Rock

No te alejes tanto de nosotros, Alma de diamante.

Hasta siempre, Flaco querido.

Luis Alberto Spinetta supo desde el principio invitarnos a “volar entre tanta gente de pie”,  plasmar con sus palabras un mundo aparte, o mejor dicho, hacer más hermoso el mundo de todos y cada uno de los que lo oyeron, con nada más –y nada menos- que su música y su poesía.

A lo largo de su carrera –aunque resulta mejor la palabra vida- musical, que incluyó el paso por Almendra, Invisible, Pescado Rabioso, Spinetta y los socios del desierto –entre otras- nos regaló himnos como Rezo por vos, Bajan, Plegaria para un niño dormido, Todas las hojas son del viento, Cantata de puentes amarillos, y tantas otras obras de arte que sería imposible hacer una selección.

[youtube BCTbjUx2ftw]

Spinetta fue y será no sólo uno de los referentes indiscutibles de la música nacional, sino un paradigma de resistencia, de amor, de un idealismo limpio y hermoso, que queda como legado a todos los que vinieron con él y los que venimos detrás.

Y nadie se explica muy bien cómo es que este gigante se nos fue. Quizás en este momento lo más claro sea lo que Luis dejó. Y periodísticamente, hablar en primera persona es algo que nunca hay que hacer. Menos, citar una fuente que no sea de interés, autoridad o competencia en un asunto. Pero porque también lloré, porque es la primera vez que la muerte de un músico genera una cadena de mensajes entre mis amigos, y porque creo que escribir es una forma de exorcizar tristezas, dejo unas palabras que largó mi vieja entre mates y lagrimones, que pienso que explican al menos un poco el por qué de tanto amor.

“Para nosotros, de pendejos no había otra cosa que botas, gritos y represión. Los milicos eran eso contra lo que no se podía. Pero el Flaco, junto con Charly, nos mostró que había otra cosa: Nos enseñaron lo que era la libertad. Para nosotros eso era la libertad. Cuando íbamos a verlos tocar al Luna, llegábamos con el corazón chiquito, achicharrado, pero el Flaco te ponía el corazón enorme.”

Resulta paradójico. A todos nos fallan las palabras para despedir a este Maestro de la lírica. Por lo pronto, dejamos las despedidas de algunos artistas -en Twitter-:

Charly García:

https://t.co/9aqOC7nC

Jorge Drexler:

El flaco siempre escribió en el cielo.

Iván Noble:

Ojalá TVy las radios hubiesen hecho sonar en vida las canciones d Spinetta la dècima parte de lo q lo hicieron hoy...

Liniers:

Ana Duerme #GraciasFlaco

Kevin Johansen:

"Tengo que aprender a volar, entre tanta gente de pie...". El mejor homenaje a Spinetta es cantar sus hermosas canciones. Descanse, capo!

Palo Pandolfo:

FLACOOOOOOOOOOOOO !!!!!

Erica García: Llorar con la alegria de haberte conocido, de haber crecido con tu musica de haberme formado, de saber tus chistes, llorar orgullosos de vos

Juileta Venegas

Descansa en paz Spinetta, se nos fue un genio. Te queremos. Qué triste! :(

Hasta siempre, Flaco querido.

Luis Alberto Spinetta supo desde el principio invitarnos a “volar entre tanta gente de pie”,  plasmar con sus palabras un mundo aparte, o mejor dicho, hacer más hermoso el mundo de todos y cada uno de los que lo oyeron, con nada más –y nada menos- que su música y su poesía.

A lo largo de su carrera –aunque resulta mejor la palabra vida- musical, que incluyó el paso por Almendra, Invisible, Pescado Rabioso, Spinetta y los socios del desierto –entre otras- nos regaló himnos como Rezo por vos, Bajan, Plegaria para un niño dormido, Todas las hojas son del viento, Cantata de puentes amarillos, y tantas otras obras de arte que sería imposible hacer una selección.

[youtube BCTbjUx2ftw]

Spinetta fue y será no sólo uno de los referentes indiscutibles de la música nacional, sino un paradigma de resistencia, de amor, de un idealismo limpio y hermoso, que queda como legado a todos los que vinieron con él y los que venimos detrás.

Y nadie se explica muy bien cómo es que este gigante se nos fue. Quizás en este momento lo más claro sea lo que Luis dejó. Y periodísticamente, hablar en primera persona es algo que nunca hay que hacer. Menos, citar una fuente que no sea de interés, autoridad o competencia en un asunto. Pero porque también lloré, porque es la primera vez que la muerte de un músico genera una cadena de mensajes entre mis amigos, y porque creo que escribir es una forma de exorcizar tristezas, dejo unas palabras que largó mi vieja entre mates y lagrimones, que pienso que explican al menos un poco el por qué de tanto amor.

“Para nosotros, de pendejos no había otra cosa que botas, gritos y represión. Los milicos eran eso contra lo que no se podía. Pero el Flaco, junto con Charly, nos mostró que había otra cosa: Nos enseñaron lo que era la libertad. Para nosotros eso era la libertad. Cuando íbamos a verlos tocar al Luna, llegábamos con el corazón chiquito, achicharrado, pero el Flaco te ponía el corazón enorme.”

Resulta paradójico. A todos nos fallan las palabras para despedir a este Maestro de la lírica. Por lo pronto, dejamos las despedidas de algunos artistas -en Twitter-:

Charly García:

https://t.co/9aqOC7nC

Jorge Drexler:

El flaco siempre escribió en el cielo.

Iván Noble:

Ojalá TVy las radios hubiesen hecho sonar en vida las canciones d Spinetta la dècima parte de lo q lo hicieron hoy…

Liniers:

Ana Duerme #GraciasFlaco

Kevin Johansen:

“Tengo que aprender a volar, entre tanta gente de pie…”. El mejor homenaje a Spinetta es cantar sus hermosas canciones. Descanse, capo!

Palo Pandolfo:

FLACOOOOOOOOOOOOO !!!!!

Erica García:
Llorar con la alegria de haberte conocido, de haber crecido con tu musica de haberme formado, de saber tus chistes, llorar orgullosos de vos

Juileta Venegas

Descansa en paz Spinetta, se nos fue un genio. Te queremos. Qué triste! 🙁