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Olarán: “El Racing del 88 no ganó más títulos por culpa de De Stéfano”

Carlos Olarán, ex jugador de Racing, campeón de la Supercopa 1988, habló con Rock and Ball al cumplirse 25 años de aquella memorable conquista que llevó nuevamente a la Academia a los primeros planos después de varios años sin títulos y descenso mediante.

“El secreto de ese equipo estaba en la camaradería que había en el grupo, la unión que teníamos. Encabezado por un cuerpo técnico de experiencia y personalidad. Alfio Basile te sacaba a la cancha diciendo ‘acá no hay visitante ni local, ustedes pertenecen a un equipo grande, ésta camiseta se hace valer en cualquier terreno’. Después de eso salías como un león”.

Olarán ofreció su punto de vista de por qué ese Racing no logró un campeonato argentino: “Ese equipo no ganó más títulos por culpa de Juan De Stéfano. Muchos jugadores me contaron que cuando estaban en la B, les ponía un arma en la mesa cada vez que iban a reclamar algún premio. De esa manera se manejaba. No podía aguantar estar en un segundo nivel, tenía que estar primero.” Y agregó: “se peleó con nosotros y desarmó el plantel que obtuvo la Supercopa. Después quería tumbar a Grondona y se pelea con todos los árbitros. Si hubiera bajado un poco esa autoestima, ponerse al lado del plantel, ese equipo salía campeón dos o tres veces”.

El ex marcador de punta no se guardó elogios para Basile: “Nosotros teníamos una mística ganadora. Me quedé muy identificado con lo del Coco, con su personalidad, con los códigos. Hoy es difícil tener tipos así”.

Para Olarán el mejor partido de esa Supercopa fue el encuentro de vuelta con River por la semifinal. “Fue lo más emocionante. Hasta hoy siento la emoción de la gente con el gol sobre la hora. Ese partido fue más significativo que la propia final, porque era River y porque tenía un gran plantel”.

También hizo referencia al polémico partido con Boca que se suspendió por una bomba de estruendo que cayó al lado del arquero Navarro Montoya: “Varios años después me enteré que todo fue preparado por De Stéfano, que había recibido plata de Boca para permitir que los xeneixes se clasificaran para la Liguilla pre-Libertadores. Nos traicionó a nosotros. Es un tipo soberbio que no pudo ver mas allá de su propia persona”.

Debutó en Argentinos Juniors en un encuentro muy especial,  y recordó cómo fue ese día. “Debuté en 1980 en un partido amistoso entre Argentinos y el Cosmos de Estados Unidos que venía por lo que significaba Diego Maradona. Fue en la cancha de Vélez, un día lluvioso. Entré faltando 20 minutos. Recuerdo que había mucha agua y la pelota no picaba muy bien. En una jugada Diego la llevo de aire desde la mitad de la cancha hasta casi la línea del córner y tiró el centro. Era impresionante estar al lado de Maradona en su plenitud.”

El ex jugador de Chacarita, All Boys y El Porvenir, también jugó siete años en el fútbol de Israel. “La experiencia fue muy buena, gané varios títulos. Pero en lo extrafutbolístico viví situaciones fuertes. Cuando llegué comenzaba la primer guerra del Golfo. En un momento me tocó jugar cerca del Líbano y lo primero que pregunté es donde estaba el Bunker, porque cada tanto caía una bomba. En un momento estaba tan sugestionado con el tema de la explosión de colectivos que si tenía uno cerca, aceleraba. Una vez voló uno a dos cuadras de donde vivía”, relató.

Carlos Olarán jugó en varios equipos pero se hizo hincha de Racing después de identificarse a fuego con la pasión de la gente. “Ahora los jugadores no están identificados con el club en el que juegan. El empresario ha ayudado al jugador a ganar dinero, pero se perdió el caudillismo, la identificación con los colores, la responsabilidad de progresar”. Palabras de un hombre que pintó su alma de celeste y blanco, para siempre.