No hay dudas de que el triunfo de San Lorenzo ante Estudiantes todavía está repercutiendo en Boedo. No sólo porque era un rival al que no se le ganaba desde 2008 o porque se ganó después de ocho partidos, sino porque los Cuervos parecen haber recuperado la fe ante las similitudes que ven en su club en comparación con River antes del descenso.
El equipo sigue muy cerca de la promoción, pero parece estar en condiciones de darle pelea a cualquiera. Con esa convicción, Omar Asad hizo su última práctica previa al choque con Argentinos, parando a los mismos once pero con la opción de que Méndez sustituya presencia en el mediocampo para aportarla en la ofensiva.
Con esto, el esquema cambiaría de un seguro y combativo 4-4-2 a un 4-3-3, quedando el centro con el trío Kalinski, Ortigoza, Bazán y la delantera con Salgueiro, Gigliotti y Méndez. Las frases trilladas y muchas veces fallidas del fútbol, afirman entre otras cosas, que equipo que gana no se toca. El Ciclón se mantuvo seguro en todas sus líneas ante el Pincha pero Asad, fiel a su estilo, preferiría optar por un equipo más ofensivo.
Sorprende el cambio que querría implementar el “Turco”, porque pareció haber encontrado no sólo los once sino el esquema que más cómodo le sentaba al equipo. Habrá que dejarlo actuar y después se verá, más viendo que últimamente cualquier equipo se lleva un triunfo del Nuevo Gasómetro, y especialmente cuando San Lorenzo regala el mediocampo o defiende con tres defensores.
Palabras más palabras menos, el Ciclón se mide mañana contra el Bicho a las 17.10 en el Pedro Bidegain, buscando escaparle a la zona del descenso y sumar puntos para prenderse, y para que su DT pueda encontrar el once ideal con el dibujo y los nombres que sean.
Por último, se confirmó que Bottinelli y Gigliotti conformarán la lista de la Selección Local que ya hizo pública Sabella. El delantero, sorprendido -como muchos- afirmó: “Tuve que escuchar dos veces el mensaje que me dejaron porque no lo creía”.
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