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Ya no todo pasa: El enojo de Don Julio

No fue un miércoles más en la AFA. Hubo reunión del Comité Ejecutivo en la Calle Viamonte y Julio Grondona les hizo saber a los clubes de Primera que estaba sumamente enojado por cómo se desarrolló y se trató el tema del nuevo torneo en los medios. Incluso, acusó a varios por la manera que se manejaron en los medios y fue durísimo en sus palabras.

[caption id="attachment_28389" align="aligncenter" width="480" caption="Grondona se calentó con todos."][/caption] El enojo del Jefe va, sobre todo, con las dirigencias de Vélez, All Boys, Racing y Newell's, que fueron las cuatro que abiertamente se abstuvieron de votar cuando el tema se instaló en el predio de Ezeiza, el día que se cocinó la cabeza de Sergio Batista. Incluso, según averiguo Rock 'N Ball por intermedio del colega Sebastián Varela del Rio, la Academia ni siquiera asistió a la reunión.

Grondona, en su fuero interno, siente que es la primera que no cae del todo parado. Al no poder exponer al Gobierno (impulsor del Mega torneo) ni endilgarle la responsabilidad a River, como se quiso instalar en los medios y la opinión pública, entonces todo el peso cayó sobre las espaldas de Don Julio. El "Jefe" está próximo a cumplir 80 años y sus espaldas ya no soportan el peso como antes, incluso, se comienza a cocinar a fuego lento la idea de buscarle, prontamente, un "sucesor". Se estima que en octubre ganará, pero se sabe, también, que sería su último período. Germán Lerche, de Colón, club que no asoma la cabeza y se mantiene en un perfil subterráneo, aparece apuntado como el sucesor del anillo. Pero eso es otra historia.

Ahora, Grondona se calentó en serio. Responsabilizó a los dirigentes de haberle tirado a la gente encima con lo del "Nuevo Torneo". Entonces, como si se tratara de un padre y sus "revoltosos" hijos, Don Julio tomó una determinación: cortarle el chorro. Sabe que Vélez y Lanús, por ejemplo, son los clubes a los que menos puede dominar y que ellos fueron quienes más impulsaron la idea de hacer caer el nuevo proyecto. Pero mucho no puede hacer. Tienen las cuentas en orden y no dependen de la AFA.

Distinto es el caso de Racing, por ejemplo. Grondona se sorprendió por la negativa racinguista y el inesperado nivel de contrera que encontró en los dirigentes del club de Avellaneda. Y, como la Academia, en la misma bolsa entra All Boys e incluso Newell's.

La voz del jefe tronó "Si quieren reformas, hagánlas ustedes", les espetó a los dirigentes en la reunión y amenazó con que se acabaron los préstamos por abajo de la mesa, la plata por abajo de la mesa o el tapa-baches. "Arreglense ustedes, hagánse cargo", les dijo, enojadísimo, Don Julio.

No iba a ser gratis. Que esto haya dejado mal parado a Grondona iba a hacer tronar a varios de los que sientan en la mesa de la élite del fútbol Argentino.

River, apuntado como el principal beneficiado por esta medida, intenta recomponer relaciones con AFA. El club de Núñez acaba de designar a Omar Solassi, vice segundo del club, como representante en las reuniones de la B Nacional en la Calle Viamonte. El hombre, amigo de Daniel Passarella, reemplazará a Diego Turnés quien hasta ahora representaba a la banda en las reuniones, aunque fue contadas veces a las mismas.

   

No fue un miércoles más en la AFA. Hubo reunión del Comité Ejecutivo en la Calle Viamonte y Julio Grondona les hizo saber a los clubes de Primera que estaba sumamente enojado por cómo se desarrolló y se trató el tema del nuevo torneo en los medios. Incluso, acusó a varios por la manera que se manejaron en los medios y fue durísimo en sus palabras.

Grondona se calentó con todos.

El enojo del Jefe va, sobre todo, con las dirigencias de Vélez, All Boys, Racing y Newell’s, que fueron las cuatro que abiertamente se abstuvieron de votar cuando el tema se instaló en el predio de Ezeiza, el día que se cocinó la cabeza de Sergio Batista. Incluso, según averiguo Rock ‘N Ball por intermedio del colega Sebastián Varela del Rio, la Academia ni siquiera asistió a la reunión.

Grondona, en su fuero interno, siente que es la primera que no cae del todo parado. Al no poder exponer al Gobierno (impulsor del Mega torneo) ni endilgarle la responsabilidad a River, como se quiso instalar en los medios y la opinión pública, entonces todo el peso cayó sobre las espaldas de Don Julio. El “Jefe” está próximo a cumplir 80 años y sus espaldas ya no soportan el peso como antes, incluso, se comienza a cocinar a fuego lento la idea de buscarle, prontamente, un “sucesor“. Se estima que en octubre ganará, pero se sabe, también, que sería su último período. Germán Lerche, de Colón, club que no asoma la cabeza y se mantiene en un perfil subterráneo, aparece apuntado como el sucesor del anillo. Pero eso es otra historia.

Ahora, Grondona se calentó en serio. Responsabilizó a los dirigentes de haberle tirado a la gente encima con lo del “Nuevo Torneo”. Entonces, como si se tratara de un padre y sus “revoltosos” hijos, Don Julio tomó una determinación: cortarle el chorro. Sabe que Vélez y Lanús, por ejemplo, son los clubes a los que menos puede dominar y que ellos fueron quienes más impulsaron la idea de hacer caer el nuevo proyecto. Pero mucho no puede hacer. Tienen las cuentas en orden y no dependen de la AFA.

Distinto es el caso de Racing, por ejemplo. Grondona se sorprendió por la negativa racinguista y el inesperado nivel de contrera que encontró en los dirigentes del club de Avellaneda. Y, como la Academia, en la misma bolsa entra All Boys e incluso Newell’s.

La voz del jefe tronó “Si quieren reformas, hagánlas ustedes”, les espetó a los dirigentes en la reunión y amenazó con que se acabaron los préstamos por abajo de la mesa, la plata por abajo de la mesa o el tapa-baches. “Arreglense ustedes, hagánse cargo“, les dijo, enojadísimo, Don Julio.

No iba a ser gratis. Que esto haya dejado mal parado a Grondona iba a hacer tronar a varios de los que sientan en la mesa de la élite del fútbol Argentino.

River, apuntado como el principal beneficiado por esta medida, intenta recomponer relaciones con AFA. El club de Núñez acaba de designar a Omar Solassi, vice segundo del club, como representante en las reuniones de la B Nacional en la Calle Viamonte. El hombre, amigo de Daniel Passarella, reemplazará a Diego Turnés quien hasta ahora representaba a la banda en las reuniones, aunque fue contadas veces a las mismas.