Lionel Messi erró un penal y demostró que es humano, pero en España no le perdonan ninguna equivocación al mejor jugador del mundo, porque ahora el sitio superdeporte.es sacó a la luz una estadística que dice que el delantero del Barcelona es el jugador de la Liga que más pelotas pierde por partido.
Las 279 pelotas que perdió el Rosarino son escasos argumentos de los detractores para criticarlo. Se olvidan de resaltar que es el que más veces remató al arco en toda la temporada (51) y el noveno jugador que más faltas recibió, 41 en 20 partidos. Cada vez que Messi hace un gol, en el 89 por ciento de los partidos el Barcelona gana; y si no lo hace, en el 52 por ciento de los encuentros los dirigidos por Pep Guardiola no consiguen el triunfo.
La Pulga está segundo en la tabla de goleadores de la Liga española, con 22 tantos, y es el tercer máximo asistidor de España. Para los Gallegos, los números de Messi no alcanzan.
El empate de ayer del Barcelona frente al Valencia, en la noche valenciana, en Mestalla fue inmerecido, porque el conjunto Culé debería haber ganado el encuentro, por haber sido mejor que el rival, por haber sido el protagonista del encuentro, por las situaciones de gol que generó, pero en el arco del local estaba Diego Alves, un brasilero experto en penales, tal así, que su apodo es El Parapenaltis. Justamente, este arquero fue quien evitó el gol de Messi y el triunfo del Barça. Le atajó un penal cuando el partido estaba 1-1, y así terminó.
De estas pequeñas cosas se agarran aquellos que consideran, creen y sustentan que el argentino no es el mejor del mundo. Si un jugador pierde la pelota, es porque antes la pidió y se desmarcó para recibirla, esa es la virtud de Lio.
Hoy en el fútbol, tanto en inferiores como en los profesionales, se buscan jugadores que tengan técnica, velocidad y fuerza física y mental; a todos estos atributos el mejor jugador de los últimos tres años los tiene, además de su puntería por excelencia y su promedio de gol, casi uno por partido (216 en 301).
Hay detractores, como también hay futboleros que ponen a Messi por delante de su familia, pero no hay que irse por las ramas. El capitán de la Selección argentina, hoy es el mejor, le guste a quien le guste. El debate está abierto y enriquece.
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