En la final de “Red Bull Batalla de los Gallos” que se disputó el miércoles en Niceto, DTOKE levantó los laureles, los metió en el tuco y con la boca descorchó el champagne de la victoria, dejando claro quién será el representante de freestyle argentino para la final iberoamericana, a disputarse en el país en el mes de octubre.
La noche no estaba para comerse los mocos. Dieciséis participantes elegidos de entre más de 200 videos, ahora enfrentados en ocho rondas, uno contra uno, con un minuto de cada lado para hacer valer su talento, filtrándose hasta llegar a una gran final: PAPO MC por un lado, tras haber vencido al favorito, el rosarino KÓDIGO, contra DTOKE, el combo perfecto de “talento argentino, sacrificio y humildad”, la sorpresa más feliz de la noche.
“Siempre honren al old school”, arrancaba el árbitro y conductor del evento, El Misionero, que también pidió “respeto” y dedicó unas palabras seguidas de aplausos a “todos los que dicen que el hip hop no es familia, para los que dicen que esto no es unión”, y con una moneda de 25 centavos que paró de pecho, arrojada desde la general, fue el encargado de marcar quién comenzaba cada ronda de 60 segundos.
Mientras una guitarra criolla se dormía alta siesta sobre cuadrados de fardo que decoraban la escena, la adrenalina se contagiaba como pie de atleta en un vestuario. El legendario Jazzy Mel fue el primero que pisó las tablas de un Niceto lleno hasta la manija, dejándonos a punto caramelo para las casi 3 horas y media de feroz competencia, en la que tener unos kilos de más, un granito o una camisa cambalachera puede traerte serios problemas.
Shows de Decano Flow y CNO (que de paso presentó su primer disco), y un jurado de cracks compuesto por Emanuel Gabotto, payador made in Argentina, junto a los MCs Urbanse, C-Bos (ganador de la edición 2007), Tata (coronado el año pasado) y Rasec, que se llevó la ovación inicial de la hinchada.
DTOKE hizo que valiera la pena quedarse hasta tarde y en una definición que ameritó réplica y contó con las pistas de la ganadora de la competencia de beatmakers, la comodorense Soleix, para freestylear encima, el rubio sacó al conejo de la galera, dio vuelta al mago y dejó pintado a PAPO MC. “Quise probarme a mí mismo que todavía podía”, confesaba al final, entre emocionado y sorprendido: “No sé si voy a ganar en octubre, pero voy a dejar todo”, aseguró, justo antes de quedarse sin palabras. Porque a veces pasa y la emoción ahora sí se cobra la víctima que menos tardó en ceder.
Una batalla contra la boca seca, contra las lenguas irreverentes, donde las rimas inteligentes, la destreza, la velocidad y el oxígeno cotizaron en bolsa. Una jornada en la que la premisa fue buscar la poesía y el desafío fue hacerle honor a la palabra, y DTOKE demostró que no solo la encontró, sino que se la guarda y no la comparte con nadie. En octubre la final, las cartas sobre la mesa… este truco se queda en casa.
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