Le hicieron un tema a las gatitas de Porcel en el que se puede sentir honrada cualquier teta del mundo; le cantan a la legalización del faso antes que muchos otros siquiera aprendieran a armar uno y están convencidos que nuestro Charly García es el pionero del funk Latinoamericano. Los chilenos de Los Tetas se presentaron el viernes pasado en Niceto, a sala llena y, nobleza obliga, imposible no hacerlos sentir como en casa.
Pero ojo que Los Tetas que coparon Palermo no son vírgenes de suelo argento. En el año 1997, en el marco de la presentación del disco “La Medicina”, habían pasado por el Club Dr Jeckill junto a Illya Kuriaky and the Valderramas. Esta vez, con Tony 70 como plato de entrada, los muchachos volvieron a apantallar el fuego que comenzaron aquella noche hace 16 años. Y, a diferencia de entonces, esta vez seguirán por Córdoba y Rosario.
Ven a bailar con Los Tetas guacho fue la primera invitación de la fiesta, y ¿quién puede decirle que no a una buena delantera? Sumergidos en un mundo de luces rojas y amarillas, los cuerpos se mueven solos, como secuestrados por una masiva gelatina de la que es imposible desprenderse y salir. El que esta noche no vino a mover el culo, le pifió de reci.
“Bienvenidos al Planeta del Funk”, saludaba Tea Time, la voz cantante, quien debajo de una campera de nene bien norteamericano, portaba una casaca de Perú que cada tanto golpeaba estilo orangután. Ya podía escucharse el arranque de “Planeta”, el segundo tema de la noche, al que seguiría “Colón” y luego “Hormigas planas”, dedicado a Charly García y su “Rap de las Hormigas”, parte del primer disco de los chilenos, Mamá Funk (1995): “En la tierra de la autoridad del Rock de Latinoamérica, de la calidad, estamos muy agradecidos por este recibimiento”.
Somos lo que somos, cantan, en una jornada para agitar el bote y dislocar mandíbulas, en la que pareciera que la separación que los mantuvo lejos de los escenarios entre 2002 y 2011, justo después de la edición de “Tómala”, producido por Toly Hernández de Control Machete, no hubiera dejado más que ansias de volver a tocar juntos. Así, entendiéndose con la mirada, igual o mejor que antes.
Performances impecables, un bajista, David “Rulo” Eidelstain, que cuando canta desata “la tormenta del entendimiento más profundo”; un guitarrista, Cristian “C-Funk” Moraga, que entre trucos y virtuosismo da ganas de pedir minuto de silencio para poder prestarle atención a los detalles. Una banda que explota, sin más, en un montón de colores, dando lugar hasta a un cover de los Daft Punk, “Get Lucky”, fusionado con “Cha Cha Cha”.
“Primavera”, “Sistemas”, “La Eternidad”, “Papi dónde está el funk”, hasta llegar a “Porcel”, donde tus tetas hacen sentirme bien. Todos los hits cubiertos con creces: “La Medicina”, de su segundo disco de igual nombre, seguido por “Corazón de sandía” y alguna que otra improvisación para ponerle el sello de calidad a una banda que sabe exactamente lo que hace con cada milímetro de su cuerpo.
Los Tetas pasaron por Niceto el viernes, el sábado hicieron delirar con su funk a Córdoba y aún les resta plantar bandera en Rosario, esta noche, en MAD Party Club de Tucumán y San Martín. Sin duda alguna, vengan los culos que vengan, un planeta con Los Tetas, es un mejor lugar para vivir.
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