“Si hay algún lugar al cual nosotros realmente queremos llegar es al corazón de todos ustedes y al de todos los que están afuera y no conocen todavía esta movida”, lanzó Gustavo Fabián Nápoli, alias “Chizzo”, cantante y guitarrista de La Renga. Fue después de que “El Rito De Los Corazones Sangrando” retumbara pasada la medianoche e hiciera temblar las cuatro paredes del templo del rock nacional.
Aquel 20 de noviembre de 1994, Obras Sanitarias fue testigo de una noche para el recuerdo, en la que el trío completado por los hermanos “Tete” y “Tanque” Iglesias subían un escalón tan importante como esperado para consagrarse como el grupo revelación de rock.
La realidad es que se les estaban acabando los lugares donde tocar: el Galpón y Cemento ya les quedaba chicos, Stadium había cerrado y Obras era la única opción a corto plazo, al tiempo que sus seguidores se multiplicaban exponencialmente con el boca en boca. Luego vendrían los Atlanta, Huracán, River y Vélez…
Un cuarto de siglo pasó y prácticamente nada cambió para los muchachos. El mundo sí mutó hacia la era digital: es por eso que ya no sorprende que ellos también usen Youtube para subir dos de las canciones que formaron parte de la lista de aquel viernes 20 caluroso de Nuñez.
“Somos Los Mismos De Siempre” y “La Nave Del Olvido” fueron las elegidas para celebrar las Bodas de Plata de un show que marcó un antes y un después no solamente para ellos, sino también para el rock nacional en general.
Un dato curioso: el debut en el coloso de Avenida Libertador se realizó después de las 12 porque la cancha estaba reservada para que el equipo de básquet local jugara su partido de la Liga Nacional.
Dicho recital quedó documentado en el primer disco en vivo de La Renga, “Bailando En Una pata”, lanzado en 1995. Actualmente están en vísperas de sacar a las calles (y a las redes) su décimo trabajo de estudio y una posterior gira para promocionarlo. Ya adelantaron dos canciones contundentes: “Llegó La Hora” (un presagio de lo que sucedió el 27 de octubre) y “Parece Un Caso Perdido”.
Por Joaquín Vacca
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