La época de confinamiento generó, entre innumerables sentimientos, una idealización del pasado y en especial del futuro. Un hilo de luz al final del túnel trae esperanzas y en eso se puede aplicar al título del nuevo trabajo discográfico de los 1915. Los Años Futuros completó la exitosa primera trilogía de álbumes en la vida de los bonaerenses y esta vez Guillermo Porro comandó el barco desde la producción.
Una casualidad en la búsqueda del título hizo que el disco tenga un doble impulso a primera vista. Un extracto de la letra de “Los Años Futuros” pasó a ser el nombre de la canción y más tarde redondeó el concepto del álbum. “Es un mensaje de aliento, un “mañana es mejor” que en una situación crítica se resignifica y toma más fuerza”, reflexionó Federico “Penzo” Penzotti (teclado y sintetizadores). Desde la tranquilidad de una habitación aclaró: “Lo pusimos desde el principio, fue una casualidad”. No es difícil imaginar en plena abstinencia de shows en vivo un centenar de puños levantados en el estribillo del track que comienza el camino a Los Años Futuros y pone en sintonía al oyente para los 28 minutos que dura la escucha.
El cuarteto comenzó hace siete años, tiempo en el que la secundaria los cruzó de a uno en la zona norte del Gran Buenos Aires. Un acto escolar le bastó a Penzo para proponerle a Cruz Hunkeler (voz y guitarra) juntarse a tocar algunas ideas propias y covers. Al poco tiempo apareció Jeremias Alegre (batería) y en su casa nacieron los primeros ensayos en formato trío. La llegada de Alejo Freixas (bajo) terminó de darle forma al proyecto que debutó discográficamente con Dual, de 2016. Antes grabaron dos EPs que no vieron la luz oficialmente y los recuerdan con cariño: “Hicimos lo que pudimos con 16 años, no sabíamos nada y nos sirvió para aprender”, recordó el cantante del grupo. Unos segundos después de hacer memoria confirman que el primero era homónimo y el segundo Lado B.
El primer adelanto de LAF fue “Extranjero”, publicado en octubre del año pasado, muestra del tiempo de trabajo que tiene el álbum. “Las canciones que hicimos cerca de la salida de Bandera son las más poperas y tienen más sintetizadores”, explicó Cruz Hunkeler desde su casa acerca del segundo tema del disco. Y agregó: “Tenía una nota de voz en el celular con la melodía sin letra en diciembre de 2018 así que ahí ya había una idea”. De aquella época también se desprende “Omm”, un track con el adn de 1915 que contagia la necesidad de moverse a la par del ritmo. Penzotti aporta: “Nos juntamos a tocar y Cruz inventó una melodía espectacular para el estribillo. La hicimos a principios de 2019”.
“Todos los caminos que se abrieron, se unen en la misma dirección” reza el estribillo popero de “Omm” y aplica al lanzamiento del nuevo trabajo discográfico y su recepción. La cuarentena obligatoria modificó los planes del grupo pero supieron avanzar en ciertos aspectos que destacan como la llegada a radios del calibre de Rock And Pop y Mega. Aunque el fuerte de 1915 sigue esperando: “Sentimos que nuestro marketing es salir a tocar en vivo”, dijo Hunkeler. Por el momento, ambos músicos descartan una presentación de Los Años Futuros a través de streaming pero trabajan en distintas propuestas digitales: un podcast para explicar la grabación y composición de cada canción, subir tutoriales y acordes de las mismas y grabar un videoclip desde sus hogares.
El segundo corte de difusión fue “Llamando”, con un estribillo efectivo que queda rebotando en la cabeza y baja las revoluciones del ritmo que traía el álbum. Guillermo Porro estuvo al frente de la producción en la placa, así como lo hizo en Sexo Con Modelos de Marilina Bertoldi, Arcos de Parteplaneta, Alud de Ignacia y Adaptación de La Ley, entre otros. “Es una persona que tiene un modus operandi muy aceitado para laburar”, mencionó el baterista de 1915. El productor se empapó en las canciones y tuvo la oportunidad de jugar con ellas. Penzo explicó: “Hicimos una preproducción estando seguros de esas formas y él propuso algo en casi todos los temas. Se involucró mucho en el proyecto”.
Una muestra clara de la propuesta del cuarteto se ve en “No Les Creo”. La guitarra se hace dueña del track que es de lo más rockero que trae Los Años Futuros. Una voz que no duda en confrontar con rabia que aumenta hasta llegar al estribillo. Allí los coros aplacan la atmósfera con una frase que pega directo a la actualidad de los oyentes: “Estamos encerrados, abre la cicatriz”. Federico Penzotti dijo: “Mucha gente pensó que la canción nació en la cuarentena pero fue una super casualidad”. Mientras que Cruz aclaró: “Si fue una decisión sacarla como adelanto”. Cuando aparece “Éxtasis” el disco toma un color más optimista con la presencia de los sintetizadores en la cara más popera del grupo.
Lo sonoro tiene su gran cuota de impacto pero una de las aristas que también se destaca en 1915 es el mensaje que sale desde sus letras, muchas con críticas sociopolíticas. El cantante, como principal compositor, le saca el peso a sus líricas: “Tenemos la misma responsabilidad que cualquier otra persona, hacerse cargo de los males de la sociedad y cambiar introspectivamente”. Pero aclara rápido: “Nosotros no somos militantes, somos músicos y venimos a hacer música”. Cruz Hunkeler es nieto de María Fernanda Noguer, desaparecida en la última dictadura militar. De allí se desprende el compromiso que se refleja en su música aunque no quieren quedar exclusivamente en ese lugar: “No queremos ser encasillados en la banda que tiene que decir esas cosas. Hacemos esto y vamos a seguir siendo libres dentro de lo que podamos creativamente”.
Los pasajes instrumentales que habitan en “Balsa” son un lugar apto para desarrollar y jugar en el vivo, cuando la presentación se consuma en un recinto. En la anteúltima canción parece el único músico invitado de la placa: Juampi Di Leone en la flauta traversa que también aporta su grano de arena en “Omm”. El cantante del grupo contó: “Fue idea de Guille Porro tener un leitmotiv desde la instrumentación, un elemento que se repita en varios temas para darle una unidad”. El álbum cierra con una pieza que se divide a la mitad entre intimidad y oscuridad como “Paranoico”.
La quietud no es opción para el cuarteto formado en Buenos Aires y lo dejan claro en las ocho canciones de Los Años Futuros. Por lo visto tampoco lo es para sus seguidores: “El público que ya nos seguía demostró sorpresa y gratitud. Nos agradecieron este nuevo camino porque este disco es distinto al anterior”, explicó Penzo. Por el lado de Cruz, opinó: “Creo es que es verdad ese dicho que al público hay que darle el 70% de lo que conoce y el 30% de algo que no”. Ambos coinciden y sintetizan la búsqueda: “No vamos a llegar a la fórmula 1915. Pese a que haya cierto sonido que se mantenga, siempre vamos a seguir cambiando”.
Comentarios