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Nueva Zelanda 2011: Gales le dio un tortazo a Irlanda

El primer partido de cuartos de final enfrentó a Gales y a Irlanda. El conjunto Verde llegó a esta instancia como primero de su grupo, y mostrando un gran nivel –victoria ante Australia incluida-. Sin embargo, los Dragones Rojos fueron muy superiores a su par británico y se llevaron el encuentro por 22-10.

Desde el vestuario, Gales tomó el control del partido. Con un juego de potencia intentó romper la defensa irlandesa por el centro, el primer try del encuentro llegó a los 3 minutos.  Luego de una muy buena secuencia de ataques con los centros, la pelota, finalmente le llegó a Shane Williams que se zambulló y apoyó. Irlanda intentó a través de sus forwards, incluso tuvo una chance muy clara a los 16´ luego de un line, pero la defensa del ganador se puso firme y, finalmente, anularon.

Sandwich Irlandés

Más allá de la ventaja desde el arranque por parte de Gales, los primeros cuarenta minutos fueron muy equilibrados.  Exceptuando la opción de Try del equipo ganador, no hubo muchas más chances claras de apoyar en el In-goal.  Tal es así, que los esfuerzos de Irlanda por empatar el encuentro morían en el potente tackle galés, de esta forma se le hacía muy difícil avanzar más allá de la línea de 22 rival. Minutos más tarde, repartieron penales. Ronan O´Gara convirtió los tres puntos para los verdes y Leigh Halfpenny –desde mitad de cancha- hizo lo propio para los rojos, que en esa primera etapa se fueron arriba en el marcador por 10-3

Gran volada galesa

En el inicio del complemento Irlanda intentó mostrar otra cara. En los primeros minutos, se tranquilizó, dejó de buscar solamente por el centro y con un ataque más abierto complicó a Gales. Es por ello que a los 5 minutos de la etapa, logró empatar el partido en 10 gracias a un Try de Keith Earls y la sucesiva conversión.   Los dragones rojos respondieron rápidamente mediante una avivada de su medioscrum, Mike Phillips que encontró un hueco en la defensa y apoyó.  Minutos más tarde, la fragilidad defensiva de Irlanda volvería a salir a luz ya que Jonathan Davies se le escapó a todo el mundo, llegó hasta el in goal y sentenció el partido 22-10.

Con este resultado, Gales vuelve a una semifinal del Mundial luego de 24 años y deja sin chances a Irlanda que se había perfilado como la gran sorpresa de la Copa. Ahora, les toca con Francia.

 

El primer partido de cuartos de final enfrentó a Gales y a Irlanda. El conjunto Verde llegó a esta instancia como primero de su grupo, y mostrando un gran nivel –victoria ante Australia incluida-. Sin embargo, los Dragones Rojos fueron muy superiores a su par británico y se llevaron el encuentro por 22-10.

Desde el vestuario, Gales tomó el control del partido. Con un juego de potencia intentó romper la defensa irlandesa por el centro, el primer try del encuentro llegó a los 3 minutos.  Luego de una muy buena secuencia de ataques con los centros, la pelota, finalmente le llegó a Shane Williams que se zambulló y apoyó. Irlanda intentó a través de sus forwards, incluso tuvo una chance muy clara a los 16´ luego de un line, pero la defensa del ganador se puso firme y, finalmente, anularon.

Sandwich Irlandés

Más allá de la ventaja desde el arranque por parte de Gales, los primeros cuarenta minutos fueron muy equilibrados.  Exceptuando la opción de Try del equipo ganador, no hubo muchas más chances claras de apoyar en el In-goal.  Tal es así, que los esfuerzos de Irlanda por empatar el encuentro morían en el potente tackle galés, de esta forma se le hacía muy difícil avanzar más allá de la línea de 22 rival. Minutos más tarde, repartieron penales. Ronan O´Gara convirtió los tres puntos para los verdes y Leigh Halfpenny –desde mitad de cancha- hizo lo propio para los rojos, que en esa primera etapa se fueron arriba en el marcador por 10-3

Gran volada galesa

En el inicio del complemento Irlanda intentó mostrar otra cara. En los primeros minutos, se tranquilizó, dejó de buscar solamente por el centro y con un ataque más abierto complicó a Gales. Es por ello que a los 5 minutos de la etapa, logró empatar el partido en 10 gracias a un Try de Keith Earls y la sucesiva conversión.   Los dragones rojos respondieron rápidamente mediante una avivada de su medioscrum, Mike Phillips que encontró un hueco en la defensa y apoyó.  Minutos más tarde, la fragilidad defensiva de Irlanda volvería a salir a luz ya que Jonathan Davies se le escapó a todo el mundo, llegó hasta el in goal y sentenció el partido 22-10.

Con este resultado, Gales vuelve a una semifinal del Mundial luego de 24 años y deja sin chances a Irlanda que se había perfilado como la gran sorpresa de la Copa. Ahora, les toca con Francia.