En todas las elecciones, el cierre de listas es un día D. Se ponen en juego las relaciones de poder, se tejen y se contratejen acuerdos a último momento y se define el escenario que puede favorecer a uno o a otro sector, tanto hacia adentro de cada partido como hacia afuera. Aquí, las apuestas de las principales agrupaciones políticas en los dos distritos más importantes. El primero, la madre de todas las batallas, es la provincia de Buenos Aires. Como cargos nacionales, allí se eligen tres Senadores (dos para el partido que gane, una para el que quede en segundo lugar) y 35 Diputados (se reparten 35 lugares proporcionalmente entre los partidos que obtengan más del 3% de los votos). El segundo es la Capital Federal, donde se eligen 13 Diputados (con el mismo sistema que en Buenos Aires y en el resto de las provincias).
1País
La alianza que incluye al Frente Renovador y al GEN pone toda la carne al asador en la carrera por las bancas de Senadores Nacionales por la provincia de Buenos Aires. Apostando a la victoria, postula a los dos líderes que cranearon la alianza a pesar de sus diferencias: Sergio Massa y Margarita Stolbizer. Ninguno de ellos se asegurará entrar, cosa que sí hubieran logrado si se hubieran candidateado a Diputados Nacionales. Esa lista la encabezan Felipe Solá y Mirta Tundis.
Según las encuestas más optimistas, pueden obtener un segundo lugar que le daría una banca a Massa pero excluiría a Stolbizer. Difícil de entender, entonces, la decisión de la dirigente de Castelar. Sí ingresarán diputados, puesto que no será fácil para el Frente Justicialista correrlos del tercer lugar.
En Capital, en tanto, las listas serán de bajo perfil político pero alto perfil mediático. Les fue complejo reclutar dirigentes experimentados en un distrito que históricamente les ha sido esquivo. Sin embargo, sí lograron que compitan como precandidatos a Diputados Nacionales dos personas muy conocidas: el economista Matías Tombolini y la especialista en seguridad deportiva Florencia Arietto. El objetivo es alcanzar el cuarto lugar, y no es imposible.
Cambiemos
La alianza gobernante tiene una tensión permanente por cargos entre los partidos que la componen (PRO, UCR y Coalición Cívica, en orden de reparto de poder). El reparto de lugares no fue la excepción. Para la elección de Senadores Nacionales por la provincia de Buenos Aires prevalecieron dos candidatos “amarillos puros”: Esteban Bullrich, que deja el Ministerio de Educación, y Gladys González, ex-ACUMAR. La aspiración de máxima es la victoria, pero si el gobierno pierde es muy probable que quede segundo y al menos ingrese Bullrich. Que 1País los desplace al tercer lugar sería un fracaso estrepitoso, pero también es un escenario factible (aunque improbable).
En la lista de Diputados Nacionales, en tanto, es mayor la heterogeneidad, puesto que hay una aliada externa en primer lugar (Graciela Ocaña), un hombre de la Coalición Cívica en el segundo (Héctor “Toty” Flores) y recién en el tercero aparece alguien del PRO (Guillermo Montenegro). Peor le fue a la UCR, que aparece recién en el quinto lugar (Fabio Quetglas), porque el cuarto es nuevamente para la Coalición Cívica (Marcela Campagnoli). Su idea es claramente ganar la elección y seguir sumando Diputados Nacionales para poder pelear con más soltura la aprobación de leyes.
El distrito PRO por excelencia, la Capital Federal, es el único del país en el que la alianza no se constituyó como tal: la UCR quedó afuera y juega con Martín Lousteau. Justamente, dejaron al centenario partido afuera para no habilitarle a “Guga” la posibilidad legal de competir en una PASO. Además, como cabeza de la lista (llamada “Vamos Juntos”) aparece la candidata más fuerte del espacio (Elisa Carrió). Ella, además, propició que la Coalición Cívica se quedara también con los lugares cuatro y cinco (Juan Manuel López y Paula Olivetto). Los puestos dos y tres fueron para el PRO (Carmen Polledo y Fernando Iglesias). La victoria allí es prácticamente segura; solo podría arrebatárselas el propio Lousteau.
Paradójicamente, la UCR encabeza varias listas en el interior, donde su estructura territorial es muy relevante para la coalición de gobierno. Queda por verse cómo se reparte el poder después de las elecciones, y habiendo dejado atrás este sutil desplante.
