Decir Springfield es decir Los Simpsons. Está equivocado aquel que cree que me voy a referir a los seis Springfield que hay en Canadá o a los más de treinta que están situados en Estados Unidos. Hoy les voy a contar como es el deporte en el Springfield ficticio, el mismo que miramos horas y horas por televisión, sin importar horarios y repeticiones de capítulos. Sí, es el Springfield que tiene como Intendente a Joe Quimby, el mismo que queda en Takoma del Norte y tiene a Los Isótopos como el equipo de béisbol local.
En la ciudad que el juego y el matrimonio entre personas del mismo sexo es legal, el deporte es un pasatiempo, es como ir a tomar una cerveza a la Taberna de Moe. En Springfield se encuentran Los Isótopos, que sirvieron como inspiración para la creación de Los Miami Marlins en 1993, un equipo que hoy juega en las Grandes Ligas. Gracias a una huelga de hambre realizada por Homero, Los Isótopos siguen perteneciendo a Springfield, aunque en la vida real este equipo es de Albuquerque y participa en las Ligas Menores.
En Springfield está el Estadio Duff (marca de cerveza), allí juegan Los Isótopos, pero también hay cancha de básquet, ya que una franquicia de la WNBA pertenece a la ciudad, y a esto se le suma un estadio de hockey sobre hielo, donde Bart y Lisa alguna vez terminaron fomentando su hermandad siendo rivales. Estos no son los únicos deportes que se practican en la ciudad animada, no hay que olvidarse que una vez Portugal y México fueron protagonistas del partido de fútbol más aburrido de la historia, el mismo que se suspendió por disturbios en las tribunas, no porque haya barras, sino por la falta de paciencia de los espectadores que no aguantaron que los seleccionados se pasasen la pelota entre ellos. Son los mismos hinchas que se ilusionan los pum para arriba de Los Átomos.
En Springfield también hay carreras de Nascar, como así también kartódromo y canódromo, e incluso la Asociación de boxeadores semiprofesionales de la ciudad tiene su lugar, allí Homero también tuvo sus noches de gloria, como cuando gracias a su sobrepeso salvó al país de un desastre nuclear.
En 1976, cuando se fundó, nadie hubiera imaginado que con un poco más de treinta mil habitantes esta localidad iba a poder disfrutar de tanta diversidad de deportes, como así también de paisajes, ya que si nos ponemos minuciosos podemos apreciar sus bosques, praderas, playas, lagos, glaciares e incluso el Monte Springfield, pero lo vamos a dejar para otra ocasión porque acá no se habla de geografía.
Aprovechando la oportunidad, y siguiendo con la línea de Rock and Ball, no hay que olvidarse de Los Borbotones, tampoco de Los Beatles, ya que según sus creadores, salieron de Springfield.
Comentarios