Conocida como la madre del Punk, Patricia Lee Smith (más conocida como Patti Smith) lleva adelante una carrera artística que se extiende desde la música y la poesía, hasta la escritura y la fotografía. Tras un largo camino recorrido, la artista estadounidense de 73 años aún hoy en día sigue regalando obras de arte y reflexiones siempre fieles a sus convicciones.
Es un ícono de la música, entre otras cosas, por ser la primera Punk en grabar un disco y en definir esta cultura de rebeldía frente a un sistema opresor sin caer en la básica vestimenta o los peinados y actitudes que caracterizan al género. Pudo explicar a su manera esa ideología basada en la lucha contra las injusticias y el poder.
Si se marcan como guías sus escrituras autobiográficas, se puede decir que la iniciativa de hacer música se fortaleció tras ver a Jim Morrison (The Doors) arriba de un escenario. “Mientras lo observaba, sentí que era capaz de hacer lo mismo”, expresó en su libro “Éramos unos niños”. En 1969 se dio un acontecimiento clave en relación a su carrera: la muerte de Brian Jones, miembro fundador de los Rolling Stones. Fue en ese momento cuando Patti Smith dejó sus lápices de dibujo y comenzó un ciclo de poemas dedicados a él. Allí demostró, por primera vez en su obra, su pasión por el Rock and Roll.
El periodista Hernani Natale explicó que en la escena de Nueva York rockera de los ’70, ella fue un símbolo de resistencia. Con la gran crisis que atravesaba Estados Unidos en ese momento, pudo “sintetizar toda esa rabia y furia de los chicos que necesitaban alzar la voz”, dijo, y que fue una conjunción que no muchos artistas han logrado.
Su discografía consta de once discos de estudio. Su álbum debut fue Horses, grabado en 1975. Varias de las canciones de este disco estuvieron inspiradas en su familia y otras en sus ídolos. La portada fue una fotografía que le sacó Robert Mapplethorpe, persona clave en la vida de Patti Smith. Fueron amantes y amigos, siempre unidos por aquello que tenían en común: el arte.
En 1995 hizo una gira con Bob Dylan, a quien ella tomó como modelo y tiene de ídolo desde que su madre le regaló uno de sus discos a los 16 años. Cantaron juntos ‘Dark Eyes’ en los siete conciertos que dieron. Incluso, en 2016 representó a Dylan cuando fue galardonado con el Premio Nobel de Literatura. Cantó “A Hard Rain’s A-Gonna Fall“ en la ceremonia y, aunque olvidó la letra por los nervios que le generaba la situación, el público reaccionó con comprensión y le respondió con aplausos.
Roque Casciero, subeditor de Página 12, la vio en distintas ocasiones. Considera que es una artista increíble. “Es una persona que excede al Rock, pero que también lo encarna”, sentenció. La describe como la hija de Velvet Underground, los Rolling Stones e Iggy Pop y, a su vez, el antecedente del punk, con The Ramones y otras bandas. Así también, nombró su conexión con Dylan desde el lado literario. “Todo eso sin dejar de ser ella misma o, mejor dicho, para ser ella misma”, expresó.
A lo largo de su carrera, compartió escenario con otros grandes íconos. Entre ellos se encuentran The Libertines, U2, Bruce Springsteen y Michael Stipe. Incluso, en el festival Glastonbury de 2015 fue acompañada por el Dalai Lama, quien dio un discurso enfocado a la paz. Y en su último show en Argentina, eligió a la artista Paula Maffía como telonera del recital en el Luna Park. “Gracias cosmos por acariciarme el lomo”, publicó Maffía en las redes sociales cuando se enteró que había sido elegida por ella. Fue en base a recomendaciones que le hicieron a Patti, lo cual la emocionó aún más. “Créanme: estoy más impactada que ustedes. Me tiemblan las manos al escribir esto”, agregó en un tweet.
Una de sus grandes cualidades es su carácter activista. Es una persona aferrada a sus convicciones y fiel a sus ideales. Para dar un ejemplo, lo demostró en su último viaje a Argentina en noviembre del año pasado con su hija Jesse Smith. Ahí dieron a conocer su proyecto “Pathaway to Paris”, el cual reúne artistas, activistas y académicos que buscan crear conciencia sobre el cambio climático. Patti Smith dio un concierto en el Luna Park y después ambas se reunieron con el presidente Alberto Fernández antes de que asumiera. También dieron una conferencia y show íntimo en el CCK. En esos actos se pudo admirar la seriedad con la que toma las causas con las que se compromete. Lo que verdaderamente la define como Punk.
¿Quién mejor para describirla que su hija? La considera auténtica, genuina, una mujer que comparte su arte, crece y evoluciona como persona y como artista. Honesta, abierta, “siempre usando su voz y su plataforma por el bien mayor, para entregar mensajes importantes hacia causas sociales, humanitarias y sobre el medio ambiente”.
A la periodista María Zentner, tras presenciar la rueda de prensa, le llamó la atención la centralidad de Smith y la claridad de sus objetivos. “Con muchísima humildad, paciencia y resistencia al irse por las ramas, siempre trató de que las preguntas se enfocaran en el proyecto”, dijo. Destacó el valor que le da a las palabras y al llevar su discurso hasta las últimas consecuencias.
Laura Camargo, periodista, por su parte la definió como una mujer humilde, alejada de cualquier actitud vanidosa. Incluso, por momentos, tímida. Tanto ella como otros reporteros que la pudieron observar de cerca, destacan su sensibilidad y preocupación por el mundo que le va a legar a las siguientes generaciones.
En 2018 también hubo una conferencia en el CCK, donde habló a favor del y comentó sobre literatura latinoamericana. Uno de sus autores favoritos es el chileno Roberto Bolaño. En septiembre del año pasado, Patti publicó “El año del mono”, libro donde nombra a su amigo Sandy Pearlman, un famoso productor musical que fue quien le dio la idea de que formara una banda de rock.
Con un estilo poético y muy característico, Patti Smith convirtió gran parte de su vida en arte de diversas formas. Posee una gran cultura, es sabia, y estuvo abocada enormemente a la lectura. La literatura forma parte central de su vida y lo supo plasmar en sus obras. Tiene cerca de veinte libros publicados. Siempre se definió principalmente como una escritora. No es una música, sino una intérprete. Activista, de gran corazón, que utiliza los escenarios para conectar con la gente y hacerle llegar su mensaje sobre la idea de un mundo mejor.
Jesse Smith, en primera persona
La profunda admiración que siente Jesse Smith por su madre queda a la vista. “Es auténticamente ella misma. Comparte su arte, crece y evoluciona como persona y como artista“, destaca sobre la icónica cantante. Resalta su compromiso: “Siempre está usando su voz y su plataforma por el bien mayor, para entregar mensajes importantes sobre causas sociales, humanitarias y el medio ambiente“.
La compositora nacida en Estados Unidos recuerda su último paso por Argentina con cariño: “Amé la experiencia de conocer la cultura de Buenos Aires, lo cual incluye disfrutar de las comidas, museos, parques y hasta ver a Boca Juniors, lo cual fue muy divertido“. Y agregó sobre la visita a La Bombonera: “La pasión y la energía de ese partido fue un punto culminante en mi vida“.
En noviembre de 2019 tuvo un encuentro con Alberto Fernández para hablar sobre “Pathaway to París“, la organización que cofundó. “Fue un evento hermoso y tuvimos muchas reuniones productivas“, recordó. La pandemia pospuso su nueva visita al país: “Teníamos que volver pero lo pospusimos por todo lo que está pasando con el Coronavirus. Tenemos mucho trabajo por hacer“.