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VOT SI Martino

Con la destitución inminente de Batista como DT de la Selección, la carrera por el sucesor la componen Alejandro Sabella y Gerardo Martino. En este informe, Rock And Ball repasa la carrera e intenta clarificar el porqué del “Tata” como seleccionador nacional.

Antes de arrancar la Copa América, en una entrevista a la revista “Un Caño” Gerardo Martino expresó que uno de sus sueños era poder ser DT de la selección Argentina. Seguramente nunca pensó que al término de la competición estaría cerca de la gran chance de su carrera. Los pergaminos del actual DT de la selección paraguaya (que no seguirá en el cargo) son extensos: ni bien se alejó de la vida de futbolista comenzó a dirigir en Brown de Arrecifes (en ese momento en la B Nacional) en 1998, para continuar dirigiendo en Platense e Instituto de Córdoba. En el año 2002 fue que pegó el salto: se mudó a Paraguay para dirigir a Libertad donde ganó 2 Torneos Apertura y 2 Campeonatos Absolutos, para después desembarcar en el eterno rival, en Cerro Porteño. Con el “Ciclón” obtuvo un Torneo Apertura, un Clausura y un Campeonato Absoluto, además de ganar la Liguilla Pre – Sudamericana que le habilitó el pase a dicho torneo sudamericano. Tras un gran paso por Paraguay, en el 2005 retornó a la Argentina por 6 meses para sentarse en el banco de Colón de Santa Fe, con quien no le fue nada bien y pegó la vuelta a Libertad para seguir con la costumbre: dar la vuelta olímpica. Esta vez ganó un Torneo Apertura y un Campeonato Absoluto, además de llegar a la semifinal de la Libertadores 2006. Gracias a todos los logros obtenidos en Paraguay, y por el mal Mundial 2006 que hizo la selección (quedó afuera en primera ronda solamente ganándole a Trinidad Tobago) el “Tata” fue el candidato número 1 para dirigir la selección guaraní. Sentado en el banco de ese país, Martino dirigió 27 partidos oficiales, ganando 13, empatando 6 y perdiendo 8, lo cual representa el 55,55% de efectividad, producto de 45 puntos sobre 81 jugados. En la primera rueda de eliminatorias, el discípulo más aplicado de Bielsa pudo aplicar a la perfección lo que aprendió de su maestro. A una selección que históricamente se caracterizó más por la garra que por el buen juego, le supo agregar esa potencia ofensiva en base a la presencia de Salvador Cabañas. Con poco, logró mucho. Terminó primero esa rueda inicial.

 

[caption id="attachment_27369" align="aligncenter" width="410" caption="Martino no seguirá en Paraguay... ¿sucederá a Batista?"][/caption] En la segunda parte el equipo bajó su rendimiento y solamente una racha de 4 partidos seguidos con victorias (el resto los perdió casi todos) hicieron que se clasificaran con tranquilidad para Alemania, en el tercer puesto. Esa selección se basó en su solidez ofensiva y en la capacidad ofensiva de Salvador Cabañas y los goles de Roque Santa Cruz. Pero el atentado a Cabañas (lo balearon en México) golpeó en el grupo y en el planteo futbolístico. El “Tata” no le encontró reemplazante al delantero y terminó jugando de forma muy defensiva en esa copa mundial. A pesar de eso pasó la primera ronda (ganando un partido y empatando dos) y pasó por penales a los cuartos, donde le complicó la vida a España pero quedó afuera con el que finalmente sería campeón. Logró la mejor campaña de Paraguay en la historia de los mundiales empatando casi todos los partidos. Al igual que en esta Copa América… no pudo ganar un partido aún pero se encuentra en la final después de 32 años. Con muchísimo menos equipo que el que tendría en la Argentina, logró grandes resultados con equipos paraguayos y con la selección, que a pesar de haber ido de mayor a menor logró imponer un estilo de juego… algo que claramente le falta a esta selección, que a pesar de las figuras de mitad de cancha hacia adelante falta trabajo para resguardar el arco propio.

