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¿Terminó? La auditoría de River

Salió el informe de la famosa auditoría que se hizo en River, sin grandes resultados que puedan llevar a acciones judiciales a la dirigencia anterior… ¿Por esto se votó a Passarella? Si hay tres frases que caracterizaron la presidencia de Passarella, estas son: “No voy a traer jugadores falopa”; “Voy a meter preso a Aguilar” y la ya popular (y que genera cierto fastidio en la gente de River) “No estén cagados”. Cuando se comienzan a repasar a los refuerzos, y se ve que se trajeron a jugadores como Canales, Rojas, Ballón, se nota que la primera promesa no se cumplió. Ni hace falta hablar de la última, donde el presidente le aseguraba a los hinchas que River se iba a mantener en primera… ¿Y la otra? ¿La de meter preso a Aguilar? Para eso se contrató a la empresa KMG, quien estaba a cargo de auditar los 8 años de gestión. Ahí están las primeras fallas: tal como indica el documento que consiguió River Late (www.riverlate.com), la investigación interna no solamente fue hecha por el doctor Ricardo Castro (recomendado por la empresa KMG pero no integrante de la misma), sino que tampoco fue hecha en los 8 años de Aguilar, sino solamente en el período de septiembre del 2007 a diciembre del 2009. Así mismo, la investigación no arroja ningún elemento concreto como para iniciar un nuevo juicio ni a Aguilar, Israel y compañía. Se investigó el Subdiario IVA del tiempo especificado más arriba a fin de identificar irregularidades, proveedores duplicados, etc. ¿Conclusiones? “En el informe se describen inconsistencias y alertas de posibles irregularidades que por sí mismas no resultaban definitorias para probar la existencia de actos ilegales” cita el informe. Osea, nada. Lo mismo pasó las inconsistencias en la construcción del museo del club y los préstamos recibidos de la Cooperativa de Crédito de Liniers. Lo que sí encontró KPMG fueron irregularidades con la transferencia del 35% de los derechos económicos de Belluschi y por el Superclásico que nunca se jugó en Bolivia (por el cual River ya había cobrado la plata correspondiente de la empresa “The Game SRL”), hechos por los cuales ya habían sido llevados a juicio Aguilar e Israel. El informe muestra “lo más relevante” de la auditoría que, se sabía, no iba a mostrar nada importante ni de tal profundidad como para tocar a alguna parte de la dirigencia actual. ¿Se acabó la joda? No se sabe. Pero la refundación no arrancó con el pie derecho.  

Salió el informe de la famosa auditoría que se hizo en River, sin grandes resultados que puedan llevar a acciones judiciales a la dirigencia anterior… ¿Por esto se votó a Passarella?

Si hay tres frases que caracterizaron la presidencia de Passarella, estas son: “No voy a traer jugadores falopa”; “Voy a meter preso a Aguilar” y la ya popular (y que genera cierto fastidio en la gente de River) “No estén cagados”.

Cuando se comienzan a repasar a los refuerzos, y se ve que se trajeron a jugadores como Canales, Rojas, Ballón, se nota que la primera promesa no se cumplió. Ni hace falta hablar de la última, donde el presidente le aseguraba a los hinchas que River se iba a mantener en primera…

¿Y la otra? ¿La de meter preso a Aguilar? Para eso se contrató a la empresa KMG, quien estaba a cargo de auditar los 8 años de gestión.

Ahí están las primeras fallas: tal como indica el documento que consiguió River Late (www.riverlate.com), la investigación interna no solamente fue hecha por el doctor Ricardo Castro (recomendado por la empresa KMG pero no integrante de la misma), sino que tampoco fue hecha en los 8 años de Aguilar, sino solamente en el período de septiembre del 2007 a diciembre del 2009.

Así mismo, la investigación no arroja ningún elemento concreto como para iniciar un nuevo juicio ni a Aguilar, Israel y compañía.

Se investigó el Subdiario IVA del tiempo especificado más arriba a fin de identificar irregularidades, proveedores duplicados, etc. ¿Conclusiones? “En el informe se describen inconsistencias y alertas de posibles irregularidades que por sí mismas no resultaban definitorias para probar la existencia de actos ilegales” cita el informe. Osea, nada.

Lo mismo pasó las inconsistencias en la construcción del museo del club y los préstamos recibidos de la Cooperativa de Crédito de Liniers.

Lo que sí encontró KPMG fueron irregularidades con la transferencia del 35% de los derechos económicos de Belluschi y por el Superclásico que nunca se jugó en Bolivia (por el cual River ya había cobrado la plata correspondiente de la empresa “The Game SRL”), hechos por los cuales ya habían sido llevados a juicio Aguilar e Israel.

El informe muestra “lo más relevante” de la auditoría que, se sabía, no iba a mostrar nada importante ni de tal profundidad como para tocar a alguna parte de la dirigencia actual. ¿Se acabó la joda? No se sabe. Pero la refundación no arrancó con el pie derecho.