Juan Mónaco dejó todo en la cancha, pero Roger Federer lo derrotó por 7-6 y 6-4, eliminándolo en la tercera ronda del Masters 1000 de Miami. El tandilense hizo un buen partido, jugó concentrado e intentó complicar en todo momento al suizo.
El primer set fue parejo, iban ganando un game cada uno, incluyendo quiebres de ambos. El match estaba 2-2, cuando cada uno empezó a mantener su servicio. Sin embargo, en el momento que Federer se puso 6-5 arriba, Pico demostró tener un corazón gigante y levantó tres set points seguidos, obligando a tener que jugar un tie break para definir la manga.
En dicho tie break, el número tres del mundo demostró por qué se encuentra en esa posición y llegó a ser el mejor ránking ATP. Obtuvo un 7-4 en la definición del último game, y se quedó con el primer parcial por 7-6.
La segunda parte también fue muy pareja, en la cual Mónaco aguantó su saque hasta el noveno game, en el que el suizo logró quebrarle el servicio. Luego de no poder defender su saque, Pico se esforzó pero fue en vano. Federer tuvo una gran categoría y, al no perder su servicio, cerró el triunfo con un 6-4, que lo depositó en los octavos de final, donde se medirá ante el belga Oliver Rochus, quien venció al ruso Mikhail Yhouzhny con parciales de 1-6, 6-3 y 6-3.
Por su parte, Carlos Berlocq, quien parecía ser la revelación del certamen, cayó ante el checo Tomas Berdych por 7-6 y 7-5. Más allá no poder clasificarse a la siguiente ronda, hay que destacar el buen juego de Berlocq, que viene remontando poco a poco su nivel.
Es una pena, Carlos, te mataste dos horas y 15 minutos para seguir en Miami, pero no importa el resultado, sino que hayas dejado una buena impresión demostrando que estás para más.
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