La posibilidad de que Juan Pablo Carrizo continúe en Nuñez después de junio parece, por lo menos, improbable. El pase del jugador está tasado en 6 millones de euros y el arquero no pretende resignar plata para continuar en el club. A eso hay que sumarle la aparición de Leandro Chichizola, quien viene cubriendo de forma correcta los tres palos del arco más grande del mundo.
“River es mi lugar en el mundo, ojalá hagan el esfuerzo para que pueda continuar uno o varios años más”. Esa fue una de las frases más resonantes de Juan Pablo Carrizo de ayer por la mañana, pero también el arquero de River (que viene recuperándose de una fractura y llegaría para el partido de la sexta fecha frente a Arsenal) sostuvo que no quiere resignar dinero para continuar en el club.
Con este panorama, el futuro de Carrizo parecería estar lejos de Nuñez, ya que la economía de los Ex “Millonarios” no permite desembolsar el monto cercano a los 6 millones de euros que vale su pase, y otro préstamo parecería imposible, ya que la Lazio pretende venderlo.
Carrizo no quiere volver a Europa, donde no tuvo buenas experiencias: comenzó siendo titular en Lazio, pero luego de algunos errores que costaron puntos, terminó siendo relegado al banco de suplentes. Terminó a préstamo en el Zaragoza, donde también vio desde el banco de suplentes como el equipo caía derecho a la Segunda División.
La única forma viable de que continúe en River después de junio es que el mismo Carrizo rescinda su contrato con el equipo italiano y recién ahí negocie directamente con el club de Nuñez. De todas formas, el arquero debería resignar dinero para que la negociación se concrete.
A todo esto hay que sumarle la presencia de Leandro Chichizola, quien viene teniendo buenos rendimientos en el arco Millonario. Esto genera tanto en el cuerpo técnico como en la directiva del club, poca preocupación por el futuro de Carrizo en River, ya que consideran que el arco está bien cubierto por el juvenil recientemente promovido y verían con buenos ojos que tenga continuidad pensando en que sería el titular a partir de junio.
De esta forma, solamente resta esperar que pase el tiempo para saber quién cuidará el arco de River. Lo único que sí queda claro, es que Carrizo tiene su futuro en sus manos.
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