¿Una serie llamada Educación sexual que no trata solamente temas sexuales ni es un documental? Increíble, pero real. Es tan real que es clave para entender como se desarrollan en 2019 los estereotipos sexuales de la nueva generación.
Dentro de los años superiores de una escuela pública inglesa, se ubica un grupo de chicos entre 16 y 18 años retornando de un verano cualquiera a sus últimos años de clase. Como todos los adolescentes, comentan sus travesías donde, como muchas veces pasa, el sexo es la materia obligada a repasar.
Todo esto es visto a través de los ojos del protagonista, Otis Milburn (Asa Butterfield), quién parece tener evidentes problemas para abordar algo tan natural como la masturbación. Pero, lejos de buscar soluciones, propone evadirla todo el tiempo. ¿La razón? Su madre, Jean Milburn (Gillian Anderson), una reconocida terapeuta sexual que intenta todo el tiempo saber los hábitos y las dudas de su hijo adolescente.
Dentro de este círculo íntimo se encuentra Eric Effoing (Ncuti Gatwa), quien no sólo oficia de compinche de Otis, sino que además lucha con sus inquietudes homosexuales y su incipiente despertar sexual.
En el colegio no encuentran descanso para sus constantes dudas e inquietudes, sino más bien se acrecientan sus incógnitas y la presión allí dentro es casi insostenible. Encontramos al “Bully” clásico, Adam Groff (Connor Swindells), quien además de acosar gente en el colegio, robarles dinero y comida, es el hijo del director, lo cuál parece alentarlo a ser más y más rebelde.
En el otro espectro del ambiente social del colegio, la protagonista femenina, Maeve Wiley (Emma Mackey), no sólo es la voz de la consciencia muchas veces sino también alguien que oculta casi todo de su vida personal y se refugia detrás de una enorme inteligencia.
Por un suceso absolutamente casual, Otis termina aconsejando a Adam sobre un problema sexual evidente gracias a la ayuda de Maeve, quien por casualidad se encontró con el damnificado.
Tras esta situación, Maeve le propone a Otis, alguien con serios problemas de comunicación con sus pares, el montar una clínica de consulta sexual para sus compañeros de escuela y, obviamente, hacer dinero con ello.
Dentro de este desfavorable contexto donde abundan los estereotipos sexuales y sociales, es donde Educación Sexual saca su mayor rédito. Es una serie actual, dedicarse solo a la sexualidad en tono de comedia parece más de lo mismo: burlarse de los estereotipos y mostrar chicas y chicos bonitos ligeros de ropa. Pero aquí, el desafío es otro.
Plagada de diálogos y situaciones que responden al pensamiento de chicos de esa edad y descargada de todo tipo de tipificación, Eduación sexual se enfoca en cómo las nuevas generaciones transitan el actual mundo sexual y lo difícil que se les hace encajar en el sin recibir por eso etiqueta alguna.
Las apariciones de Gillian Anderson son la voz del adulto calificado y, por supuesto, la sensualidad personificada como referente de libertad, no solo sexual sino también intelectual.
Por supuesto que la serie se apoya sobre el humor y trata de plasmar una visión que, salvo que seas un adolescente actual, te es ajena en contexto pero no en esencia por lo que la identificación está latente aunque tengas muchos mas años que los adolescentes que la protagonizan.
Una enorme banda de sonido acompaña cada descubrimiento, cada acierto y cada decepción, puede sonar The cure, David Bowie, Talking Heads, The smiths y muchos más que no solo pintan la adolescencia de Otis de cuerpo entero sino muchas de las situaciones que rodean cada uno de los capítulos (8 en total para esta primera temporada)
Escrita por Laurie Nunn (De poco recorrido hasta ahora), se puede ver la frescura en los diálogos y cómo funcionan, a modo de contrapunto en la mayoría de las situaciones, de manera natural y sin forzar demasiado, haciendo lucir todo espontaneo y para nada impostado.
Sin ahondar más en cualquier explicación que pueda traer acarreados spoilers, Educación sexual es una serie imprescindible a la hora de entender el sexo en los tiempos que corren. No sólo la práctica, sino el origen de conductas y hábitos por fuera de lo que conocemos como estereotipos o tipificaciones sexuales. El mundo está cambiando y Educación sexual está dispuesto a contarlo sin señalar a nadie con el dedo.
Plataforma: Netflix
Temporadas: 1
Capítulos: 8 (promedio de 40/50 minutos cada uno)
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