En un partido que casi sentenció la Liga BBVA para el Blaugrana, Lionel Messi, que jugó la última media hora, se convirtió en el primer jugador en marcar 50 goles en una temporada en España.
Injusto fue, entonces, lo poco que se festejó el tanto y el lauro del argentino. Claro, en el Nou Camp todos tienen una palabra grabada a fuego: revancha. La derrota en la final de la Copa del Rey a manos del Madrid todavía duele.
El equipo de Pep se impuso 2-0 al Osasuna. El Guaje Villa rompió su sequía de once juegos y Lio firmó otro récord, pero todos ya le quieren ver la cara al equipo de Mourinho.
Por eso, el banco del Barça mostró una imagen atípica: Xavi, Iniesta y Messi sentados comodamente al lado de Pep, en cancha Villa, Afellay, Jeffren y una dupla de centrales argentina: Milito (se retiró lesionado) y Mascherano.
Párrafo aparte para el Jefecito. Guardiola había dicho que era una “joya” en esa posición. Hoy lo ratificó. Hay una gran noticia, Javier Mascherano volvió, está en un gran nivel y ya es una rueda de auxilio dorada para su DT.
Con Masche a punto, Lio como recordman y los cerebros descansados el Barça apunta a tener gran vendetta gran contra su eterno rival. ¿Será? Por lo pronto, la Liga quedó a un paso y la Copa del Rey, por ahora, es una tristeza enorme. ¿Será la Orejona la gran revancha? El Barça tiene con qué.
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