En Avellaneda se respira aire de esperanza. La vuelta de un ídolo del club como lo es Alfio Basile despierta mucha ilusión en todos los hinchas de Racing. El carisma y la capacidad técnica del Coco son virtudes que están reforzadas por un pasado que lo avala, ya que el ex técnico de la Selección Argentina nunca defraudó a la Academia.
Tras firmar el acuerdo con Gastón Cogorno, nuevo presidente de Racing, el Coco comenzó a trabajar para su cuarta etapa como técnico en el club. Desde aquel primer periodo en 1977 hasta hoy, Basile fue entrenador de la Academia en 207 partidos, de los cuales ganó 80, empató 75 y tuvo 52 derrotas, es decir alcanzó un total de 254 puntos.
A mediados de los 70, Racing ya mostraba los primeros problemas económicos que marcarían una parte de su vida y eso se volcaba en sus resultados deportivos. Tal es así que Alfio Basile asumió al cargo luego de que la Academia se haya salvado del descenso por un punto en 1976 y tras la renuncia de Pedro Dellacha. Sólo estuvo en el banco durante el Metropolitano del ´77, en ese torneo el conjunto del Coco terminó en mitad de tabla muy lejos de los puestos de arriba, pero con la tranquilidad de haber estabilizado el equipo que tan sólo 6 meses antes casi se va a la Segunda División. Claro está, fiel a su estilo, los once titulares salían de memoria: Cejas; Killer, Glaria, Espinoza, Cardenas; Diaz, Marques, Squeo, Trama; Julio Ricardo Villa y Roberto Diaz.
Casi 10 años más tarde, en 1986, Basile retomó el cargo de entrenador en la Academia. Esta etapa fue, sin dudas, el paso más exitoso del técnico bahiense por el club. En aquel momento, la Supercopa del ´88 cortaba con una racha de más de 20 años sin títulos –locales o internacionales- Como ya es costumbre en los equipos del Coco, el plantel tenía la premisa principal de jugar por abajo sin revolearla. En ese torneo torneo Racing contó con la magia de Rúben Paz, la experiencia de Ubaldo Fillol, la jerarquía del joven Néstor Fabbri y con los goles de Walter Fernández.
El camino al partido decisivo incluyó victorias sobre River y a Santos, finalmente los de Avellaneda alcanzaron la Final en dónde tuvieron que enfrentar al poderosísimo Cruzeiro. El primer partido se jugó en el Cilindro y el local se lo llevó por 2-1, mientras que el encuentro de vuelta se jugó en el Estadio Mineirao. Allí, el cotejo terminó 1-1 gracias a un gol de Omar Catalán. Con estos dos resultados, el título viajó para Avellaneda y Racing se consagraba campeón de la Supercopa.
A su vez, en la década del ´90 el Coco volvió al banco de su primer amor. En el ´96 tomó el equipo después del alejamiento de Brindisi. En su primer torneo de su re-re-vuelta -Torneo Clausura-terminó séptimo con 29 puntos, mientras que en el Apertura llegó en el cuarto lugar con 32. Por otro lado, un año después alcanzó las semifinales de la Copa Libertadores, no obstante perdió en esa instancia ante el Sporting Cristal.
Ahora, 15 años después del último paso por la dirección técnica de Racing, el Coco intentará darle a los hinchas las mismas alegrías que les otorgó en el pasado.
Comentarios