Cuando se hizo de público conocimiento el recital de Charly García en el Teatro Colón empezaron los cuestionamientos. Algunos decían que no debía suceder porque no era el lugar adecuado por el tipo de recitales que el músico realiza habitualmente, a pesar de que en esta ocasión iba a estar acompañado por un doble cuarteto de cuerdas. Sin embargo la gran mayoría apostaba a que el músico argentino iba hacer de “Líneas Paralelas – Artificio Imposible” algo maravilloso. Las entradas para ambos días de presentación se agotaron en apenas unas pocas horas. El lunes fue su segunda y última – por ahora- presentación en el reconocido teatro.
Antes de que todo comience una voz anunció que el concierto se iba a poner en marcha, además recalcó una y otra vez que se apaguen los celulares y que estaba prohibido filmar o tomar fotografías. Esa voz aclaro que todo lo que sucediera en el escenario iba a ser filmado para un futuro DVD de García y su banda The Prostitution. Por otra parte la noche estuvo llena de ovaciones la primera fue para Fito Páez y León Gieco que dieron el presente, ya que no quisieron perderse este particular proyecto. El público para esa hora ya estaba muy impaciente, los acomodadores entre corridas tratando de ubicar a los que llegaban casi sobre la hora comentaban que era increíble lo que estaba pasando porque el teatro no colma su capacidad habitualmente.
El histórico telón del Teatro Colón se abrió pasada las ocho y media de la noche, previamente música clásica puso en clima a los presentes. Las primeras notas de “Dileando con un alma” comenzaron a sonar y desde allí hasta el final todo fue magia y grandeza. El público explotó al ver que Charly García ingresó al escenario, el exSeru Giran lleva puesto un traje negro, camisa roja y un sombrero con un estilo muy tanguero. La lista de temas continuo con “No te animas a despegar” del disco Piano Bar y luego fue el turno para el primer tema de la época de Seru Giran “Desarma y Sangra” que comenzó con una intro muy similar a “Because” de The Beatles. Charly Garcia se ubicó en el centro del escenario protegido por una estructura de madera donde ubico sus pianos y sintetizadores, el exSui Generis aceptó el avance de la tecnología y ubicó estratégicamente cuatro Ipads alrededor de sus instrumentos.
La voz de García ya no es aquella que entonaba “Necesito tu amor” o “Fantasy” a la perfección, es sabido por todos los problemas de salud que este artista tuvo que pasar. Pero a pesar de esto y sus 61 años Carlos Alberto García Moreno tiene ese don, ese que solo lo poseen los más grandes y gracias a esto pudo crear y llevar a cabo este recital de tamaña magnitud. Demostró una vez más que su habilidad sigue intacta, su virtuosidad para tocar las teclas del piano aún las posse, y su calidad al momento de tocar en vivo no se devalúa.
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“Buenas Noches, ante todo” exclamó Charly previamente al primer instrumental de la noche “Rejas Electrificadas”, en este tipo de temas fue donde más se pudo apreciar el sonido que emitían el dolbe cuarteto de cuerdas. Una de las sorpresas fue la aparición del actor Jean Francois Casanovas que recorrió todo el escenario vestido de mujer y se adueñó de la atención del público por un momento mientras sonaba “Tango en segunda“ y “El amor espera”. La puesta en escena y el armado estético del escenario estuvo a cargo de la artista plástica Renata Schussheim, que ya había trabajado con Charly 1982 en el recital en Ferro.
Entre tema y tema el público se puso de pie para aplaudir al genio de la música, él agradecía con saludos y reverencias, hubo mucho ida y vuelta con el público. Para ese momento de la noche la banda sonaba perfecta, The Protistution compuesta por Rosario Ortega (voces), Toño Silva (batería), Fabián Von Quintiero (teclados), Fernando Samalea (percusión y xilófono entre tantos instrumentos) , el “Negro” García López (guitarra principal) en esta ocasión estuvo gran parte del show sentado y rodeado de sus pedaleras, Carlos González (bajo), Julián Gándara (cello), Christine Brebes (violin), Kiuge Hayashida (guitarra) y Herman Ringer (violin) completan la formación que acompaña a García actualmente, el grupo se lució en cada una de las interpretaciones.
El repertorio preparado especialmente para los recitales en el Teatro Colón realizó un repaso por toda su carrera. “No te dejes desanimar” fue una de las canciones más esperadas, porque es uno de esos que Charly García no toca habitualmente y pertenece a la época de “La máquina de hacer pájaros”, agrupación que solo publicó dos álbumes y fue pionera del rock progresivo en Argentina. “Monóculo Fantástico” y “Promesas sobre el bidet” hicieron levantar de sus asientos una vez más a todos los presentes para una ovación que duro varios minutos. “Anhedonia”, “Reloj de Plastilina” y “Constant Concept” tema instrumental donde el artista invitado fue el saxofonista Bernardo Baraj, completaron la seguidilla para cerrar el primer acto “Vayan a tomar algo” dijo Charly y el telón se cerró.
