Luego de una semana de muchos cachetazos, el gobierno nacional se prepara para relanzarse con una nueva imagen. Tras el golpazo electoral y la explosión de la interna el Frente de Todos, el presidente Alberto Fernández se rearma bajo una premisa clara: ya fue todo. Así, el peronismo convocó a la vieja guardia para apagar el incendio, devolver algunos de los golpes recibidos y ponerle fin a la pandemia con una serie de medidas que buscan reactivar lo antes posible la economía y levantar el humor social.

VOLVIERON LOS INDESTRUCTIBLES

De la misma forma que en la película protagonizada por Sylvester Stallone y Arnold Schwarzenegger, el peronismo convocó a sus antiguos soldados para una última misión. Los nuevos ministros no son caras que puedan sumar votos, pero son expertos en apagar incendios y en devolver las piñas recibidas en esta semana. Así aparece Juan Manzur como nuevo Jefe de Gabinete. Un caudillo del peronismo norteño y gobernador de Tucumán tomó las riendas de una nueva gestión que busca cambiar el humor social en el tiempo inmediato. ¿Funcionará? Imposible saberlo ahora, pero en su primer día se encargó de marcar el rumbo que tomará el nuevo equipo el trabajo. “Tenemos claro el camino: implementaremos nuevas medidas que impulsen la actividad productiva, reparen la economía, y generen más puestos de trabajo”, publicó en redes sociales.

Mientras tanto, los “nuevos ministros” son soldados de mil batallas. Anibal Fernández vuelve al gabinete, esta vez como Ministro de Seguridad, lugar que supo ocupar durante el primer gobierno de CFK. Conoce el puesto y lo que se le exige desde las cabezas de la coalición. Además, es un hábil luchador en todos los aspectos. Cuando se algunos se quejaban de funcionarios que se escondían de las granadas de la oposición, él la para de pecho y la devuelve al contrario. Por eso mismo fueron convocados también Julián Domínguez al Ministerios e Agricultura, Ganadería y Pesca que condujo la cartera entre 2009 y 2011 (después de la crisis de la 125), y Daniel Filmus al Ministerio de Ciencia y Tecnología que iba a conducir si Daniel Scioli ganaba en 2015. Todos hombres de amplio recorrido, dejando en claro que este nuevo gabinete tiene mucho más volumen político que el anterior.

REMANGARSE Y PONERSE A LABURAR

En las primeras horas del nuevo gabinete, la tarea de todos fue, por lo menos, mostrarse muy activos. Por lo menos así marcó el camino Manzur en sus primeras horas como Jefe de Gabinete. Apenas 24hs después de jurar, se reunió con Carla Vizzotti, anunciaron las nuevas flexibilizaciones contra el Covid-19 y se reunió con el gobernador de Misiones para cerrar un acuerdo entre Nación y la provincia del norte. Más tarde, tuvo reuniones con el gobernador de Salta Gustavo Sáenz y el intendente de La Mantanza, Fernando Espinoza. “Estamos cumpliendo la palabra empeñada por el presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, de impulsar un país verdaderamente federal, con más oportunidades para todos”.

Mientras tanto, loa demás ministros también se pusieron rápidamente moverse para cambiar la imagen de la gestión de gobierno. Aníbal se reunió con el gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, para “resolver la inseguridad en Rosario”, como titularon algunos medios de comunicación. Por otro lado, los sectores del campo que venían amenazando con un paro al gobierno se mostraron muy entusiasmados con la vuelta de Dominguez. “Esperamos plantear los problemas, discutirlos y que tenga influencia para encontrar las soluciones que necesita la Argentina”, declaró el titular de ACSOJA.

YA FUE TODO

En esta misión que tiene el gobierno de cambiar el humor de la gente, la primera tarea fue ponerle punto final a la pandemia. Tras la reunión entre Manzur y Vizzotti, ambos salieron en conferencia de prensa a anunciar las flexibilizaciones que comenzarán a regir entre esta semana y el 1 de octubre. El fin de la obligatoriedad en espacios públicos, aforo de 100% en el sector gastronómico, aforo del 50% en eventos masivos y la apertura gradual de las fronteras empiezan a encaminar el regreso a la vieja normalidad. “Si esto sigue en esta dirección quiere decir que estamos transitando quizás la última etapa de la pandemia”, declaró el Jefe de Gabinete.

Al mismo tiempo, el gobierno nacional prepara una serie de medidas económicas para empezar a inyectar dinero en el bolsillo de la gente. Una de las principales es el aumento del Salario Mínimo, Vital y Movil, que rondaría entre el 46% y 48% según ámbito.com. Además, se está avanzando en un proyecto de jubilación a los 55 años para personal de trabajos insalubres, personal de salud, ferroviarios, entre otros sectores. Mientras tanto, el Jefe de Gabinete ya tiene en su despacho el proyecto del bono para jubilados de 6 mil pesos. También tiene entre manos la creación de un programa de capacitación para jóvenes de entre 18 y 24 años, con beneficios para las empresas que contraten personal a través de ese programa.

La tormenta ya pasó, las peleas terminaron y ahora comienza el trabajo de sanar las heridas. En el FdT volvieron a acomodarse espalda con espalda para que no los devoren los de afuera, y para eso se rearmó con full peronismo. Con la meta de conseguir resultados a corto plazo, es difícil que se logre dar vuelta la elección en noviembre. Sin embargo, si el gobierno vuelve a ver un rayo de luz al final del túnel, tantas peleas internas habrían valido la pena para pensar en una recuperación real y la reorganización pacífica de cara al 2023.

Matías Rodríguez
Estudiante de Comunicación en la UBA desde 2016. Suelo discutir sobre temas políticos y futboleros. En 2002 gané el premio al mejor dibujo de la sala celeste.