Las ansias se palpaban con tan solo dar un vistazo a las cuentas oficiales de La Medianera. Un micro lleno directo desde La Plata, su ciudad de origen, y un Roxy con los brazos en el aire fueron los grandes hitos de la noche del sábado.
Sube Rock le entibió las tablas a la banda principal, que comenzó el show con un salpicado por sus tres discos: “Blanco fácil”, perteneciente a “Cicatrices” (2017), “Vamos a ver”, de “Laberinto” (2014) y “Soledad”, de “Noche Tras Noche” (2010). “Ciudad del desamparo”, “Avisame” y “Al borde del abismo” fueron los anteriores a la emotiva presentación del grupo. “Somos lo que somos, La Medianera de La Plata, bienvenidos”.
El público, enardecido, arengaba cantando cada estrofa y agitando sus brazos al ritmo de la música de la banda. Los músicos se miraban entre sí con complicidad y sorpresa, mientras tomaban cerveza o encendían un cigarrillo entre tema y tema.
El recorrido por sus tres discos de estudio fue exhaustivo. Intercalaron canciones de “Cicatrices”, la estrella de la noche, con otras de sus dos producciones anteriores en una seguidilla del más genuino rocanrol. Para ello invitaron a la multitud a que acompañe con su voz a todo volumen. “Naufragio”, “Rutinas y demonios”, “No pretendas”, “Excusas” y “No creo” son algunos de los temas que sonaron.
El quinteto conformado por Esteban “Turco” Handula (voz), Mariano Salinas y Manuel Acosta (guitarras), Manuel Panizza (bajo) y Martín Blanco (batería) no dejó de demostrar su emoción en ningún momento de la noche. A las sonrisas en cada uno de sus rostros las coronaron las palabras del “Turco” hacia la mitad del show: “De La Plata a Palermo sin escalas. Nos hacen muy felices, gracias”.
El rock de “Mala vida” hizo bailar a todo el Roxy y dejó espacio al trance provocado por “Cicatrices”. A medida que la lista avanzaba, los agradecimientos continuaban. “Esto es muy fuerte, gracias a todos los que se acercaron desde La Plata, desde el oeste, desde acá de Buenos Aires, ¡gracias!”
Continuó “Melodías”, cuya versión de estudio cuenta con la colaboración Beto Olguín, cantante de Los Pérez García. El show llegaba a su fin y las piernas de los platenses bailaron nuevamente, aunque esta vez al ritmo de “Made in Argentina”. Los primeros acordes de “Laberinto” sonaron al tiempo que el cantante interpeló emocionado: “mucho amor y mucho corazón le metemos a esta banda, sin ustedes sería imposible”.
“Mi lado más oscuro”, “Traicionero” y “Así todo va” finalizaron el show de la noche lluviosa de Palermo. “Son una masa, buen viaje de regreso a casa” se despidió el “Turco”, y la banda dejó el escenario mientras el telón se cerraba al compás de los aplausos del público.
Por Trinidad Mosqueira
Fotos por Sofi Vara Fotografía
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