Con la destitución inminente de Batista como DT de la Selección, la carrera por el sucesor la componen Alejandro Sabella y Gerardo Martino. En este informe, Rock And Ball repasa la carrera e intenta clarificar el porqué del “Tata” como seleccionador nacional.

Antes de arrancar la Copa América, en una entrevista a la revista “Un Caño” Gerardo Martino expresó que uno de sus sueños era poder ser DT de la selección Argentina. Seguramente nunca pensó que al término de la competición estaría cerca de la gran chance de su carrera.

Los pergaminos del actual DT de la selección paraguaya (que no seguirá en el cargo) son extensos: ni bien se alejó de la vida de futbolista comenzó a dirigir en Brown de Arrecifes (en ese momento en la B Nacional) en 1998, para continuar dirigiendo en Platense e Instituto de Córdoba.

En el año 2002 fue que pegó el salto: se mudó a Paraguay para dirigir a Libertad donde ganó 2 Torneos Apertura y 2 Campeonatos Absolutos, para después desembarcar en el eterno rival, en Cerro Porteño. Con el “Ciclón” obtuvo un Torneo Apertura, un Clausura y un Campeonato Absoluto, además de ganar la Liguilla Pre – Sudamericana que le habilitó el pase a dicho torneo sudamericano.

Tras un gran paso por Paraguay, en el 2005 retornó a la Argentina por 6 meses para sentarse en el banco de Colón de Santa Fe, con quien no le fue nada bien y pegó la vuelta a Libertad para seguir con la costumbre: dar la vuelta olímpica. Esta vez ganó un Torneo Apertura y un Campeonato Absoluto, además de llegar a la semifinal de la Libertadores 2006.

Gracias a todos los logros obtenidos en Paraguay, y por el mal Mundial 2006 que hizo la selección (quedó afuera en primera ronda solamente ganándole a Trinidad Tobago) el “Tata” fue el candidato número 1 para dirigir la selección guaraní.

Sentado en el banco de ese país, Martino dirigió 27 partidos oficiales, ganando 13, empatando 6 y perdiendo 8, lo cual representa el 55,55% de efectividad, producto de 45 puntos sobre 81 jugados. En la primera rueda de eliminatorias, el discípulo más aplicado de Bielsa pudo aplicar a la perfección lo que aprendió de su maestro. A una selección que históricamente se caracterizó más por la garra que por el buen juego, le supo agregar esa potencia ofensiva en base a la presencia de Salvador Cabañas. Con poco, logró mucho. Terminó primero esa rueda inicial.

 

Martino no seguirá en Paraguay... ¿sucederá a Batista?

En la segunda parte el equipo bajó su rendimiento y solamente una racha de 4 partidos seguidos con victorias (el resto los perdió casi todos) hicieron que se clasificaran con tranquilidad para Alemania, en el tercer puesto.

Esa selección se basó en su solidez ofensiva y en la capacidad ofensiva de Salvador Cabañas y los goles de Roque Santa Cruz. Pero el atentado a Cabañas (lo balearon en México) golpeó en el grupo y en el planteo futbolístico.

El “Tata” no le encontró reemplazante al delantero y terminó jugando de forma muy defensiva en esa copa mundial. A pesar de eso pasó la primera ronda (ganando un partido y empatando dos) y pasó por penales a los cuartos, donde le complicó la vida a España pero quedó afuera con el que finalmente sería campeón.

Logró la mejor campaña de Paraguay en la historia de los mundiales empatando casi todos los partidos. Al igual que en esta Copa América… no pudo ganar un partido aún pero se encuentra en la final después de 32 años.

Con muchísimo menos equipo que el que tendría en la Argentina, logró grandes resultados con equipos paraguayos y con la selección, que a pesar de haber ido de mayor a menor logró imponer un estilo de juego… algo que claramente le falta a esta selección, que a pesar de las figuras de mitad de cancha hacia adelante falta trabajo para resguardar el arco propio.