Como si al pueblo argentino le faltaran motivos para festejar esta última parte del año, una muy buena noticia ha llegado a oídos de fanáticos del Rock Argentino en lo que refiere a Rock de antaño: el último 21 de diciembre se estrenó, vía YouTube, el documental “No Llores por mí, Argentina. A 40 años de Serú Girán en Obras”.

Con la dirección, producción, guión y edición, entre otras, de Lautaro Guido Pavía, el film propone repasar los míticos cuatro conciertos de entre el 5 y 7 de marzo de 1982 en el estadio Obras Sanitarias, previos a la virtual separación del grupo por la partida de Pedro Aznar por estudios a la Berklee College of Music, de Boston (EEUU). El mismo cuenta con material inédito puesto de manifiesto por primera vez.

El documental “A 40 años de Serú Girán en Obras”.

Además, se suman testimonios de los principales actores de reparto: Gustavo Gauvry (técnico de monitoreo y grabación), Amílcar M. Gilabert (técnico de sonido y grabación) y Juan José Quaranta (técnico de iluminación), además las presencias de Alfredo Rosso (histórico periodista de rock) y Gustavo García, un coleccionista de recitales que tuvo el buen tino -junto con Oscar Herrera de grabar este en cassette. La buena calidad del aparato reproductor y la buena calidad sonora de la banda dejaron un rico pergamino musical sobre cómo sonó realmente ese concierto.

Es válido recordar que el mismo fue sobregrabado y corregido en estudio, dejando una leyenda mitad real mitad ficticia de lo que realmente se escuchó esa noche. Como si fuera poco, canciones que ya eran o luego pertenecieron a discos solistas (tales como Oh, Dios, qué puedo hacer o María Navidad, de David Lebón) no llegaron al corte final y aquí son puestos nuevamente en valor.

El álbum original, No Llores por mi, Argentina

El proyecto -contó el director en exclusiva a Rock N’ Ball– fue diseñado a fines de 2021. Para la mitad de ese año, había acercado a las redes sociales de Serú, junto con Gustavo García, el material fílmico de las presentaciones en el predio de La Rural ante 60.000 personas en 1980. Ante la exitosa resonancia que tuvo esto, decidió dar un paso más y encarar el proceso de armado de la revalorización de la primera fecha de No Llores por mí, Argentina, la del 6 de marzo. El trabajo tomó desde febrero hasta agosto del año corriente. 

Lo que sí llama la atención, fuera de los importantes registros con los que cuenta esta película, es la ausencia de testimonios de dichos músicos. “Me hubiera gustado tener a los tres, pero no hubo posibilidad. Tanto Lebón como Aznar estaban de gira presentando sus discos solistas, pero contamos con la aprobación de todos ellos, que vieron el film previamente”, aclaró Lautaro.

Charly vs. la maldita policía

Entre las muchas joyas con las que cuenta esta película -la versión en inglés de Peperina, una versión de Yendo de la Cama al Living cantada por Lebón-, una bruta perla que esconde es el audio original de un famoso cruce que tuvo Charly García con un policía del lugar. Sin embargo, el mito había apantallado la información original, que por fin se devela.

En el cuento popular, García había visto como un policía se llevaba a un muchacho y, avisorándolo desde el escenario, le dice:

Mirá que somos 5.000 contra uno, ¿eh? ¿Qué vas a hacer?

La trenza no fue exactamente así: en efecto, Charly divisa a una policía llevándose a alguien del lugar -mientras interpretaban Viernes 3 A.M.– y, sin dejar de tocar, le avisa:

  • Si esa mujer que está ahí llevándose gente en cana no se va, no tocamos más, loco. Que se vaya ya esa mina. Vos, ¡largo! Esto es un recital, loco, no es una comisaría, ¡largo!

Potente voz en un momento donde no era nada sencillo encarar a la policía. Si bien la dictadura/fuerzas armadas estaban “en retirada” (faltaría un año, y aun sin la Guerra de Malvinas presente), las razzias y las arrastradas a la comisaria de parte de los infantes para/con los músicos era moneda corriente. “Me hubiera gustado ver la reacción en vivo de los músicos cuando escucharan de nuevo ese audio”, reflexionó el director al respecto. Si bien puede especularse con la memoria que cada uno de ellos tendrá, no puede negarse la importancia y peso específico de este episodio que no hace otra cosa que exaltar a uno de los músicos más importantes que ha tenido y tiene este país, una vez más.