Por Juan Añel
Bayern Múnich venció al Flamengo 4 a 2 en los octavos de final del Mundial de Clubes, disputados en el Hard Rock Stadium. Los goles del Bayern fueron de Harry Kane, Joshua Kimmich y un autogol de Erik Pulgar, mientras que para el “Mengao” descontaron Gerson y Jorginho. Así, el Bayern se encuentra entre los ocho mejores del torneo.
Un encuentro entretenido y de mucho ida y vuelta, en el que Bayern Múnich salió a ganar desde el pitazo inicial. Un comienzo avasallador que parecía letal para los brasileños, ya que el conjunto dirigido por Vincent Kompany se puso 2 a 0 en los primeros diez minutos. Ante una baja de intensidad del equipo europeo, Flamengo descontó mediante Gerson, y cuando parecía que podía lograr el empate, Bayern aceleró y anotó el 3 a 1.
En el complemento, Michael Oliver, árbitro del partido, cobró la pena máxima luego de una mano de Olise dentro del área, que Jorginho se encargó de cambiar por gol. Minutos más tarde, Kane cerró el marcador anotando el 4 a 2 y su doblete en el partido. Fue un encuentro con muchos goles, pero Bayern parecía tener el control y, cuando aceleraba, generaba mucho peligro. El equipo de Felipe Luís aprovechó los minutos de bajón del conjunto alemán para descontar en esas oportunidades.
Pese al resultado, lo que más llamó la atención fue el intenso calor que sufrieron tanto los protagonistas como los aficionados en el Hard Rock Stadium. Como es de público conocimiento, en este certamen se implemento el “Cooling Break”, una pausa de dos minutos para que los jugadores puedan descansar y refrescarse debido a las altas temperaturas. Sin embargo, debido a una sensación térmica de 35 grados, este descanso se prolongó, y en el primer tiempo tuvo una duración de mas prolongada. Además, en las instancias finales de ambos tiempos se notaba el cansancio por parte de ambos equipos, que a veces ni podían correr.
Otro de los puntos que muestra este claro problema es el tiempo jugado. En la primera parte, se disputaron 23 minutos netos, de los 52´ que hubo en juego, y de los 107´ finales, solo se jugó el 46%. Esto es algo poco habitual de ver en competencias internacionales, donde suele haber un tiempo de juego por encima del 55%.
Tras clasificar a los cuartos de final, el Bayern Munich se medirá ante el Paris Saint-Germain, el próximo cinco de julio a las 13:00 hora de Argentina en Atlanta. Un cruce a lo Champions League, ya que tendrá a dos de los mejores clubes del viejo continente.
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