Un miércoles cualquiera en algún bar de Palermo, donde al rato tocarán Jaque Reina y Cazacuervos, en medio del bullicio y el ruido de una de las zonas más transitadas de Capital Federal nos encontramos con Marilina Bertoldi, que al comenzar la entrevista le roba un trago de la cerveza a este cronista en protesta por el robo de su vaso. Tiene cien años de perdón. Bueno, mil.
Este viernes 20 de noviembre llega junto a Guillermo Porro, Luciano Farelli, Eduardo Giardina y Daiana Azar a Niceto por primera vez como solista para cerrar el año a lo grande, repasando temas de “El Peso Del Aire Suspirado” y “La Presencia De Las Personas Que Se Van”, sus dos discos solista, y adelantando material que formará parte del álbum que saldrá el año que viene.
RNB: ¿Cómo te preparas para Niceto? ¿El show en La Trastienda que fue como una “prueba de fuego” para ustedes?
MB: Sí, es muy loco lo que hicimos ahí ya que fue el inicio de la gira que íbamos a hacer, por lo cual fue un show en el que estábamos viendo que onda y este será el principio de ver qué onda el año que viene. Vamos a hacer un show en el cual plantearemos una puesta en escena, una escenografía y una orquestación donde ya vamos a ser cinco, no somos más cuatro. Empezamos a trabajar otra dinámica más ambiciosa, nunca antes había trabajado la escenografía tan en detalle.
RNB: ¿Cómo congenió la banda con la vuelta de Guillermo Porro?
MB: Somos como una familia y nos amamos. Es increíble lo que se está logrando porque además de amigos y multi instrumentistas que somos todos, yo no me incluyo, pero son todos productores, entonces estamos en todos los detalles. Es muy lindo, aprendo mucho. A la vez estamos empezando a tocar temas que van a empezar a salir que están en el próximo disco, que sale a principios del año que viene, así que va a estar todo tirado para ese lado.
RNB: Hablando de los temas nuevos, ¿Cómo fue la concepción de estos? ¿Los trabajaste sola o con la banda? ¿La producción fue igual a tu disco anterior?
MB: En el comienzo, pobres los chicos, les pedí por favor que me tengan paciencia. Tuve la necesidad de iniciar las canciones sola desde componerlas y trabajarlas en una producción casera con un programa de edición. Empecé a grabarme y ahí si se los mostré a quien va a ser el productor de mi próximo disco, que es Guillermo Porro, quien ya lo está produciendo y que empezaremos a grabarlo dentro de poco. Los chicos, más allá de que Guillermo es el productor, están muy metidos en la parte artística. Comenzó así de parte mía porque tengo ganas de que sean muy personales tanto la estética como la producción, que no busque ser parte de cualquier género sino que tenga esa desprolijidad que me caracteriza.
RNB: (interrumpo) ¿Sale en formato físico? ¿Tendrá las mismas características que el anterior?
MB: No lo sé. Todavía no puedo confirmar que saldrá el “físico”, creo que sí, pero inicialmente va a salir por las redes, que es lo que hoy en día más se usa. El físico es como un suvenir que hoy en día te llevas de un show, es poca la gente que lo pone en la casa, es complicado. Siempre está bueno como propuesta, a modo presentación pero desde lo artístico, estoy más metida en lo que es la musicalidad.
RNB: ¿Hay una idea de nombre ya?
MB: Sí (rotundo). Va a ser muy polémico pero todavía no lo estoy comunicando para darme la oportunidad de cambiarlo, aunque no creo arrepentirme ya que me gusta mucho. El disco es polémico pero no desde lo amarillista sino desde otro lado. Me metí mucho en la temática con la que venía coqueteando previamente con Connor Questa pero más que nada con el último solista, que es una temática sensual, hablando de sexo, de la insinuación, eso me encanta. Me gusta provocar pero desde un lugar muy cuidado, desde lo que no digo, en realidad. Son más las cosas que no digo que las que digo, me gusta ese misterio.
RNB: (interrumpo) Siempre perdón a la abuela “Potota” primero…
MB: (risas) Últimamente me está importando muy poco lo que opine mi familia, lo cual habla mucho de lo que va a ser el próximo material pero me encanta ya que siempre admiré a este tipo de artistas y me di cuenta de que si lo necesitaba como una búsqueda personal, tenía que hacerlo.
RNB: ¿Qué le cambió a tu equipo la presencia de Daiana (Azar)? ¿Qué cosas llevaste de tu “set solo” al “set eléctrico”? ¿Qué diferencias encontrás entre ambos respecto a tu desenvoltura en cada uno?
