Para muchos es una pavada vivir del fútbol, pero hay otros que intentan hacer lo mismo desde hace años y no pueden, trabajan muy duro en busca de conseguir que su trabajo sea valorado, que sea la misma condición para todos, si hablamos de este deporte como algo profesional, ¿por qué se hacen excepciones?. En estos momentos, hay un seleccionado que vive momentos de gloria y que si nos ponemos a contar la historia de cada protagonista, muchos se sorprenderán.
La Selección de Tahití sufre graves problemas institucionales y la mayoría de su plantel (por no decir todos), son de categoría “amateur”, seguramente sean tan profesionales como los brasileros, españoles, argentinos y tantos otros, pero ellos parecen seguir siendo marginados y sin poder contar con esos beneficios, el no poder vivir de la profesión que aman los hace crecer y elevarse cada día más en búsqueda de nuevos objetivos, demostrar constantemente que ellos pueden ser iguales a los demás sería conseguir el logró máximo.
Nunca jugaron un mundial (incluyendo el próximo que vendrá), jamás estuvieron cerca de ser importantes dentro del fútbol, la gloria no la conocen y ni siquiera la vieron desde lejos, pero el presente que viven en estos momentos, no lo cambian por nada. En pocos días comenzará una nueva edición de la Copa Confederaciones y Tahití participará de ella, no llega como invitado, es el actual campeón de la Copa de las Naciones de la OFC y bien merecido tiene ese lugar, ganó sus 5 partidos, convirtió 20 goles y tan solo sufrió 5. Por supuesto que la calidad de los equipos que disputaron esa competición no están ni cerca de el nivel que mantienen equipos como Uruguay, España, Italia o el local Brasil, pero… ¿quién te quita lo bailado no?.
En el ranking FIFA se ubica en la posición número 138, la Federación Tahitiana se afilió a dicha asociación en el año 1990 y su torneo interior es compuesto por tan solo once equipos en primera división y seis en la segunda. Tiene un técnico joven de tan solo 43 años y todo su plantel (menos el delantero Marama Vahirua que jugó en ligas importantes percibiendo sueldos como profesional) son de categoría amateur. Su técnico dijo lo siguiente: “jugamos con 99 por ciento de amateurs y uno por ciento de futbolistas profesionales”.
Marama desarrollo casi toda su carrera en el fútbol francés jugando para el Nancy, Lorient, Mónaco y actualmente en el Panthrakikos, institución a la que debieron pedir permiso especial para que el futbolista de 33 años este disponible para este certamen tan importante. Tahití fue el primer equipo en llegar a tierras brasileras para disputar esta competición, fiel reflejo de todas sus ganas, de estar viviendo un sueño y con la ansiedad de salir a la cancha para enfrentar por su grupo al campeón de Europa, el de América y también el de África, imaginar que este plantel le puede pelear mano a mano a España, Nigeria y Uruguay es casi imposible.
Stevy Chong-Hue pertenece a este conjunto y en broma dijo lo siguiente: “Juego con velocidad, mi estilo se parece al de Neymar, sólo que con menos técnica”, más allá de cualquier chiste, cada uno de estos tipos esperan no ser la “cenicienta” de la Copa y que varios ojos importantes sirvan para observar algunos nombres que puedan transformar su carrera en profesional. Usar estos partidos como vidriera, no es mala opción. Hace pocos días, perdieron 7 a 0 con la selección sub 20 de Chile… chances de llegar lejos en Brasil no tienen, sinceramente jugarán más para cada uno de ellos, por su futuro y sin importar lo que le pase al equipo en cada encuentro.
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