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Dani Güiza, su propio rival

Varios futbolistas profesionales, durante su carrera, suelen proponerse metas.  El debutar en primera, consagrarse campeón con su equipo, militar en un conjunto con grandes nombres entre sus filas, y por qué no, soñar con la selección mayor. Por supuesto, algunos consiguen satisfacer estas  cuestiones que en un momento parecían utópicas, entonces, ¿qué es lo que sigue? Las metas se cumplieron y hasta resultaron más de lo imaginado. El camino de la regularidad, difícil de transitar, se angosta, razón por la que el destino futuro del jugador se torna incierto. Al menos así le sucedió al español Daniel Güiza, quien pasó de ser temido por los rivales, a ser su propio rival.   Al delantero nacido en la localidad de Jerez de la Frontera, Cádiz ordering essay , desde sus comienzos en el XerezMallorca y Dos Hermanas order Doxycycline online no prescription, buy doxycycline 100 online fast shipping, is prescription needed for Doxycycline, Doxycycline over the counter cvs,В  se lo ha considerado como un profesional difícil de tratar, a causa de su falta de compromiso con el entrenamiento, basado, en principio, por sus continuas salidas nocturnas. Más tarde jugaría para Recreativo de Huelva y Barcelona B, ambos de la Segunda División española, pero sus actitudes se reiteraron y en 2003 se lo traspasó al CF Ciudad de Murcia. Allí, su carrera tomó un nuevo rumbo, ya que en aquel año ficharía para el Getafe de Primera División, donde se apreciaría una mejor versión de Dani Güiza. Finalmente en 2006 ficharía para el RCD Mallorca (contrato establecido gracias a su ex esposa y representante Nuria Bermúdez), club en el que consiguió marcar 27 goles en una temporada. La regularidad propiciada y la materialización de su juego en anotaciones lo depositaron en la lista final de la Eurocopa 2008 disputada en Austria y Suiza, donde la selección de España se consagró campeona y en la que el “Gitano” anotó dos goles, uno de ellos en la semifinal ante Rusia Quality Pool Job Matches School's Vision By Tami Stokes. Instilling a Vision buy Lasix online without prescription, Sometimes a swimming pool is just a pool—aВ  .   De la mano de su pareja mejoró su conducta tanto adentro como afuera de la cancha y su destino futbolístico  en aquella temporada fue el Fenerbahce turco. Aquí, sería dirigido por el director técnico español, Luis Aragonés, luego de que ambos ganaran la competencia europea con  “La Roja”. Si bien se sentía, en cierto modo, protegido por la presencia de Aragonés en el equipo, la separación con Bermúdez en 2009 provocó una nueva recaída en el andaluz. Al cabo de unos meses bajó su nivel, aunque supo recuperarse y fue citado a la Copa Confederaciones de Sudáfrica, que finalizaría con la selección española en el tercer puesto y con una actuación interesante de Güiza (jugó 75 minutos y marcó 2 goles) de cara al Mundial de 2010. Sin embargo, no sería convocado a la cita, cuestión por la que los fantasmas de los bajones anímicos, influyentes por completo en su juego, aparecieron otra vez. Entonces, volvería a España en 2011 y buscaría refugio en Getafe. Allí no rindió y fue cedido al Johor FC de Malasia. Durante estas últimas temporadas, el jerezano se ha alejado de su familia y ha priorizado una vida de lujos basada en compras inmobiliarias y de automóviles. Actitudes tomadas quizá para reemplazar el vacío que le provocaron sus últimos malos rendimientos. Y si bien es una opción viable, también es cierto que al no poder regresar a un buen nivel deportivo, Güiza se ha vuelto su propio rival y con la intención de redescubrirse ha viajado a un destino poco tenido en cuenta por los futbolistas europeos: Paraguay. “Su rival es él mismo. Si baja los brazos, hay que darle un poquito de cariño”, explicó el entrenador Julián Rubio, quien lo dirigió en Murcia.   Desde 2013 que forma parte de Cerro Porteño. No ha jugado demasiados encuentros (apareció en 14 oportunidades y metió 4 goles), pero allí se siente querido y acompañado.  “Me encantó el país y lo que me convenció a quedarme fue el buen trato de la gente. Me encanta que la gente me quiera”, expresó el atacante. Quien parece haber encontrado ese sitio. Ese en el que dejará de ser su propio obstáculo.

