“A nivel cultural estamos pasando un momento horrible. Nos afecta a todos”, expresó Ale Kurz en el Auditorio Oeste sobre la situación de La Renga y su intento frustrado por volver a tocar en Capital Federal. Fue la previa a tocar “La Patada”, una de las canciones más contestatarias de la historia de El Bordo. Uno de esos temas que, en ciertos momentos sociales y culturales, cobran más fuerza a pesar del paso del tiempo. El duro momento que atraviesa el trío bonaerense cruzó de lleno a la presentación. En la previa, sonaron algunas canciones y el público estalló sus voces. Durante el show, se escuchó el clásico cantico “Vamos La Renga, con huevo vaya al frente…”, luego del mensaje del cantante. “¡Aguante La Renga!”, cerró Kurz.
Los ejes que manejaron el show en Auditorio Oeste fueron viejas y nuevas costumbres. Además del ya mencionado apoyo a la banda, se apreció como El Refugio, reciente trabajo discográfico, se metió de lleno en los seguidores y en los integrantes del grupo. Hubo remeras que hablaron: Migue Soifer, baterista, salió a escena con el estampado “Viví como vos querés ser recordado”, extracto de “Todo y más”, sobre su remera. Por el lado de Ale Kurz, la iniciales “TUFYV” se leían en referencia a la introducción de “Metafísica suburbana”: “Tirate un fill y vamos”. El otro ejemplo fue el arranque del recital con “Destino” seguido de “La libertad”, ambas muy celebradas por los bordolinos.
El único estreno de la noche fue “Hablame”, que también incluyó debut de una viola. El cover de Nirvana que incluyeron en el último álbum sonó en vivo por primera vez y tuvo como introducción la voz de Kurt Cobain en un extracto de “Very ape”, allí se acoplaron los músicos de El Bordo para arrancar el track que tiene su lirica adaptada por Ale Kurz. El recinto de Haedo fue rodeado de mística grunge y hasta hubo jóvenes haciendo mosh, emulando por unos minutos aquellos 90s de los barrios de Washington, Estados Unidos. El cantante y guitarrista estrenó una Fender Jazzmaster, uno de los modelos que usaba el vocalista de Nirvana (con distintos colores) que fue adquirida por El Bordo durante la grabación de la nueva placa. Kurz la nombró como “Cobain”, en su cuenta de Instagram. Otras de las que sonaron de El Refugio fueron “Mi alma ve” y “El traje”.
Desde la previa del show abundaba la alegría entre los seguidores. La razón surgía en la puerta del Auditorio Oeste, cuando entregaban el flyer de la presentación oficial de El Refugio. La fecha marcaba al domingo 17 de septiembre y, lo más importante, el Luna Park como sitio de la cita. “Hay que saltar, hay que saltar, nos vamos todos al Luna Park”, se escuchó entre “Noche extraña” y “Tesoro”. La introducción de “Metafísica suburbana” como está en el disco ya es clásica pero esta vez tuvo el anuncio oficial desde los integrantes de la banda: “…Tirate un fill y nos vamos todos a presentar El Refugio al Luna Park”, se escuchó y bastó para ponerse a la gente en sus bolsillos.
Ante la falta de una pantalla, la apuesta para el show en Haedo fueron las luces que plantaron en el escenario. Cuatro de ellas colgando del techo, de lo más llamativo de la puesta en escena que le aportó un guiño a la visual del grupo. En dos horas de presentación, se repartieron las 27 canciones de la lista. Uno de los momentos más sorpresivos fue el extracto de “Guitarra y canción” antes de realizar “¿A dónde vas?”. El segmento del cierre fue con “Deporte nacional”, “En la vereda” y “El regreso”, ya fijas en el final. Luego de la gira por el interior, El Bordo volverá a subirse a un escenario de Buenos Aires en el histórico Luna Park, el segundo de su carrera.
Foto de Cristian Sangermano.
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