El Grupo F del Mundial tiene como mayor foco de atracción que los cuatro equipos están en condiciones de superar la primera fase. Sin embargo, Alemania posee un poderío mucho mayor que Suecia, México y Corea del Sur, por lo que parece difícil que alguno pueda birlarle la primera colocación a los teutones. La paridad que existe entre este trío provoca incertidumbre y no es sencillo augurar el resultado.
El Die Mannschaft fue la única Selección en tener puntaje ideal en las Eliminatorias de la UEFA. Con Joachim Löw hace 12 años como entrenador, en este proceso realizaron el recambio generacional sin perder calidad individual ni en conjunto. Con distintos nombres, pero la misma filosofía, el poderío sigue intacto y está en condiciones de defender la corona.
Tras la histórica definición del Repechaje donde dejó al margen a Italia (en el grupo fue escolta de Francia), Suecia dejó en claro que es un equipo molesto, al que no le sobra nada pero que tiene con qué herir al rival. Con pragmatismo, solidaridad para defender y delanteros contragolpeadores, los dirigidos por Janne Andersson post Eurocopa pueden presentar batalla.
El Tri continúa con la misma tónica de las últimas décadas: buenos nombres, correctos conjuntos que fallan en las instancias claves. No están armados para pelear hasta las últimas rondas, pero el objetivo –ambicioso, por cierto- es filtrarse entre los ocho mejores tras quedarse en Octavos de Final en los últimos seis Mundiales. Los dirigidos por Juan Carlos Osorio, mirado de reojo por momentos desde su arribo en 2015, dominaron las Eliminatorias de la CONCACAF: perdieron solo un juego de los 16 que disputaron.
Por su parte, Corea del Sur es el más endeble de los cuatro. Con buenos futbolistas, pero un proceso irregular, los Tigres de Asia no tuvieron un paso agradable por la Clasificatoria y su entrenador, Shin Tae-Yong recién está en su segundo año en el ciclo. Acceder a la siguiente ronda ya cumple con las expectativas.
Tras la consagración en Brasil 2014, históricos como Schweinsteiger, Lahm y Klose dejaron su lugar para que aparezcan los jóvenes. En este cambio sobresalieron Leon Goretzka, Joshua Kimmich y Timo Werner, nuevas figuras de Alemania. En el mediocampo le sobran futbolistas para generar juego: a Kroos, Gündogan y Khedira se les sumó Julian Draxler. Müller, Özil y Leroy Sané completan una flota de ataque temible.
Con la confirmación de que Zlatan Ibrahimovic no será tenido en cuenta para la Copa del Mundo, Suecia reafirma la estructura definida que tiene con Ola Toivonen y Marcus Berg como los tanques en ofensiva asistidos por el hábil Emil Forsberg. En defensa destaca la dupla Lindelöf – Granqvist.
México depende mucho de que su mediocampo esté encendido. Con delanteros talentosos, rápidos y con gol como Corona, Lozano y, obviamente, Javier Hernández, es vital que la zona media de los aztecas esté activa para lanzar y habilitar. Pero además para ayudar a una línea de fondo poco confiable, desatenta, aunque combina técnica e intentos –a veces en exceso- de salir por bajo. Los experimentados Guillermo Ochoa y Andrés Guardado encabezan a una camada evolucionada y que apunta a romper el maleficio de los Octavos de Final.
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