La televisación del fútbol en manos públicas está incompleta, le falta algo, no termina de encajar. El constante cambio de horarios de la fecha 17 es la imagen de lo muchísimo que queda por corregir y del poco tacto que hay para tomar decisiones jugadas. Se interponen las Eliminatorias con el torneo local, para empezar no más.
En los entretiempos del Fútbol Para Todos muestran cómo crece el trabajo en Argentina, cuánta más gente tiene un sueldo para sobrevivir. Bárbaro, altamente positivo. Pero es ese mismo emprendimiento el que insiste con que dos, cuatro y hasta seis equipos por fecha jueguen los lunes. Ahora, ¿nadie trabaja los lunes? ¿Qué buscan? ¿Que la gente falte al trabajo que tanto cuesta conseguir? ¿O que se quede sin ver el fútbol que tan caro le sale al Estado?
En diciembre de 2008, San Lorenzo, Boca y Tigre se cruzaron en un triangular para definir el campeón del Apertura. El Ciclón venció al Matador en el primer encuentro, y en vez de descansar (para asegurar que el campeón se defina en la última fecha y no antes), tuvo que jugar enseguida contra Boca. Aquella vez el fútbol todavía era codificado, y esa era una de las tantas falencias que mostraba. Hoy, con los partidos gratis, la mala organización sigue en el mismo asiento.
Para el duelo Estudiantes-Lanús era algo esperable. El Pincha será local por tercer lunes consecutivo, mientras que el Grana jugará ese mismo día por sexta vez en lo que va del campeonato. Y el caso de la fecha: San Lorenzo vs Argentinos. Iban a jugar el domingo a la tarde, después el lunes a las 16, pero como a las 20.15 no convencía finalmente va 21.10. Para quien no conoce el Nuevo Gasómetro, no es recomendable ir por primera vez un día de semana, de noche y con muchos menos policías trabajando de lo que cuesta el operativo policial.
Desde el Estado están promoviendo la AFA Plus, entre otras cosas, para luchar contra la violencia en el fútbol. Si la intención es buena, no hay porqué oponerse, ya que es ese mismo peligro de violencia el que hace dudar sobre qué partido puede competir con Lanata, cuál es de alto riesgo y quiénes pueden bancarse el bodrio de jugar un lunes. Lo contradictorio es que el slogan del flamante carnet es “en favor de la familia”, familia que seguramente no la tendrá fácil para ir a la cancha un día de semana. Mientras, Independiente, River, Argentinos y San Lorenzo, que tenía programado un duelo el miércoles por Copa Argentina, se entrenan con la radio encendida.
Ya hablaron muchos. El más escuchado fue Tinelli, que bramó por un “fútbol para desocupados”, no muy feliz de que su equipo otra vez haga de local un día laboral por el peligro de otros partidos. La violencia no es algo nuevo, está desde hace mucho y seguramente lo siga estando. No se sabe si Independiente descenderá esta fecha, en la otra o nunca, pero problema es tal que la programación de los partidos ha sido el hazmerreír nacional. El que pueda, que mire fútbol.
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