Máximo González dio la sorpresa en el Masters 1000 de Montecarlo. Venció al rumano Víctor Hanescu por 3-6. 7-5 y 6-1 y es el único argentino que participa del certamen.
¿Quién lo iba a pensar? No es por tirarle mala onda a González, pero al frente tenía a un jugador que venía demostrando tener más nivel que él. Sin embargo, el tandilense se la bancó y hoy demostró que le pone mucha garra.
González, quien clasificó por Qualy y se ubica en el puesto 93 del mundo, tuvo que luchar dos horas y 20 minutos de juego para obtener la victoria. El partido le presentó inconvenientes en el primer set, cuando lo perdió por 6-3. En el segundo parcial se repuso, jugó con mucha concentración y logró emparejar el match con un 7-5.
Después de tanto nerviosismo, el argentino se mostró muy tranquilo y cerró el encuentro con un cómodo 6-1 que lo metió en la segunda ronda del torneo. Su próximo rival será el español Nicolás Almagro, que tiene mucho oficio sobre el polvo de ladrillo, y viene de superar a Marcel Granollers por un doble 6-3. Almagro se consagró este año en el ATP de brasileño de Costa do Sauípe y Buenos Aires.
Entre otros partidos que se disputaron hoy estuvo el del número tres del mundo, Roger Federer, que pasó por arriba al alemán Philipp Kohlschreiber por 6-2 y 6-1, en tan sólo 50 minutos.
Federer quiere ganar este Masters 1000, ya que nunca pudo conseguirlo. Roger tendrá que sacarle la supremacía que tiene Rafael Nadal en Montecarlo, porque el español obtuvo las últimas seis competiciones.
También puede aprovecha que Novak Djokovic, que lo desplazó del segundo lugar en el ránking, no estará presente por una lesión en una de sus rodillas. De esta manera puede sumar puntos para ir recuperando un poco de terreno.
Los otros dos enfrentamientos fueron entre el español Feliciano López, que logró un triunfo ante el serbio Janko Tipsarevic por 4-6, 6-3 y 7-6. Además, el francés Gilles Simón dejó en el camino al brasileño Thomaz Belluci por 6-3 y 6-2.
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