El viernes 20 de septiembre, Eric Clapton se presentó en el Estadio Vélez Sarsfield, desafiando un pronóstico climático que amenazaba con lluvias, pero que finalmente regaló una noche perfecta para disfrutar del legendario guitarrista. A sus 79 años, Clapton demostró que la edad es solo un número, ofreciendo un espectáculo que combinó la energía del rock con la sutileza del blues, frente a un público entusiasta que lo ovacionó de principio a fin.

El show comenzó con un clásico infaltable: “Sunshine Of Your Love”, haciendo que el estadio se levantara en aplausos para recibir al maestro. Desde el primer acorde, el ex Cream dejó claro por qué es considerado una de las figuras más importantes en la historia del rock. Sus solos de guitarra eléctrica resonaron con fuerza, mostrando una destreza intacta y despertando sonrisas y admiración entre los presentes.

Eric Clapton x Gallo Bluguermann

Luego de un electrizante comienzo, llegó un momento de calma. El escenario se transformó para dar lugar a un set acústico, donde Clapton mostró una faceta más íntima y emocional. En un estadio sumido en un respetuoso silencio, cada nota y cada palabra de su icónica “Tears In Heaven” tocó el corazón del público. Las lágrimas no tardaron en aparecer entre los asistentes, y los aplausos y gritos de admiración hacia el músico ingles hicieron eco de la profunda conexión emocional que logró establecer.

La atmósfera se mantuvo contenida durante el set acústico, pero el cierre del show fue una auténtica fiesta. Clapton retomó la guitarra eléctrica, acompañado por brillantes solos de piano y del famoso órgano Hammond, elevando una vez más la energía del público. La destreza de los músicos dejó a más de uno boquiabierto, demostrando que el talento que acompaña a Clapton es de altísimo nivel.

Eric Clapton x Gallo Bluguermann

Como broche de oro, el guitarrista Gary Clark Jr. subió al escenario como invitado especial para un dúo memorable. Juntos, cerraron la noche con una electrizante versión de “Cocaine”, desatando el júbilo de los fanáticos.

Si bien la ausencia de “Layla” dejó a algunos con ganas de más, Clapton ofreció un recorrido por varios de los éxitos más destacados de su extensa carrera, reafirmando por qué sigue siendo una leyenda indiscutible del blues y el rock. En una noche donde se mezclaron la nostalgia, la emoción y el virtuosismo, Eric Clapton se despidió de Buenos Aires con la misma grandeza con la que siempre ha pisado los escenarios.

Fotos cortesía de Santiago Gallo Bluguermann