El morbo de James Harden jugando contra sus ex compañeros se quedó en eso, en el morbo. Al menos en el primer partido, donde Oklahoma City aplastó a Houston Rockets por 120-91. “La Barba” estuvo muy errático (6-19) y Jeremy Lin no pesó en el juego, con sólo 4 puntos anotados. En el segundo choque todo fue distinto a partir del último cuarto, el primer segmento de emoción verdadera en la serie. Un triple de Carlos Delfino, el fin de una tremenda racha de 21-2 en . Pero de ahí en más Kevin Durant se puso el traje de salvador; con un par de anotaciones clave (triple en la cara del Lancha incluido) y dos asistencias geniales a Serge Ibaka y Thabo Sefolosha, el Thunder cerró el partido para llevárselo 105-102.
La serie se mudará a Houston, donde Oklahoma no debería tener problema en dominar los encuentros y poder pasar a la siguiente fase, aunque deberán prestar atención a Harden que viene de anotar 36 puntos en el último juego.
Un equipo contra un conjunto de individualidades. Un equipo que se clasificó varios partidos antes y otro que esperó resultados ajenos hasta la última jornada. San Antonio Spurs está cumpliendo lo pronosticado y domina cómodamente a Los Angeles Lakers, quienes ya bastantes problemas suman entre la inconexión de sus figuras y la tremenda lesión de Kobe Bryant. La buena noticia para los 4 veces campeones de la liga, es que Emanuel Ginóbili está ingresando en la etapa que más le gusta, y acorde a esa situación elevó sus números. Con 15,5 puntos de promedio desde la banca en ambos partidos, se destaca su mayor efectividad en triples (6-9 en la serie, 75%), que contrasta con el de la temporada regular (35%). La consistencia en ese tiro es clave para Manu, ya que los defensores lo enciman más y puede tener más facilidades para entrar a la llave.
A excepción de un gran rendimiento individual de Pau Gasol o Dwight Howard en Los Angeles, los Spurs estarán en la siguiente fase. Jerry Buss hijo ya ha confirmado a Mike D´Antoni para la próxima temporada. Phil Jackson sigue libre porque rechazó la propuesta de los Cleveland Cavaliers.
La serie con menos reflectores encima, pero la más atractiva hasta el momento de la conferencia ha sido la de Golden State Warriors y Denver Nuggets, dos equipos jóvenes, atléticos, con una propuesta ofensiva interesante y bonita para el espectador. El primer juego fue parejo durante los 48 minutos, a tal punto que se definió con una canasta en el último segundo del veteranísimo Andre Miller, que tuvo su noche en los playoffs con 28 puntos en igual cantidad de minutos. 97-95 para Denver y David Lee fuera de toda la serie por una inoportuna lesión. Panorama sombrío para Golden State que hicieron pata ancha en Colorado y se llevaron el segundo encuentro por 131-117, el score más alto de los playoffs. Stephen Curry, aquel de los 54 puntos en el Madison Square Garden, tuvo una noche fantástica con 30 puntos y 13 asistencias
Con 2 partidos seguidos en Golden State, la serie está más abierta que nunca. A pesar de la falta de nombres muy taquilleros en ambos equipos, es de lo más interesante para ver por televisión.
Los Angeles Clippers y Memphis Grizzlies se ha transformado en un clásico desde la llegada de Chris Paul a California. El año pasado se enfrentaron en esta misma instancia y una serie durísima a siete encuentros, los Clippers pasaron a la siguiente ronda.
Este año Memphis no tiene entre sus filas a Rudy Gay (traspasado a Toronto Raptors por el tope salarial) y se nota. El primer encuentro Los Angeles lo dominó a su antojo, apoyándose en la mejor banca de la liga, lo que le permite rotar mucho y tener siempre a sus figuras frescas. Paul se destacó con 23 unidades y Eric Bledsoe con 15 para llevarse el juego por 112-91. El segundo fue mucho más parejo, ya que los visitantes se apoyaron en Mike Conley (28 puntos, 9 asistencias) para incluso estar al frente durante gran parte del último cuarto. Pero con el partido empatado en 91, CP3 con sus 1,82 metros se metió en tierra de gigantes para anotar la canasta ganadora y poner 2-0 la serie a favor de los angelinos.
Aún con ese 2-0 no se puede subestimar a los Grizzlies, un equipo que de luchar, sabe y mucho. En la tierra del gran Elvis Presley, los osos buscarán empardar las acciones basándose en el juego interno de Marc Gasol (jugador defensivo de la temporada) y Zach Randolph, desaparecido de la serie hasta el momento.
Por @NahueVillar
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