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En Mastai nadie se quedó con hambre

Condimentos de todo tipo, platos para todos los paladares y música como para saciarse. El Mastai ofreció un menú variado y nutritivo en su parte más fuerte: Rock al palo con Divididos, himnos piojosos y baile con Ciro, Rock canción y candombe con NTVG y fiesta y reclamo social con Manu Chao. ¡Bon apetit!

Entre los cuadros poderosos o grandes que ofreció el festival Mastai se encontró un menú bastante variado. La potencia de Divididos, el carisma de Ciro y Los Persas, la canción de No Te Va Gustar o el histrionismo de Manu Chao. Había para elegir. Estuvo todo armado como para que nadie se vaya a la cama sin postre.

Luego del show de Damas Gratis y del que brindó de manera correcta y virtuosa Lisandro Aristimuño, fue momento que el trío Ciavarella-Arnedo-Mollo tomara el escenario por asalto. “Crua Chan”, éxito inoxidable de Sumo abrió el show de “La Aplanadora”, que a lo largo de casi 20 temas y una hora y media reafirmó sus credenciales y detonó el Mastai.

Una postal eterna: Mollo y su guitarra, esta vez en Mastai. (Edu873)
Una postal eterna: Mollo y su guitarra, esta vez en Mastai. (Edu873)

Divididos hizo gala de la potencia de siempre, en un viaje furioso y distorsionado a través de su discografía, haciendo especial hincapié en “Narigón del Siglo” (2000) y “Amapola del ‘66” (2010), además de algunas cosas de Sumo e incluso el homenaje a Pappo con “Sucio y Desprolijo”. El final del show fue con el dueto imbatible: “El 38” y “Ala Delta”.

Inmediatamente después del show del Power-trío, Andrés Ciro Martínez, acompañado de Los Persas inició un show de casi dos horas de duración. “Banda de Garage” y “Barón Rojo” comenzaron un show que tuvo el repaso por los dos discos del ex Líder de Los Piojos y varias gemas de la discografía piojosa como ingredientes.  Así, sonaron “Taxi Boy”, “Ruleta”, “Genius”, “Pacífico” e incluso “Zapatos de Gamuza Azul” y “El Farolito”. Además, Ciro anunció que cerrará el año Persa el próximo 11 de diciembre, en el Luna Park.

Ciro siempre cumple. (Edu873)
Ciro siempre cumple. (Edu873)

Martínez repasó los temas de “Espejos” (2010) y “27” (2012), que estuvieron balanceados en la lista casi en partes iguales. El cierre fue con “Astros”, “Zapatos..”, “El Farolito” (Con medley con “La Rubia Tarada”) y “Noche de hoy”, y culminó con la tradicional lectura de banderas.

Por supuesto, la puesta en escena de Ciro fue muy buena y la de No Te Va Gustar no podía ser menor. La banda uruguaya, a esta altura casi argentina, arrancó apenas el ex Piojo dejó la escena. Con un juego de luces y de pantallas excelente, los charrúas repasaron los temas de “El tiempo Otra vez avanza” (2014), su último disco presentado en Vélez este año y varios de “Al Calor del Pleno Invierno” (2012) como “Ese Maldito Momento”.

Sus temas más nuevos fueron alternados con varios de los temas más pedidos de su discografía, como “Al Vacío”, “Te quiero Más”, “Hoy te quiero más”, No se les da”, “Verte Reír”, “Te Voy a Llevar”, “No hay dolor”, ”Fuera de control” y “No era cierto”.

NTVG cierra otro año excelente. (Edu873)
NTVG cierra otro año excelente. (Edu873)

Quedó claro que, comparado a lo primero de su discografía, NTVG exaltó su costado pop, más que nada en sus últimas dos placas. Así fue como, en medio de algunos temas inoxidables, metieron algunos de sus nuevos hits como “A la izquierda del cero”, “A las 9” y “Tan lejos”. De todas maneras, los liderados por Emiliano Brancciari siguen en “luna de miel” con un público argentino que los sigue con devoción.

Manu Chao a pleno cerrando el Festival. (Edu873).
Manu Chao a pleno cerrando el Festival. (Edu873).

Sobre la 1 de la mañana, Manu Chao subió al escenario. Y si bien bastante gente fue abandonando el predio, un gran número de público se quedó para bancar los trapos con el show del artista vasco francés.

La Vida es una Tombola (el Pibe)” y otros éxitos como “Clandestino” y más completaron el show del artista que estuvo acompañado por “La Ventura” y, como cada vez que pisa este suelo, elevó el grito pidiendo “fuera Monsanto”, criticó la minería a cielo abierto en San Juan, y también, pidió por los 43 estudiantes desaparecidos en México.

Así, el Mastai se cerró con un nivel altísimo, con cuatro últimas bandas que, solas, justifican el precio de una entrada. Con una oferta tan tentadora, es lógico que el festival se haya convertido en un plato suculento y delicioso. Eso sí, nadie se quedó con hambre. De música, al menos, no.

 

 

 

Fotos Edu Romero

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