Cuando apenas estrás al anfiteatro José Hernández y ves 40 personas paradas en el techo de los baños químicos revoleando sus remeras, ahí se logra entender el grado de pasión y salvajismo que convive en la sangre del público rengo. Pero primero lo primero. Esto fue una peregrinación nacional. Así se vivió.
El viaje en micro: Esquivando charcos
La gente de Tour de Rock, la agencia de viajes rockeros comandada por el simpático y pacífico Juampi, organizó dos micros con 120 personas para viajar desde Buenos Aires hasta Jesús María, donde el Chizzo, el Tanque y el Tete esperaban por sus fieles. RnB se subió al bondi, como un rengo más.
Las gallinas y los rengos encararon el mismo viaje con destino a Córdoba, el centro del país. River jugaba contra Instituto de visitante (empató 0 a 0) y La Renga optó por tocar el mismo día, en la misma provincia. Parada de micro que se presentaba, momento ideal para estirar un poco las piernas y pelar los trapos para marcar territorio. Bombo incluido. Los bondis que no tenían que ver con esas pasiones, optaban respetuosamente por hacer marcha atrás.
Viernes 14, el bondi arrancó cerca de la medianoche. Y tuvo rock de sobra: Las hormonas de chicos y chicas de 19 a 24 años explotaron sobre el micro de doble piso -sin ventanas-, armados con litros de escabio y los más bajos intentos de levante. Hasta vomitar, varios pesonajes del micro no frenaban. Y, en algunos casos, tampoco eso los paró. Sólo el amanecer los mandó a dormir.
Pasada la noche, después de un promedio de 4hs de sueño, el amanecer rengo del sábado 15 se vio con el pasillo del micro ahogado en un río de vómito, meo, varios tipos de alcohol y todo lo imaginable de un inodoro rebalsado. El desayuno? Gancia, fernet y cigarrillos.
El itinerario del Tour de Rock contaba con un almuerzo y previa en el camping “Del Lago” en La Falda. Los que no llevaron su heladerita, optaron por comer unos choris, mientras alzaban la vista y contemplaban el hermoso paisaje de sierras, laguna, verde, una cabra y un caballo. Almorzaras o no, el lugar daba para una siesta reparadora.
El recital, todos bailando en una pata
El recital fue como se intuía: una fecha más de la gira presentación de Algún Rayo, el último disco de los muchachos de Mataderos, pero sensible y obviamente afectado por el fatídico último recital en donde Miguel Ramírez perdió su vida. Con respecto a eso, el Chizzo (cantante y guitarrista), se sabe, no es un personaje demagogo arriba del escenario: “Fue un golpe muy duro para nosotros” dijo después de los dos primeros temas, y agregó: “Este es un espacio que hemos construido juntos durante más de 20 años. Son, cada uno de ustedes, una célula, un engranaje que construye este sitio único, casi imposible de conseguir en estos tiempos sin más sponsor que el corazón y el espíritu. Lo que le ocurrió a Keko fue un lamentable ejemplo que no tiene que ocurrir nunca más”. Luego se limitó al típico “gracias” al final de cada canción. Pero al final, antes de hablar de la libertad con todo su público y encarar el regreso a casa, el Chizzo se volvió a referir a aquel triste desenlace: “Esto, todo esto, está dedicado a él. Estamos seguros que hoy a Miguel lo tenemos acá. Por eso elegimos este lugar, Córdoba es el centro del país, queríamos que todos pudieran venir, de todos los rincones”. Para que conste, El twist del pibe lo tocaron con imágenes de Miguel proyectadas en las dos pantallas gigantes.
Escenografía de engranajes: Tanto el fondo como en las pantallas se jugaba con la industrial idea del engranaje como mensaje. Quisieron hacerle saber a todo el anfiteatro que cada pieza es fundamental para que funcione la maquinaria. Y la cosa estuvo bien aceitada y en óptimo estado físico.
Mechando temas de la última placa como Canibalismo Galáctico, Destino ciudad futura, Algún Rayo y La furia de la bestia rock, con canciones marcadas a fuego en los corazones de los presentes como El juicio del Ganso, el Viento que todo lo empuja, Bien Alto y El final es en donde partí. Un cóctel perfecto, sabiendo que los temas más recientes ya forman parte de los clásicos y nunca se corrió el riesgo de que las casi 30 mil almas no se supieran las letras. Eso con La Renga no pasa, cada canción, a los pocos días de editarse, ya es parte de la obra y por eso (y porque todavía conservan el toque para representar a la masa) todos se saben la lírica.
El público rengo, en otro intento periodístico más para explicar a este particular grupo de personas, durante el recital actúa como si durante todo el mes hubiese estado enjaulado, privado de su libertad, limitado de opciones y reprimiendo sentimientos: Las expresiones de sus caras en cada estrofa, demuestra que ellos encuentran con estos tres tipos un lugar feliz, un momento de anarquía, enamorados del rock duro, la libertad y la ruta. Sólo eso. Sólo eso es necesario para que el grupo de rock más importante de Argentina despierte eso que empuja a todos los que bailan en una pata.
En un rato, actualizaremos la nota con la lista de temas. Complicado tomar nota en medio de la pasión renga. (Banquen!)
Lo prometido es deuda, acá esta la lista de temas.
LISTA DE TEMAS:
1) Canibalismo galactico
2) A tu lado
3) El twist del pibe
4) Almohada de piedra
5) Algun rayo
6) A la carga mi rocanrol
7) El terco
8) La furia de la bestia
rock
9) Despedazado por mil
partes
10) Inventa un mañana
11) En los brazos del sol
12) Ciudad futura
13) Tripa y corazón
14) Poder
15) Montaña roja
16) Al que he sangrado
17) Cuando vendran
18) El juicio del ganzo
19) Dioses de terciopelo
20) Bien alto
21) El viento que todo
empuja
22) Veneno
23) Motoralmaysangre
24) Panic Show
25) Lo fragil de la locura
26) La razon que te
demora
27) Oscuro diamante
28) El final es en donde
parti
29) Hablando de la
libertad.
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