“Diego Fidel Garcia Barquín y Holy Rodri te invitan a sumarte. Somos vecinos y admiradores que apoyamos el cambio de nombre de la calle Iberá por el de Luis Alberto Spinetta (…)”. Con estas palabras, un grupo de fanáticos del Flaco propuso que la calle en la que él vivió sus últimos años pase a llevar su nombre, a modo de homenaje y también, de alguna forma, una manera de mantenerlo más cerca.
La idea es hacerlo presente de un modo concreto en el barrio de Villa Urquiza: “Homenajeemos a un grande que se fue, honremos a la ciudad que tuvo la suerte de tenerlo, que nos siga dando luz todos los días con su nombre”. Es cierto que todavía es muy poco el tiempo que pasó y sigue costando hacerse a la idea de que Luis ya no está físicamente entre nosotros, pero justamente por ese motivo, la iniciativa parece más que adecuada.
Si bien el Flaco ya tiene su calle en la ciudad de Neuquén –Maestro Luis Alberto Spinetta-, la idea de quienes proponen el cambio es justamente perpetuar su nombre en Buenos Aires, donde además, según su hijo Dante, serán repartidas sus cenizas –más específicamente en el Río de La Plata-: “La idea es testimoniar el último domicilio del Flaco por siempre”.
La iniciativa se está difundiendo a través del grupo de Facebook “Cambiar el nombre de la calle Iberá por Luis Alberto Spinetta”, que ya va camino a los 1.300 fans. Con un poco de suerte, éste podría ser el primero de muchos otros merecidísimos homenajes, una forma de empezar a agradecerle por tanto.
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