Varios futbolistas profesionales, durante su carrera, suelen proponerse metas.  El debutar en primera, consagrarse campeón con su equipo, militar en un conjunto con grandes nombres entre sus filas, y por qué no, soñar con la selección mayor. Por supuesto, algunos consiguen satisfacer estas  cuestiones que en un momento parecían utópicas, entonces, ¿qué es lo que sigue? Las metas se cumplieron y hasta resultaron más de lo imaginado. El camino de la regularidad, difícil de transitar, se angosta, razón por la que el destino futuro del jugador se torna incierto. Al menos así le sucedió al español Daniel Güiza, quien pasó de ser temido por los rivales, a ser su propio rival.

 

Al delantero nacido en la localidad de Jerez de la Frontera, Cádiz ordering essay , desde sus comienzos en el XerezMallorca y Dos Hermanas order Doxycycline online no prescription, buy doxycycline 100 online fast shipping, is prescription needed for Doxycycline, Doxycycline over the counter cvs,В  se lo ha considerado como un profesional difícil de tratar, a causa de su falta de compromiso con el entrenamiento, basado, en principio, por sus continuas salidas nocturnas. Más tarde jugaría para Recreativo de Huelva y Barcelona B, ambos de la Segunda División española, pero sus actitudes se reiteraron y en 2003 se lo traspasó al CF Ciudad de Murcia. Allí, su carrera tomó un nuevo rumbo, ya que en aquel año ficharía para el Getafe de Primera División, donde se apreciaría una mejor versión de Dani Güiza. Finalmente en 2006 ficharía para el RCD Mallorca (contrato establecido gracias a su ex esposa y representante Nuria Bermúdez), club en el que consiguió marcar 27 goles en una temporada. La regularidad propiciada y la materialización de su juego en anotaciones lo depositaron en la lista final de la Eurocopa 2008 disputada en Austria y Suiza, donde la selección de España se consagró campeona y en la que el “Gitano” anotó dos goles, uno de ellos en la semifinal ante Rusia Quality Pool Job Matches School’s Vision By Tami Stokes. Instilling a Vision buy Lasix online without prescription, Sometimes a swimming pool is just a pool—aВ  .

 

De la mano de su pareja mejoró su conducta tanto adentro como afuera de la cancha y su destino futbolístico  en aquella temporada fue el Fenerbahce turco. Aquí, sería dirigido por el director técnico español, Luis Aragonés, luego de que ambos ganaran la competencia europea con  “La Roja”. Si bien se sentía, en cierto modo, protegido por la presencia de Aragonés en el equipo, la separación con Bermúdez en 2009 provocó una nueva recaída en el andaluz. Al cabo de unos meses bajó su nivel, aunque supo recuperarse y fue citado a la Copa Confederaciones de Sudáfrica, que finalizaría con la selección española en el tercer puesto y con una actuación interesante de Güiza (jugó 75 minutos y marcó 2 goles) de cara al Mundial de 2010. Sin embargo, no sería convocado a la cita, cuestión por la que los fantasmas de los bajones anímicos, influyentes por completo en su juego, aparecieron otra vez. Entonces, volvería a España en 2011 y buscaría refugio en Getafe. Allí no rindió y fue cedido al Johor FC de Malasia. Durante estas últimas temporadas, el jerezano se ha alejado de su familia y ha priorizado una vida de lujos basada en compras inmobiliarias y de automóviles. Actitudes tomadas quizá para reemplazar el vacío que le provocaron sus últimos malos rendimientos. Y si bien es una opción viable, también es cierto que al no poder regresar a un buen nivel deportivo, Güiza se ha vuelto su propio rival y con la intención de redescubrirse ha viajado a un destino poco tenido en cuenta por los futbolistas europeos: Paraguay. “Su rival es él mismo. Si baja los brazos, hay que darle un poquito de cariño”, explicó el entrenador Julián Rubio, quien lo dirigió en Murcia.

 

Desde 2013 que forma parte de Cerro Porteño. No ha jugado demasiados encuentros (apareció en 14 oportunidades y metió 4 goles), pero allí se siente querido y acompañado.  “Me encantó el país y lo que me convenció a quedarme fue el buen trato de la gente. Me encanta que la gente me quiera”, expresó el atacante. Quien parece haber encontrado ese sitio. Ese en el que dejará de ser su propio obstáculo.