Cuando hablamos de “pegar el salto” en el fútbol, nos referimos comúnmente a un jugador que pasa de un equipo a otro de mayor envergadura. Sin dudas que podemos usar esa referencia a lo que le pasó al suizo Gianni Infantino, que se convirtió en presidente de la FIFA en 2016 gracias a la votación de 115 (de 207 posibles) representantes de las distintas asociaciones de fútbol. Infantino, que era hasta el momento de la votación el Secretario General de la UEFA, obtuvo 88 votos en la segunda vuelta. A dos años de la asunción, llega a su primer Mundial como primer mandatario.
Hijo de inmigrantes italianos, Infantino nació en Brig, un pueblo ubicado a sólo 10 kilómetros de Visp, ciudad natal de Joseph Blatter, su antecesor. Su llegada a UEFA fue 
como integrante del departamento ligado a asuntos legales y comerciales. Cuatro años después, en 2004, llegó a Director de Asuntos Jurídicos y Licencias de las Divisiones de Clubes, y en 2009 fue elegido como Secretario General. Fue, en consecuencia, la mano derecha de Michel Platini los últimos seis años y la candidatura le llegó prácticamente por sorpresa luego de que el francés no pudiera presentarse por sospechas de corrupción.
El camino a la presidencia ya estuvo marcado desde el respaldo de UEFA. Sus propuestas como candidato fueron muy similares a las que había propuesto Platini en su momento cuando quiso postularse en 2015. A rasgos generales, lo que más resalta de la candidatura del suizo es que no quería mejorar los protocolos anticorrupción ni ayudar en la transparencia de investigaciones dedicadas a este tópico. Sobre finales de 2017, recibió una denuncia de corrupción del tiempo en que estaba en UEFA (2012) y lo relacionaba con el fútbol de Turquía. Infantino ayudó a disminuir las sanciones por los arreglos de partidos que incluían a Fenerbahçe, Besiktas y Galatasaray, según informó Le Monde.
Otra de las propuestas de campaña que cumplió Gianni Infantino fue la de cambiar el cupo del Mundial. Desde 2026, la Copa del Mundo pasará a ser de ¡40 países! en vez de mantener el formato actual de 32. El mayor beneficiado con el cambió pasó a ser el continente africano, que tendrá 9 plazas, en vez de 5. La Conmebol, encabezada por Alejandro Domínguez, apoyó al suizo por el aumento de 4 cupos directos y uno por repechaje a 6 clasificados directos, que además responde a un viejo pedido de la confederación. Se destacó también de su gestión la visita a países sudamericanos
La implementación de la tecnología en el fútbol es otro ítem para destacar de su presidencia. El Mundial de Rusia 2018 será el primero en tener el VAR, una alternativa para los árbitros que en busca de justicia, a veces crea aún más controversia. “Lo que 
queremos es ayudar, dar la posibilidad al árbitro de tener una ayuda más cuando tiene que tomar decisiones importantes, y en un mundial se toman decisiones muy importantes“, explicó en una conferencia de prensa.
La poderosa amistad-alianza con Diego Maradona tuvo sus idas y vueltas, como toda relación del Astro, pero ambos saben aprovecharla. El ex 10 de la Selección argentina pasó a ser un embajador de FIFA, organización con la que tuvo más diferencias que momentos amistosos. Infantino siempre se expresó con cariño y admiración sobre Diego, quien participó de un partido de estrellas en la ciudad natal del dirigente en 2017.
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