Frente Justicialista
Florencio Randazzo no dio el brazo a torcer, se quedó con el Partido Justicialista como tal y será el primer candidato a Senador Nacional por la provincia de Buenos Aires. Competirá secundado por Florencia Casamiquela, abogada de personas en situación de vulnerabilidad en Florencio Varela. Sin embargo, la disputa con Cristina Fernández de Kirchner desgastó al ex-Ministro, que quedó con poco apoyo y aun menos chances de pelear siquiera por la banca de Senador por la minoría.
Esta alianza sí tiene, en cambio, posibilidades de ingresar algunos Diputados Nacionales en esta jurisdicción. Los primeros lugares en la lista fueron para Eduardo “Bali” Bucca (intendente de Bolívar) y Juan Manuel Abal Medina, actual Senador Nacional. La randazzista “Maru” Zamarreño, el sindicalista Oscar Romero y el especialista en seguridad Marcelo Saín completan el quinteto inicial. Alcanzando un factible cuarto lugar, algunos de ellos (o incluso todos, dependiendo de los porcentajes) conseguirían bancas. Difícilmente le saquen el tercero a la fuerza de Massa y Stolbizer.
La alianza no compite en Capital Federal, distrito en el que el PJ competirá dentro de Unidad Ciudadana (en una coalición de nombre Vamos Juntos).
Frente Unidad Ciudadana
Cristina Fernández de Kirchner tomó una decisión que no parece muy estratégica: segura de ganarle a Florencio Randazzo en una primaria, desistió de competir con él y armó una alianza por fuera del PJ. Quizás supuso que algunos votos opositores se volcarían a intentar desprenderla del liderazgo de ese espacio político, pero probablemente hubiera ganado aun así.Sea como sea, ya es un hecho su candidatura a Senadora Nacional por la provincia de Buenos Aires, acompañada por su ex-Canciller Jorge Taiana. Sus expectativas son de victoria absoluta en este distrito, y no están lejos. Difícilmente alguien los desplace del segundo puesto: salvo un cambio radical en el contexto (información, coyuntura, etc.), la competencia es con Cambiemos por el primer lugar.
Una de las mayores sorpresas de todo el cierre de listas fue la nómina de Diputados Nacionales de este espacio, que está encabezada por una “tapada”: Fernanda Vallejos, economista de “La Gran MaKro”. El ex-titular del CONICET, Roberto Salvarezza, y el presidente del PJ de la provincia de Buenos Aires (!que forma parte de otra alianza!), Fernando Espinoza, irán detrás de ella. Seguramente, su aspiración es ingresar 10 o más Diputados obteniendo el mencionado primer o segundo puesto.
En Capital, en tanto, esta alianza se llamará “Unidad Porteña” y sí tendrá primarias. Competirán encabezando tres listas Daniel Filmus (con el apoyo “oficial”), Guillermo Moreno e Itai Hagman, que sorpresivamente se sumó a este espacio luego de ser aliado de Claudio Lozano en 2015. La idea es intentar arrebatarle el segundo lugar a Evolución Ciudadana en la elección general. Difícilmente bajen del tercero.
Frente de Izquierda y de los Trabajadores
El cierre del FIT fue complejo esta vez, porque la idea era evitar una primaria como la del 2015. Una particularidad de esta fuerza es que, dado que sus integrantes saben que no tienen ninguna posibilidad de llegar al segundo lugar en la provincia e ingresar un Senador Nacional, el puesto más codiciado es el primero de la lista de Diputados Nacionales, que fue para Nicolás Del Caño. Néstor Pitrola, en tanto, será primer candidato a Senador. Sus expectativas son módicas: superar su buena performance de 2015 e ingresar así 1 o 2 Diputados Nacionales. Si son más, mejor aún.
En la Ciudad de Buenos Aires tampoco habrá internas en esta fuerza: uno de sus referentes en el distrito, Marcelo Ramal, encabezará la lista. El objetivo es renovar la banca que se vence y, en lo posible, sumar una más.
Evolución Ciudadana
Si bien esta fuerza solo compite en la Ciudad, es ineludible mencionarla. Martín Lousteau (recostado sobre la estructura de la UCR) paralizó más de un corazón amarillo en la segunda vuelta para Jefe de Gobierno en 2015, cuando perdió por muy pocos votos contra el candidato oficialista Horacio Rodríguez Larreta. Esta vez, encabeza la lista pensando con la aspiración de máxima de ganar la elección y con la idea de, mínimamente, consolidarse como segunda fuerza. El quinteto se completa con los radicales Carla Carrizo, Álvaro de Lamadrid y Mariano Genovesi y la socialista Paula Stregger.
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