultado para terminar la primera mitad con una ventaja de 52-37. Incluso teniendo un porcentaje de cancha más bajo (40 % contra un 43% de su rival), el Heat sacó esa amplia ventaja porque perdió sólo 5 balones contra 15 de Indiana (provocadas en mayor parte por la presión) y aventajó 9-2 en rebotes ofensivos a su rival, lo que le permitió tomar 15 tiros más en los primeros 24 minutos. En total la lucha rebotera quedó 22-18 para el local. La superioridad era tal que los campeones reinantes ganaron en ese primer tiempo hasta en el rubro más fuerte de los Pacers.

La tónica no se modificó en la segunda mitad y el dominio fue aún más aplastante. Con Dwyane Wade jugando su mejor básquet en los playoffs con 21 tantos y 9 rebotes, LeBron James se sintió más respaldado. The King tuvo otro día en la oficina con 32 tantos, 8 rebotes y 6 pases-gol.  A falta de 2 minutos para terminar el tercer parcial Hibbert (18 puntos, 8 rebotes) llegó a su quinta falta y la ventaja pasó a ser de 19. Sin el gigante de 2,18 metros en la pintura, las chances de dar un vuelco en el marcador quedaron en un lindo sueño para los visitantes.

El toque final sucedió a poco de comenzado el último parcial cuando Paul George quedó fuera del juego por 6 faltas. La figura de Indiana en el sexto juego fue secado completamente por James. Anotó sólo 7 puntos, producto de un 2-9 de campo.

Como en un partido de fútbol cuando un equipo golea al otro a la mitad del primer tiempo, gran parte del tercer y el último cuarto parecieron estar de más. Miami Heat no dejó lugar a la tensión de un último juego cerrado, y culminó con un 99-76 lapidario para las ilusiones de los jóvenes Pacers, que de mantener la estructura visitarán seguido estas instancias definitivas.

James con su remera del campeón de Conferencia en el vestuario. El jueves arranca la serie contra los Spurs.
James con su remera del campeón de Conferencia en el vestuario. El jueves arranca la serie contra los Spurs.

Así “The Big Three” logra el tercer acceso a las finales en igual cantidad de años de existencia. Después del título conseguido el año pasado ante los Oklahoma City Thunder, y la derrota en 2011 ante los Dallas Mavericks. No hay dudas que Spoelstra y el legendario Pat Riley, tienen mucho mérito en conjugar al mejor jugador del mundo junto a otras 2 grandes estrellas, en un gran equipo que juega un básquet de conjunto. En un deporte que guarda mucho de lógica, los dos mejores equipos de la NBA se enfrentarán en una final que se anticipa tendrá condimentos y nombres para recordar durante muchos años.

LeBron vs San Antonio, Manu Ginóbili en busca de su cuarto anillo. Poderío físico vs longevidad basquetbolística.El “Big Three” más taquillero vs el “Big Three” más ganador de la historia. Spoelstra vs Popovich. La mesa está servida señores: Miami Heat vs San Antonio Spurs.