El intervalo suele ser común en conciertos de música clásica pero no está presente en recitales de rock. La gente se impaciento nuevamente y al compás de las palmas se inició el aliento hacía García: “Ole,ole,ole,ole,Charly,Charly” y continuaron con “Si esto no es aguante, ¿El aguante donde está?” haciendo referencia al seguimiento incondicional que se tiene para con el músico.
Se anunció por los parlantes que el intervalo llegó a su fin, el loop de “Yendo de la cama al living” se inició junto al desaforado grito de la gente al caer en la cuenta de lo que se venía y de esta manera comenzó la segunda parte. Una gigante bola de espejos de cristal se asomó por lo alto de la escenografía para iluminar con luces celestes todas las butacas del teatro, y de repente los años 80 renacieron.
Charly García volvió a escena con un sacó violeta, el sombrero lo dejo lado. Síntomas de que García estaba feliz y cómodo con lo que estaba sucediendo fueron cuando bailó, recorrió el escenario y se recostó varias ocasiones en el sillón de cuero negro ubicado en uno de los costados. Con sus músicos dialogaba constantemente, les hacía seña de que todo marchaba bien y pedía aplausos para cada uno de ellos. Fue momento de presentar a Kashmir el doble cuarteto de cuerdas, que el propio Charly aclaró que la denomino así en homenaje al tema de Led Zeppelin. “20 trajes verdes” y “Los dinosaurios” continuaron con el show que fue increíble.“¿Les gusta el teatrito este? Entonces vamos a tocar seguido” dijo Charly entre risas, mientras se acomodaba para seguir deslumbrando con su música. Cabe destacar que en febrero del año próximo se realizará otra serie de recitales en el Colón.
La perfección y el “momento” de la noche comenzó con el recuerdo de Mercedes Sosa en “Cuchillos” que incluía símil playback con la voz de “la negra” que hizo emocionar a más de uno. Luego fue turno para la deslumbrante “Eiti Leda” que tal vez se convierta en una de las mejores versiones jamás hechas en vivo desde que García es solista. De principio a fin los acordes y la armonía fue aumentando su potencia, el público se emocionó y empezó a corear de pie casi a los gritos por la euforia que se generó desde el escenario. El violín, el violonchelo y la viola pertenecientes al cuarteto de cuerda dieron su aporte para que el rock sinfónico que estaban creando sea inolvidable. El tema de Seru Giran paso, pero la ovación parecía no tener fin, fue uno de los picos más altos de la noche.
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La obra maestra no finalizó ahí, prosiguió con una emotiva versión de “Vos también estabas verde” seguida de “Fax U” que tuvo la particularidad de García tocando la guitarra, se colgó una Gibson SG y ejecuto varios riffs. Charly parecía un director de orquesta moviendo sus manos e indicando todo lo que se debía hacer.
“Parte de la religión” y “No me verás en el subte” bajó el ambiente y la música clásica volvió a renacer. El multi-intrumentista se ubicó en su piano rojo “Voy a presentar a un amigo: Bernard Fowler” adelantó, este cantante y productor ha participado de 14 discos de los Rolling Stones y trabajo con Alice Cooper y Rod Steward entre otros. Juntos interpretaron una “Happy and Real” del disco Kill Gil, Bernard Fowler evidenció porque trabaja con los más grandes artistas. Tras la descollante actuación, los músicos se despidieron. El cantito de cancha “Ole,ole,ole,ole, Charly, Charly” volvió a resurgir de entre los presentes. Parecía que el final había llegado, ya con todas las luces del teatro encendidas comenzó a sonar el conocidísimo loop de “Inconsciente Colectivo” que fue acompañado con palmas al compás del ritmo. Desafortunadamente este pasó a ser el último tema de la velada y dejó con ganas de más a todos, la ovación final creo un clima ensordecedor. “Esperemos volver pronto, si nos dejan” fueron de las últimas palabras expresadas por uno de los más importantes músicos del rock en castellano, y el telón de terciopelo color rojo definitivamente se cerró. A pesar de esto “El Aguante” no abandono sus respectivas ubicaciones e instantáneamente continuó entonado la letra de “Inconsciente Colectivo”: “Ayer soñé con los hambrientos, los locos, los que fueron, los que están en prisión. Hoy desperté cantando esta canción que ya fue escrita hace tiempo atrás, es necesario cantar de nuevo una vez más”.
No necesitaba un recital como este para que nuevamente este en boca de todos, Carlos Alberto García Moreno dejara un legado enorme e interminable, en los últimos años se convirtió en un músico multigeneracional, claro ejemplo fueron estas funciones en el histórico Teatro Colón donde se pudo observar a varios que todavía no habían nacido y García ya llevaba varios discos en la espalda. Es uno de los más talentosos y es argentino, muchas veces criticado por su forma de vida, pero si no esto no fuera así no sería Charly García.
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