MB: Mas allá de que ahora todo músico que se integre al proyecto, aunque sean sesionistas y que no sea una banda, me gusta que cada uno deje su color impreso. Cada vez, a medida que pasa el tiempo, si llega a pasar que van mutando los músicos, ojala que no, honestamente, porque son mis hermanos y no me gustaría que suceda eso, pero si tiene que pasar va a pasar, claramente, me gusta que cada uno deje una marca. Lo que dejó la impronta de Daiana es algo muy lindo porque ella es una instrumentista increíble, toca todo de una manera hermosa, muy elegante y viene de otras raíces. No viene del rock, viene de la electrónica y el pop, es muy interesante tocar con gente que viene de ese palo porque en el rock estamos a veces muy enviciados con la distorsión, con las intensidades altas y hay veces que los silencios y los matices más chicos son más violentos que algunas notas. A veces son muy incómodos y violentos esos silencios. Ese tipo de cosas que aportó están buenas y, además, aprendí mucho sobre sintetizadores y cosas que nunca había experimentado.
Del set solo al eléctrico lo que mantengo es el voice live y el loop. Me gusta integrarlos sobre todo en las armonizaciones de las voces, ese es un muy buen ejercicio para cualquier cantante.
RNB: Ya que traes a colación lo de la loopera y el laburo de voces, ¿es por eso que elegiste hacer “Feeling Good” de Nina Simone? ¿Cómo elegís esas canciones que no son tuyas pero las haces propias con tu estilo?
MB: Cada una viene por alguna razón, obvio que musicalmente me tiene que gustar, pero me importa mucho lo que dice la letra, eso siempre significó algo para mí. “Feeling Good” lo hice en particular porque fue una forma de responder a algunas cosas que se dijeron por todo lo que sucedió en el inicio de año. Fue una manera de decir: “esto sucede porque tiene que suceder. No hay malos, no hay buenos, este es el ciclo de la vida… hay caminos que se tienen que transitar”. Desgraciadamente hay proyectos que uno ama y desarrolla con mucho amor y terminan, pero otras cosas comienzan y me siento muy bien con eso. Es lo que tiene que pasar, no lo que quiero que pase. Por otra parte, “Teardrop” fue elegida porque musicalmente la verdad que tenía una búsqueda muy interesante, para mi es una obra maestra. Definitivamente Massive Attack hizo un tema que es más que una canción… desde la poesía empieza diciendo “love is a verb… love is a doing word… fearless on my breath” el amor es un verbo, es una palabra que está en mi boca y no tengo miedo de decirla… es una paz, una bajada a tierra que era necesaria.
RNB: De todo lo sucedido a comienzo de año, ¿te pesa, tanto desde lo musical, por el cambio de estilo y la no distorsión, la insistencia por esas canciones que forman parte de otra etapa? ¿Te molesta ese reclamo egoísta de los seguidores?
MB: No, para nada, porque parte desde un cariño hacia algo que les tocó el corazón. A veces uno no se da cuenta de cuánto una canción puede afectar a una persona. Siempre fue dicho con respeto, nunca se me presentó nadie que me hable con violencia, al menos a mí en persona, así que no tengo ningún problema con eso. Siento que este año fueron diez años en uno, fue muy largo, intenso, lindo, productivo… ¡no paré un segundo! Yo siento que Connor Questa terminó hace mucho más tiempo y todavía no pasó ni un año. Para el público, obviamente, es muy repentino. Hay que entender que cada uno tiene sus tiempos, creo que todo está llegando al puerto que tiene que llegar pero porque lo manejamos con esa paz que se requiere.
RNB: Sos una mina que tiene un humor particular y no te molesta mostrarlo, ¿tenés pensado hacer algo con eso? Además, hay una química particular con tus compañeros…
MB: (risas) No, yo soy cantante nada más, pero me gusta mucho hacer humor. Los que más me conocen en la intimidad saben que soy un payaso, que no paro nunca de decir pelotudeces. Me gusta mucho imitar voces, cantando o hablando, entonces me liberé y empecé a hacerlo, sobre todo porque recibí una linda respuesta. Mientras no afecte lo que hago y no me saque de un tono serio, está todo bien. Cuando uno es solista tiene que dejar salir lo que uno es, más que nunca. Sos un personaje no actuado, entonces el humor es una manera de hacer que eso salga, sirve para relajar, para sacar esa tensión y decir “está todo bien. Yo soy así, ¿querés pensar que estoy loca? ok”. Es muy loco pensar a veces cuando uno se quiere reír de algo piensan que estás loco, pero esa soltura se logra no solo mediante canciones sino mostrar sin ninguna careta lo que uno es.
Fotos de Edu873 para Rock And Ball
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