Cuando a principio de mes se anunció en la ceremonia de los Grammys que el premio más importante de la noche, el disco del año, era para Golden Hour de Kacey Musgraves, las reacciones en las redes sociales fueron de confusión: no es que la gente no estuviera de acuerdo, sino que ni conocían a la artista. La música Country siempre fue considerada un nicho propio del sur de Estados Unidos, con sombreros de paja, camionetas y caballos, pero en los últimos años, varias artistas femeninas comenzaron a expandir los límites.
No hay mejor ejemplo que Taylor Swift, que comenzó su carrera en la música country. Ella también ganó mejor disco de año con Fearless, su segundo disco del 2008, que combina country y pop y que dio hits inmensamente populares como “You Belong With Me” y “Love Story”. En pocos años, ella ya se estaba convirtiéndose en una de las estrellas más importantes del mundo
Nacida en Texas hace solo 30 años, Kacey Musgraves ya sacó cuatro discos y en cada uno amplía su público. Si bien está lejos de tener el estatuto de Taylor Swift, también intenta abrir el Country con sus melodías dulces, su voz suave y sus letras sinceras e íntimas. Junto a Miranda Lambert, Marren Morris y Carrie Underwood son las artistas femeninas que están actualizando una escena que suele caracterizarse por ser conservadora.
Las letras de Kacey Musgraves muchas veces cuestionan los mandatos sociales. En “Follow Your Arrow”, de su debut Trailer Park, se cansa de los estereotipos y nos dice que hagamos lo que nos haga feliz, ya sea besar muchos chicos o besar muchas chicas. Ella siempre defendió los derechos LGTBQ y se propuso visibilizarles. Cuando presentó su segundo disco, Pageant Material, invitó a drag queens a que sean parte de su show y la semana pasada en un recital en Los Ángeles, invitó también a las ganadoras de Ru Paul’s Drag Race All Stars.
Su mente abierta le costó no ser lo suficientemente popular en su propio ámbito. Un artículo en Huffington Post expone que las radios de música country no la reconocen como una artista que pertenezca al género. Es difícil pensar que este boicot haya realmente sido porque su música se alejó del country, sino que pareciera ser justamente porque ella aborda temáticas que al público conservador le incomodan.
En las entrevistas y en sus letras, habla abiertamente del uso recreativo de las drogas y suele tener varias canciones sobre disfrutar la vida. “Die Fun”, de Pageant Material, una canción que sigue el lema carpe diem, habla sobre no querer crecer y quedarse en la libertad de los años de la juventud. Sus letras suelen explorar pequeños detalles del día a día con los cuales es fácil identificarse, como cuando canta “mi abuela lloró cuando me hice un piercing en la nariz” de “Slow Burn”, la canción que abre Golden Hour con una leve influencia de la psicodelia. Incluso si una nunca se hizo un piercing, siempre hay momentos en los que hay que enfrentarse a una generación distinta.
Kacey es experta en usar imágenes típicas del country para resignificarlos. Uno de los sencillos de Golden Hour es “Space Cowboy”, que literalmente significa “Vaquero del espacio” pero que se usa para aludir a personas que fuman marihuana. Ella, en cambio, lo resignifica en una canción melancólica en la que se despedida de su amor. Entre las dos palabras del título, agrega una coma que resignifica la frase: “You can have your space, cowboy” (“Podés tener tu espacio, vaquero”).
El grammy a Kacey Musgraves fue sorprendente incluso para los fans. Frente a artistas como Cardi B con su su personalidad extravagante y su rapeo feroz o Janelle Monae con su disco que también incluyó una película que lo acompaña, Golden Hour es un disco bastante humilde. Son solo canciones clásicas, con una guitarra acústica de fondo y melodías llevaderas, pero también son una puerta a la intimidad de una mujer en el siglo veintiuno que extraña a su mamá, que tiene que enfrentarse a su propia soledad en un fin de semana sin compañía, que se fascina ante la naturaleza y que intenta comprender al amor.
Por: Juana Giaimo.
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