Una vez más ese reducto que tantas alegrías le dio a Estudiantes le jugó una mala pasada. El Pincha volvió a perder en el Estadio Ciudad de La Plata, esta vez ante Godoy Cruz, un rival que fue mucho más práctico y efectivo que los de Berizzo. Así, el León suma su segunda derrota como local y los fantasmas vuelven a aparecer. Además, el conjunto platense perdió la posibilidad de quedar como único puntero.
En el retorno esperado de Juan Sebastián Verón, Estudiantes recibió una lección futbolística como hace mucho que no recibía. El Tomba fue mucho más táctico e inteligente y hasta le deminó el ritmo del partido en algunos tramos del mismo. El Pincha no cambia la cara, a pesar de la victoria en el clásico y en Paraguay, sigue demostrando falencias a la hora de crear juego y lastimar a su rival.
Hubo muchos puntos bajos en Estudiantes y la mayoría de ellos juegan de mitad de cancha en adelante. Barrientos desconocido, el Chino Benítez no pudo hacer pie nunca en el partido, No fue la mejor tarde de Mercado y, como si eso fuera poco, Verón no estuvo a la altura de lo que se espera habitualmente de el.
Justamente nos quedamos con la Bruja. El emblema de Estudiantes parece no encontrar su lugar en el equipo. Si generalmente lo vemos con caras de fastidio, por estos días, esas caras largas se han multiplicado de forma llamativa, gesto que indica el malestar futbolístico del “11”. Por momentos, abusa del juego a un toque con cierta carencia de precisión, de todas formas la cancha no ayudó a las intenciones de la Bruja y todo el equipo. Sin embargo, esas intenciones aún no son acompañadas con buenas ideas.
Sin ir más lejos, de los úlimos cuatro partidos Estudiantes perdió dos, y en ambos estuvo Verón en cancha, con Banfield y Godoy Cruz. Y en los dos restantes, por cierto, mucho más importantes que los mencionados, el Pincha los ganó sin su emblema y con autoridad suficiente como para merecer la victoria, frente a Gimnasia y Guaraní, ambos de visitante.
No es para desesperarse pero la Bruja le baja un poco el ritmo al equipo y hasta genera cierta dependencia en el resto de sus compañeros, algo que, evidentemente, le hace mal al equipo.
En el choque de hoy frente al Tomba, Estudiantes tuvo mayor poseción de pelota pero de ninguna manera fue el dominador del match. Godoy Cruz fue quién llevó el partido a su manera y gracias a una pelota parda encontró la diferencia que, al fin y al cabo, mereció.
Resumiendo: Estudiantes no le encuentra la vuelta a este mal momento futbolístico. El cambio de Sabella a Berizzo todavía no terminó de definirse y algunos resultados a favor sirven para ocultar los serios problemas futbolísticos que tiene el equipo.
Berizzo merece un parrafo aparte.
Nuevamente Eduardo Berizzo confundió la manera de mirar el partido cuando el equipo se encontró en desventaja. De arranque Estudiantes salió a la cancha con un delantero, sistema que hasta aquí le ha dado grandes resultados. Sin embargo, luego del gol de Damonte, el ingreso de Hernán Rodrigo López era una fija, pero nadie, entre 30.000 personas pensó que terminaría jugando con un solo delantero. Además, habrá que ver que tendrá Nelson Benítez como para haberse quedado en cancha los 90′, teniendo la obligación de levantar un 0-1. Todas esas respuestas solo las sabrá Berizzo y será el, quien tiene la responsabilidad de que el barco salga a flote.
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