No es novedad que con el confinamiento obligatorio y la necesidad de mantener el distanciamiento social, el sector artístico se vio vulnerado (y sin fecha cercana de regreso). En medio de la incertidumbre, los trabajadores de la música se encuentran en una situación compleja y las alternativas parecen ser para pocos. Por eso, desde Músicxs Organizadxs reclaman por una respuesta estatal rápida y eficaz.
Desde el comienzo de la pandemia, el colectivo Músicxs Organizadxs –nacido en 2011- reclaman por una respuesta estatal rápida y eficaz desde sus redes sociales. En su Instagram, invitan a distintos músicos para difundir su situación. También convocaron a “twittazos” y a festivales online. El martes pasado, al no recibir respuestas por parte del Estado, se movilizaron frente al Ministerio de Cultura de CABA. Fueron alrededor de 40 personas, respetando la distancia social y los cuidados sanitarios. Hubo escenario, micrófono abierto y música.
En charla con Rock ‘N Ball, Luis Mauregui –músico y referente de Músicxs Organizadxs– dijo: “Hemos llegado a este punto porque las concentraciones virtuales que habíamos realizado no dieron ningún tipo de resultado ni en CABA, ni en provincia, ni en nación”. También, aseguró que ninguna de las ofertas de los funcionarios se acerca a sus necesidades. Asimismo, Germán “Pecho” Anzoategui –referente de la organización y músico de Las Manos de Filippi– aseguró que la situación es crítica: “Es bastante desesperante. Nosotros, apenas empezó el confinamiento, ya habíamos dejado de trabajar porque fuimos los primeros. Seríamos los últimos en volver a la actividad laboral”.
A comienzos de la pandemia, la organización realizó un empadronamiento de músicos en el que ya hay más de cinco mil inscriptos. La convocatoria se hizo desde las redes sociales. “Es una manera de poner en evidencia lo que planteaba Alberto Fernández en la conferencia del sábado. En un momento dice que esta pandemia pone en relieve a todo un sector que estaba invisibilizado. Nosotros buscamos visibilizar esa cuestión y decimos ‘esta gente necesita ayuda urgente y no sabe cuándo va a volver a trabajar”, agregó Mauregui.
Tanto del Ministerio de Cultura de CABA como el de nación alegaron que no tienen presupuesto porque está todo invertido en salud. “De nación igual nos ofrecieron anotarnos en unos subsidios muy azarosos que difícilmente podamos acceder y si lo hacemos, difícilmente seamos todos los empadronados. De hecho, el INAMU largó un empadronamiento y solamente pudieron ayudar a los 1200 de los miles que seguramente tienen”, dijo Anzoategui.
El pedido principal es una compensación económica de 30 mil pesos mientras dure la crisis sanitaria. Proponen financiarlo con un impuesto extraordinario a las OTT –que son las empresas extranjeras que ofrecen servicios de streaming-, que según la organización “son las grandes ganadoras de esta pandemia mientras los músicos ganan migajas”.
“Sabemos que el presupuesto de cultura fue a salud y entendemos que es lo más importante. Creemos que hay que legislar ya sobre este tema. Así como fue el impuesto al cigarrillo cuando se tuvo que aumentar el salario de los docentes. Las OTT como Netflix, Flow, Spotify –que se cobran en dólares- no tienen ningún impuesto. Desde el Ministerio de Cultura escucharon esta propuesta con mucha atención, le tenemos fe”.
“Pecho” Anzoategui se refirió a la importancia del impuesto a las OTT
También, sugirieron realizar conciertos virtuales con los músicos empadronados y artistas de otras ramas; la exención del pago del monotributo y reclamaron para que no haya más despidos en empresas y orquestas estatales.
Desde el Instagram de Músicxs Organizadxs ya anunciaron una asamblea en la que se va a hacer un balance de la concentración y también se van a debatir nuevas iniciativas.
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