Es difícil de explicar lo que siente el hincha del Ciclón en este momento. Se ilusiona, choca contra una pared, pero sigue vivo. Y no sólo vivo, con más vida que cualquiera de sus oponentes. Sin embargo, las dificultades que enfrentó el Cuervo en los partidos clave hacen reflexionar a más de uno. Al Matador le cuestan mucho estos partidos, y nada indica que ante el Fortín sea la excepción.
Durante junio de 2012, San Lorenzo estuvo 60 minutos en la B Nacional. De ahí para acá, todo mejoró. La economía, la institución, la masa societaria, el entusiasmo, el juego, el promedio. Ese cambio en tan poco tiempo generó una ola de entusiasmo, principalmente potenciada por un equipo que gana seguido, tiene momentos de mucho fútbol y un plantel con grandes individualidades.
Pero todo esto queda al margen, porque el equipo está en deuda en las “finales”. Cuando tuvo que ganar, en los días en que la expectativa del hincha volaba por los aires, el equipo decepcionó desde su producción. Y cuando no jugó tan mal, tampoco pudo ganar. Vale repasar estos partidos: contra River en la Sudamericana, ante Newell´s, Lanús, Rafaela y Estudiantes en el can buy Accutane online. cost accutane 2011. accutane 40 mg once a day. how to order Accutane online. accutane cost canada. buy generic accutane withoutВ Inicial, y la frustrante derrota con Arsenal por Copa Argentina.
Hubo una excepción a la regla, y fue con Boca. Allí se vio un equipo con carácter, con personalidad para sobreponerse a la muralla que construyó Orión en el arco, y así todo, casi se esfuma la hazaña si Torrico no atajaba ese penal histórico. Fue el ímpetu que sólo se vio de a ratos con Lanús, en el primer tiempo con la Lepra y en el tramo final con la Crema, estos dos últimos con Combivent. purchase combivent online . cheap combivent. combivent inhaler coupons. combivent udv. order Combivent online . combivent dosage. purchaseВ Piatti order an essay muy por encima del resto.
El flojo nivel ante Estudiantes encendió la luz de alerta. La posición de San Lorenzo sigue siendo muy buena: puede ser campeón hasta empatando, pero juega en un escenario que sin dudas será incómodo. Además, como equipo, San Lorenzo no demostró ese convencimiento de lo que estaba en juego cuando salió al césped ante el Pincha. Algo que si se vio con River, con Gimnasia, con Boca, con Belgrano, pero que es una deuda recurrente cuando el Ciclón tiene que ganar o ganar.
Una nueva final se aproxima en el horizonte cuervo. Si se quiere, similar a la que jugó con Boca el 18 de diciembre de 2008, la última vez que el Azulgrana estuvo cerca de ser campeón en un torneo local. La ilusión sigue viva, la confianza también, pero el cambio de rumbo, además de en los números, necesita festejarse en San Juan y Boedo.
Comentarios