Seda Carmín no levanta banderas, pero a la vez ejerce una libertad que parece coartada en el mundo del rock. Galopando siempre entre el rocanrol, el punk, el rockabilly y varios géneros más, una de sus cualidades es tener una mujer en la voz principal, un territorio que en ese ambiente de rock barrial siempre pareció cercado solo para hombres.
“Flashe” en la Trastienda el 24 de marzo, su cantante Analía Boccomino cuenta como se preparan para el show y hablan de los prejuicios en el género.
Rock And Ball: ¿Qué tienen preparado para la presentación?
Analía Boccomino: Estamos con todo. Vamos a tocar todos los temas pero no en el orden del disco. Quisimos elegir un lugar lindo como La Trastienda y que suene bien para hacerlo a todo trapo. La última vez que habíamos tocado fue en Obras teloneando a La Beriso que es un estadio mítico, pero para nosotros queríamos algo más íntimo, como para vestirse de gala. También vamos a tener varios invitados que también estuvieron en el disco. Rolo de La Beriso, Álvaro Villagra y quizás aparezca Pity Álvarez… Viste como son los rockeros.
RNB: Con Pity tienen una amistad de años…
AB: El Pity es más colgado, y puede caer o no. Vino a shows que no lo esperábamos y a otros que sí lo habíamos invitado no vino. Nosotros somos de Villa Lugano y nos cruzamos en festivales, ahí nació la amistad. Pegó mucha onda con nosotros y compartimos momentos musicales. Él me aconseja y yo a él. Es una amistad musical. Pero no solo con él. Lugano tiene una identidad rockera. Los Jóvenes Pordioseros son amigos también y nuestro productor es Jorge Rossi que fue el bajista de Gardelitos e Intoxicados. Viene todo en familia. Más allá que sean del barrio son bandas que nos gustan mucho. Y un poco al ser la chica rockera soy como la mimada de la camada.
RNB: ¿Sentís que estás sola en este ambiente?
AB: Siempre me hablan de referentes y yo basé mi carrera escuchando a bandas en las que cantan hombres. Me encanta Fabiana Cantilo y también Hilda Lizarazu, son cantantes hermosas pero no es que me hayan influenciado tanto. De acá me gusta lo que hace Lula por ejemplo, pero no hay bandas en las que tenga referentes. Aunque mi estilo es femenino, no creo que tenga una referente mujer en este género. El argentino es todavía medio cerrado. A nivel internacional hay más chicas en el rock pero acá cuesta todavía abrir el juego, como pasa en festivales por ahí. Cuesta que abran la cabeza en ese sentido. No me gusta caer en la disputa de qué es feminismo y machismo, pero el cambio está en cada persona, y todos son cerrados en general. Igual tengo buena aceptación en general. Siempre tocamos en el Oculta rock, que es un festival bien de barrio en el que toca Viejas Locas, Los Jóvenes Pordioseros y aparece una chica rubia… Y cuando se dan cuenta que soy rockera en serio, se acaba un poco ese prejuicio. Como cualquier otro desde chica vengo con esto. Cargando instrumentos. Aprendiendo y fogueándome por todos lados.
RNB: ¿Te costó lograr esa apertura de cabezas?
AB: Es que ven y dicen “ah, ¿canta una chica?”. Lo que quisimos hacer no ser una banda que sea de una chica al frente. Es una banda de canciones, yo noto que falta. Ese tipo de personalidad. Hay un montón de bandas con re buenos cantantes pero siento que faltan más personalidades. Y eso es lo que me gusta a mí. Que todos se sientan identificados con lo que canto y la música que suena, ya sean hombres y mujeres. Romper un poco esa barrera.
RNB: ¿Sentís una responsabilidad por eso?
AB: Muchas chicas me mandan covers, versiones de ellas, y les digo que se manden para adelante, no que solo queden de coristas en la banda de rock. Que esa es la típica. Siempre les doy un empujón para que armen su proyecto con sus canciones.
Un abrazo del rock
En 2016, a Analía le diagnosticaron un linfoma de hogdkin, cáncer que afecta el sistema inmunológico. Mientras estuvo realizando el tratamiento de quimioterapia, en julio de 2017, muchos músicos se acercaron a la fecha que realizó Seda Carmín en San Justo y sin que ella supiera nada, crearon el #RockPorAni, un festival para darle su apoyo y buena energía.
Al respecto, recuerda que “Fue un problema, o problemón de salud, y sin que yo supiera nada se juntaron un montón de artistas. Como dándome un abrazo para hacerme el aguante y tirarme buena energía. Bandas como El Bordo, Eruca sativa, Sueño de Pescado. Todas dijeron que sí, yo no organicé nada pero todos aparecieron. El Fachi de Viejas Locas, Los Pérez García. Había más bandas de las que podían tocar porque querían hacerme llegar su cariño. Es lindo que nos unamos para esas cosas. Más allá del que cree en dios y el que no, tirar buena onda desde el lugar de uno. No suelo hablar de estas cosas, pero pienso que está bueno demostrar que se puede, salir adelante, y que si nos unimos es mejor. Le puede pasar al rockero, al almacenero, a cualquiera. Nadie es inmortal como algunos piensan”.
RNB: ¿Y actualmente cómo te encontrás de salud?
AB: Estoy mucho mejor, haciendo vida normal, pero sigo con el tratamiento. Nada que ver con lo de antes, no me hace tan mal, pero no puedo darle ventaja. Por un tiempo tengo que seguir con los controles pero ya los doctores me hablaron, y puedo hacer vida normal. Vengo muy bien aunque siempre tenés miedo de que haya una recaída. Es un problema de los ganglios. A mí de un día para el otro se me empezó a inflamar un ganglio y Linfoma de Hogkin. Jamás había tenido nada, y me dijeron que era normal tener un pico a esta edad, re joven, un bajón pero bueno. Tuve que enfrentarlo así que hay que festejar muchas cosas. El rock es el remedio que faltaba. Tener algo así, en esos días que uno se pone triste, es lo que me hace levantar y luchar por eso. Es lo que tengo yo para motivarme.
RNB: Después de la fecha del 24 de marzo, ¿qué viene en el año para Seda Carmín?
AB: Tocar en todos los lugares que podamos, nos vienen pidiendo que vayamos a tocar si se puede este año va a estar más tranquilo por lo que pasó, pero quizás podamos ir a tocar a México, así que, con varios proyectos. Ese es el objetivo. Siempre el sueño es llegar a la mayor cantidad de lugares, como siempre a los lugares que vamos hay una buena respuesta, es andar por la ruta y que nos conozcan.
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