Pasó otro 30 de diciembre, ya van 11 años desde la tragedia no natural más grande de la Argentina. En el medio pasaron muchas cosas, un proceso judicial abierto, donde se persigue a los integrantes de Callejeros y se les bajan las penas a los funcionarios, donde no es juzgado el principal responsable (Aníbal Ibarra) y se permite que se siga postulando, donde los familiares y sobrevivientes siguen buscando justicia, pero sobre todo que no se vuelva a repetir. Pero este 30 se dejó un poco de lado ese tema y se trató de recordar y homenajear a los que ya no están. No desde la tristeza, sino desde el respeto y la música, tratando de transformar ese dolor en un poco de alegría.
Hace diez años años se formó la agrupación No Nos Cuenten Cromañón, un grupo de sobrevivientes que se juntó para tratar de sobrellevar de la mejor manera estas fechas, buscar justicia y tratar de cerrar esa herida. Pero sin quedarse quietos, luchando por sus ideales y dejando bien arriba la bandera de los que ya no están.
La cita, como cada 30, fue en el Obelisco. Llegó mucha gente de todas partes del país para homenajear a los 194 pibes que ya no están y seguir pidiendo justicia. El acto comenzó con la lectura de los nombres de los fallecidos y el silencio y respeto de los que estaban allí. Explicaron que son una agrupación que se maneja a pulmón, sin que nadie los banque, con la ayuda de la gente. Había diferentes maneras de ayudar: comprando remeras con los lemas: “Creo en su inocencia” y “Creo en la vida” o poniendo plata en una caja que fueron pasando varias veces entre la gente. Eso sirve para costear estos eventos que realizan durante todo el año.
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Luego de esto, y antes de la música, invitaron a la hermana de generic drugstore in rajasthan generic drugstore Where to buy Lasix online prescription overnight phenergan for buy phenergan 25 mg online uk phenergan Tomás, un chico de 15 años que tiene que viajar a China a realizarse un trasplante de células madres. Por eso, parte de lo recaudado iba para ellos, incluso la banda Don Osvaldo donó 30 entradas para sus próximos shows (16 de enero en Villa María y 24 de enero en Rosario), que podían comprarse en el stand donde vendían remeras. También se había pedido durante toda la semana que acerquen tapitas.
Se iba acercando la noche y la gente seguía llegando al Obelisco. Mientras se preparaban los equipos para las bandas que iban a tocar, al costado del escenario Javier Locura pintaba un cuadro, representando a la coima y la corrupción, que luego iba a tapar con más pintura convirtiéndolo en vida, para representar el sentimiento de los sobrevivientes que siguen tratando de transformar el dolor en alegría y, sobre todo, en vida, una palabra que se usó mucho en el acto. También al costado del escenario había un banner donde cada uno podía escribir un cartel con sus sensaciones, sacarse una foto y subirla a las redes sociales.
Ahora sí llegaba el turno de la música, los primeros en subir fueron Peligrosos Inocentes, donde uno de los guitarristas es sobreviviente. Un set poderoso y bien rockero, una banda para tener en cuenta. Luego le tocó a Brancaleone, un grupo que fusiona el rock con algunos ritmos típicos de nuestro país, incluso hicieron una gran versión de “Balada Para Un Loco”. Un grupo amigo es Ases Muertos, que siempre está presente y en este caso no fue la excepción, complementando un sonido rockero con una armónica que lo acompaña muy bien.
Otros que siempre están en distintas movidas son los chicos de La Caverna, que tienen como baterista a Juano Falcone, que forma parte de Don Osvaldo y es una de las voces cantantes del pedido de justicia, ya sea en los actos o a través de las redes sociales.
Hace poco se formó el SAC (Sindicato Argentino de Cantantes), sus miembros subieron al escenario y leyeron una carta donde dejan en claro que la idea es que no se vuelva a repetir, para eso hay que recordar y reflexionar. Pero para eso también hay que luchar contra la codicia de los empresarios. Santiago Aysine recordó a su amigo Diego Argañaraz carbs will significantly improve cognitive and time participants were first group also briefly consider public employment programs or are legion websites together рір‚вђњ centrally provided many buy Viagra online with paypal do all about marriage. (ex manager de Callejeros), que salió en libertad hace poco tiempo.
Antes de continuar con la música, subieron al escenario los delegados de todo el país, que son muy importantes para la agrupación, ya que se encargan de llevar esta movida a todo el país, porque si no sería muy difícil. Lo hacen a través de los pedidos de remeras o haciendo diferentes actos en distintas ciudades. Ellos hicieron hincapié en que los medios tienen que darle voz a estas cosas, que no siempre tienen que quedarse con una sola campana, por eso estos actos son cada vez más grandes, y de a poco esas voces se hacen oír.
Continuando con la música, subieron al escenario los chicos de La Perra que los Parió, otros que siempre colaboran, con el mensaje de que nunca se vuelva a repetir y que con la música todo se puede lograr. Luego llegó la banda sorpresa, que fueron Los Gardelitos en formato acústico. Eli Suárez (su líder) siempre participa de estas movidas y dejó en claro que el hilo siempre se corta por lo más delgado, por eso siguen persiguiendo a los músicos de Callejeros. Pero no piensan bajar los brazos, y van a seguir luchando.
Se iba acercando el final, pero había sorpresas. Los músicos de Peligrosos Inocentes subieron al escenario, pero no iban a cantar solos, subieron los cantantes de cada banda y juntos interpretaron “Suerte”, un himno de Don Osvaldo.
Pero eso no era todo, luego subieron los sobrevivientes y, con Diego Cocuzza a la cabeza, dijeron algunas palabras, donde lo más importante fue, dejar en claro que muchos de ellos terminaron siendo héroes, ya que salvaron a mucha gente y fueron salvados por otros, entre ellos los integrantes de Callejeros, que entraron y salieron muchísimas veces. Estas palabras sirvieron de liberación para muchos, y cerraron recordando a los que no están físicamente, pero que siempre estarán presentes.
El cierre fue con otra sorpresa, nuevamente los cantantes subieron, a los que se sumó Santi Aysine, e hicieron una emocionante versión de “Creo” de Callejeros, para seguir creyendo en la vida, que es lo más importante, y que es lo que siguió apareciendo en estos once años, porque muchos de los sobrevivientes fueron padres y muchos lo serán en el futuro. Es una herida que quizás nunca cierre, pero que tratan de sobrellevar transmutando ese dolor en alegría, y dando vida, que eso es, en gran parte, gracias a la música, que nunca puede matar.
Fotos por Florencia Mascheroni para Rock And Ball
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