Julio César Falcioni tiene la horas contadas en Boca. Sí, apenas se jugará la segunda fecha del torneo que recién comenzó, pero el DT ya está cercado. Más por el pasado que por el presente.
Varios directivos ya lo miran de manera indiferente y en la última reunión de CD, según averiguo Rock ‘N Ball ya se nombraron algunos técnicos para sucederlo en el puesto. O la silla eléctrica, bah.
La reunión se dio el pasado miércoles. Falcioni, por más que hoy haya dicho “No pienso renunciar”, sabe que tiene las horas contadas. “En Boca se juega el puesto en cada partido”. Bueno, nunca mejor resumido. Si no hay victoria ante Unión habrá salida del DT. Quizás un empate decoroso estire la agonía, pero un Boca tan apático como el que se vio en Bahía Blanca no se tolera más.
Ojo, nadie se rasgará las vestiduras ni dentro ni fuera de Boca. El plantel no lo apoya para nada, sobre todo los más pibes que vieron como este torneo jugaron los Ervitti y Rivero, pese a la gran performance de, por ejemplo, Colazo y Chávez. Por eso, nadie derramará lágrimas de sagre si el ex DT de Banfield deja el club.
¿Y Román? Juan Román Riquelme no es estúpido. Sabe que cuando Falcioni debió decidir se inclinó por los “Palermistas” y no así por los “Riquelmistas“. Claro, nunca lo dijo abiertamente, pero lo demostró con hechos.
La relación con el diez se quebró en la segunda fecha del Clausura pasado, cuando Boca igualó 0-0 ante All Boys y Riquelme “lesionado” ni concentró. El DT y el Diez no se podían ver. Nunca pudieron. Hacia el final del torneo todo fue más un matrimonio por conveniencia que una relación sólida y/o amistosa.
Cuando empezó este torneo, Falcioni mutó. “Retiró” su Palermismo y lo reemplazo por un riquelmismo que envidiaría el propio Horacio Pagani, pero no alcanzó. Román no olvida ni perdona. Sabe que lo pisoteó la temporada pasada y si la CD decide que es hora que el DT se vaya no será él quien alze la voz para pedir lo contrario, como si lo hizo, por ejemplo, con su amigo Alfio Basile.
Falcioni está muy enojado con los directivos Xeneizes. Siente que lo traicionaron que le largaron la mano y cuando se enteró que ya hay nombres en danza sólo aumentó su malestar. Sabe que necesita ganarle a Unión de manera clara y concisa para seguir en el cargo.
LA DANZA DE NOMBRES
¿Nombres dijimos? Sí, nombres. Se tiraron varios, Rock ‘N Ball tuvo acceso a cuatro. Gerardo Martino (cerca de la Selección de Colombia), Gabriel Batistuta (reconoció públicamente que le tienta la idea), Diego Cagna (siempre sonó para Boca, aunque también se dijo que su relación con Román no era la mejor y Sergio Batista ¿El Checho? Sí, el Checho ¿Pero cómo? ¿Después de su fracaso estrepitoso? “No te olvides que es amigo de Román”, le dijeron a RnB. Será cuestión de esperar.
Lo único real es que Julio César Falcioni, si sigue así, díficilmente llegue a una cuarta fecha, incluso varios ponen en duda una tercera. ¿Y si le gana a Unión? Quizás siga. Ahora, ¿cómo se adquiere un consenso en año de elecciones en Boca?
Se va a tener que hacer como en River. Llamar a la oposición y negociar un nombre en común. Un nombre que no peligre gane quien gane en diciembre. Al menos esa sería la idea. De lo contrario, no sería descabellado un interinato hasta que haya un nuevo presidente en Boca. Que habrá nuevo presidente es una certeza. Que habrá nuevo técnico casi que también.
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