El próximo 30 de diciembre se cumplirán 14 años de la tragedia de República Cromañón, que dejó tras de sí un saldo de 194 víctimas fatales, miles de sobrevivientes, muchos suicidios en los años posteriores y un circo judicial y mediático que recién el año pasado parece haber cesado. Pero el tiempo pasado no implica que ya haya dejado de doler. Y hay situaciones que hacen recrudecer esa herida o cicatriz, como el primer día.
República Cromañón ya no existe más, por supuesto. Pero ahora, se está reformando. El lugar, ubicado en Bartolomé Mitre, está en obras. Hay volquetes en la puerta y fue pintado. ¿Qué pasó con todas las pertenencias y recuerdos de los fallecidos y sobrevivientes que aún estaban adentro? Desaparecieron. Quizás fueron a terminar a uno de esos volquetes, quizás en alguna bolsa, quizás estén apilados en algún depósito del GCBA (en el mejor de los casos).
La página “Movimiento Cromañón” adjunta fotos del ex boliche pintado y denuncia: “Se pintaron las paredes tapando las huellas de nuestras manos, que eran el relato vivo del horror que tuvimos que atravesar esa noche. Este es un golpe muy fuerte para nosotrxs.
Para la sociedad y las generaciones venideras representa la imposibilidad de acceder al relato material de lo que sucedió el 30 de diciembre de 2004, hace casi 15 años. Les niega el derecho a la memoria y a comprender por qué es necesario que no se repita“.
El grupo también reclama “derecho a decidir cómo contarlo, a recuperar nuestras pertenencias y elegir en qué tiempo hacerlo. La trascendencia histórica de lo sucedido en la Ciudad de Buenos Aires, debe ser respetada y visibilizada”.
Hay un sector de sobrevivientes y familiares que está exigiendo la expropiación del lugar, que le fue reestaurado a Rafael Levy, a través de la Off Shore en la que él está. El juez Marcelo Alberó, a cargo del Tribunal Oral Penal (TOC) 24, decidió dar el control del predio a la empresa Zarelux S.A. que, según ellos, responde a José Levy, dueño original del lugar que fue condenado a cuatro años y medio por la tragedia. Esta decisión la tomó, de manera unilateral, el TOC 24, el primer Tribunal en juzgar la tragedia, a fines de 2018. La intención de familiares y amigos de las víctimas y sobrevivientes es montar en el lugar una especie de “Espacio de la Memoria” en la que mantener viva la llama de los que ya no están debido a lo ocurrido el pasado 30 de diciembre de 2004.
Este grupo de familiares, amigos y víctimas de Cromañón presentó un proyecto de ley para exigir la expropiación del lugar, en favor de generar el mencionado espacio. El proyecto contó con el apoyo de los legisladores y legisladoras del Frente de Izquierda y los Tabajadores (FIT), Myriam Bregman, Gabriel Solano y Laura Marrone. También estuvo presente el secretario general del MST Alejandro Bodart. También apoyaron y se involucraron con el proyecto, Victoria Montenegro, del “Frente para la Victoria” e Inés Gorbea y Marcelo Gouman, de “Evolución”, el partido que lidera Martín Loustau.
El mismo, según indica en su página, ingresó en la Legislatura porteña a través de una iniciativa popular (Ley N°40) en Mesa de Entradas. Hasta el momento, y pese a los reiterados pedidos, el Jefe de Gobierno Porteño, Horacio Rodríguez Larreta hizo oídos sordos a las peticiones de Familiares y amigos de las víctimas y sobrevivientes. Mientras, Cromañón ya fue vaciado, las huellas de sus paredes borradas y la memoria pisoteada, una vez más.
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