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Let’s Play Two: La pasión de Eddie Vedder

La película de Danny Clinch muestra otra faceta del líder de Pearl Jam: fanático, hasta las lágrimas, de los Chicago Cubs, el equipo de su infancia. Previa ideal antes del Lollapalooza 2018.

Eddie Vedder
Eddie Vedder

Editado en noviembre de 2017, el documental “Let’s Play Two”, dirigido por Danny Clinch muestra una faceta no tan conocida de Eddie Vedder, el líder de Pearl Jam. Su amor, su fanatismo, su obsesión por los Chicago Cubs. Para contextualizar un poco: los Cubs fueron, hasta 2016, el equipo que más había tardado en ganar una “World Series” de la Liga estadounidense de Beísbol: 108 años. En 2016, ese maleficio se rompió: los cubs ganaron la el banderín de la Liga Mundial, 71 años después de su primera participación en la serie Mundial, tras ir 1-3 en la serie final ante los Cleveland Indians. Casi un maleficio.

La banda ensayó a metros del estadio los días previos.

La película se centra, casi por completo, en Eddie Vedder. Se ven cintas de un joven Vedder parado frente al Wrigley Field, el estadio histórico de los Cubs. El film  contiene, además del documental, 17 canciones en vivo registradas por Pearl Jam (tocaron el doble) con un final poco habitual. El show finaliza con “All The Way”, que es el himno que Eddie Vedder compuso para los Cubs y “I’ve Got a Feeling”, cover de “Los Beatles”; con el que la banda cerró su show hace 27 años en Chicago, la primera vez que tocó en la ciudad de dónde es oriundo Edward Louis Severson III, o como todo lo conocemos, Eddie Vedder.

El film tiene perlitas como la aparición de Dennis Rodman, el testimonio de varios fanáticos que Pearl Jam ya había puesto en escena en “Immagine in Cornice”, el documental que narra su gira por Italia, en 2006 (También dirigida por Danny Clinch) y su aclamada “Pearl Jam Twenty”, la película de la banda, comandada por Cameron Crowe. El título de la misma “Let’s Play Two’, hace honor a una frase de la legenda de los Cubs, Ernie Banks.

Aparecen imágenes de un año deportivo inolvidable para los Cubs, intercaladas con un setlist que incluye temas más bien sensibles y no tan potentes como “Low Light”, “Better Man”, “Small Town”, “Inside Job” o “Crazy Mary” y que incluye dos temas de su último álbum, uno en los ‘extras’ (“Mind Your Manners”) y otro en la película oficial (“Lightning Bolt”).

Se ve a las claras la cercanía de la relación que Eddie mantiene con el club del cual es fanático: en el vestuario están los posters de los shows que Pearl Jam brindó en Wrigley a lo largo de los años y en partes de la película, se lo ve a EV dialogar con el dueño del equipo, el coach Joe Madden y algunos jugadores actuales, además de las leyendas de los Cubs.

La película va transcurriendo en esas dos líneas paralelas: lo que significa para Pearl Jam (y para Eddie, sobre todo) tocar en Chicago, en especial en el Wrigley Field, y toda la pasión que rodea a los Cubs, que aunque no acostumbrados a ganar, reúnen hinchas como fieles seguidores. Como nexo a esas dos historias excelentemente contadas y filmadas por Clinch, aparece un Eddie Vedder que arenga al estadio en medio de un partido por la “Serie Mundial”, ante los Indios de Cleveland y su emoción al conseguir el título de campeones.

Es una película distinta, porque más que en la banda, se centra en la pasión de su líder por su equipo de béisbol y en cómo el resto de sus compañeros lo acompañan en eso e incluso llegan a sentirse mimetizados por eso. Una pasión que se remonta a sus primeros años, a cuando iba a comer un pancho a  Murphy’s Bleachers, el pub que está ubicado a metros del estadio (cuya dueña aparece en la cinta) siendo un completo desconocido; a esta actualidad, donde siendo el líder de una de las bandas más grandes del mundo jamás olvidó su amor por los Cubs.

Vale la pena verla, para ver otra faceta de EV, para ver una gran historia sobre un equipo de béisbol ‘maldito’ y para disfrutar de parte del repertorio de Pearl Jam en vivo. Es el aperitivo ideal antes de su vuelta, para el Lollapalooza 2018.

Esta es la tapa del disco, DVD y Blu-Ray.