Un financista de Chicago ve su rutinaria vida alterada por un hallazgo peligroso, de alguna manera queda envuelto en un mega lavado de dinero proveniente de un cartel narco y en un intento por salvar su vida promete lavar 8 millones de dólares en 2 meses y 500 millones en 2 años, todo esto mientras una pistola apunta a su cabeza.
El destino de su familia y el suyo está en sus manos, todo recae sobre las habilidades financieras que Martin Byrde (Jason Bateman) pueda utilizar para lavar el dinero lo más rápido, y limpio, que pueda.
Así comienza Ozark, una serie exclusiva de Netflix creada por Bill Dubuque y Mark Williams (The accountant), la misma aborda nuevamente un caso de vidas pacíficas y comunes inundadas por un mundo de crímen y violencia sin parangón.
La serie toma el nombre de la ciudad a la que se muda la familia Myrtle, compuesta por Wendy Byrde (Laura Linney), Charlotte Byrde (Sofia Hublitz) y Jonah Byrde (Skylar Gaertner). Una pareja a punto de separarse y unos hijos adoleciendo suman a la trama un desgaste inicial que se incrementa a medida que avanza la misma.
El pasar de una ciudad como Chicago a un pueblo como Ozark hace suponer que el dinero será más difícil de lavar, pero que a su vez la tranquilidad permitirá que eso ocurra con más disimulo.
Ni una cosa ni la otra.
“Pueblo chico, lavado grande” podría decirse en esta ocasión y la cosa no tarda en empezar a complicarse, la familia Langmore, con Ruth a la cabeza, interpretada por Julia Garner, trata de hacerse del dinero pero entiende los riesgos de quedarse con el botín narco.
Sin embargo una alianza sostenida por la conveniencia se forma entre el frío Marty y la calculadora Ruth, ambos se necesitan para llevar a cabo su misión, ambos buscan, a su manera, salvar a su familia.
Ozark tiene una temática al estilo de Breaking bad, alguien demasiado decente se encuentra metido en un problema tan básico que debe recurrir a lo más extremo para resolverlo rápidamente.
A diferencia de Breaking bad, Ozark encuentra su punto más álgido en la oscuridad de los personajes, todos tienen algo que esconder y de no ser así, enseguida corrompen ese estadío para pasar a formar parte de la pintura general.
Sin dudas el clímax está dado por la música y lo lúgubre de los paisajes, Ozark es un lugar de
una geografía particular, plagada de montañas, bosques y ríos, que atraen turistas sólo en temporada alta.
Cada capítulo tendrá un escudo en su presentación con 4 elementos, cada uno será clave en el desarrollo del mismo.
Ir más allá dentro de la estructura de la serie sería hacer uso del spoiler, y dado que es la primer temporada, lo mejor es aventurarse en estos primeros 10 capítulos y enterarnos si somos capaces de vivir sin respirar, u Ozark en cambio nos quitará el poco aire que tengamos.
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